martes. 30.04.2024
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Combatir las colas del hambre en Huelva

40 gladiadores luchan a diario para combatir las colas del hambre en Huelva en el comedor Virgen de la Cinta.
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Combatir las colas del hambre en Huelva

CHOQUERÍAS

40 gladiadores luchan a diario para combatir las colas del hambre en Huelva en el comedor Virgen de la Cinta

Mi primer contacto con el Comedor social Virgen de la Cinta lo tuve unos años atrás cuando me llamó mi gran amiga y ex compañera, ex jefa y excelente persona siempre presta a ayudar a los demás, Dolores Gómez. Ella me preguntó: ¿Carmelo te gustaría ser secretario del comedor?

En aquellos días yo andaba liado con el problema que los okupas habían creado en mi barrio, Costa de la Luz. No obstante, una día acudí y me reencontré con mi amigo Pedro, que era quien en esos momentos ocupaba el cargo. Me enseñó el magnífico trabajo que realizan y con las instalaciones con que este centro está dotado y la dinámica de trabajo. Nos despedimos y dije “ya veremos”. Unos días después cuando ya tenido decidido aceptar el encargo de un nuevo y apasionante servicio a los demás me llamó Lola y me dijo: “Carmelo, la presidenta ya ha conseguido cubrir el puesto con una hermana o amiga suya”. Me alegré enormemente porque veía importante que antes que nada en una junta de una asociación era muy importante el conocimiento de unos y otros. Y yo iba a ser un recién llegado.

Hace unos días volvía de la Hermandad de Emigrantes, que también realiza una gran labor social, más de lo que muchos pensábamos. Pedí permiso al seguridad que se encontraba en la puerta para realizar una fotografía donde no se viera la cara de ninguna persona. Era la cola del hambre. A la entrada, entregando los alimentos en sus tapes, se encontraba un viejo conocido. Aprovechando esta circunstancia le pedí permiso para entrar el comedor y charlar un rato con esos desinteresados voluntarios que día tras día da lo mejor de ellos mismos para ayudar a sus hermanos.

Conocí a Sonia, encargada del comedor, que en esos momentos se encontraba entre los fogones. Me pudo atender y me contó que diariamente dan servicio a 220 personas, aunque a ellos le gustaría poder ayudar a muchas más personas que en estos tiempos de pandemia están pasándolo mal. Le pregunté: ¿Necesitáis ayuda? A lo que me contestó: “sí, pero no de voluntarios. Necesitamos más alimentos y ayuda económica”.

Hoy quiero pedir desde esta tribuna que diariodehuelva.es me brinda para hacer un llamamiento para que aportemos nuestro granito de arena, como ya están haciendo instituciones y empresas como el Puerto de Huelva, los ayuntamientos de Huelva y Palos de la Frontera, así como la Fundación Caixa, el suministro del Banco de Alimentos, y las colaboraciones de establecimientos como Mercadona Aldi.

Desde aquí felicitar a esos gladiadores que salen a diario al circo de El Molino comandados por su presidenta Carmen Vázquez y pedir que cuando veamos a los voluntarios en las puertas de nuestros supermercados solicitando un poquito de ayuda en forma de alimentos entreguemos sin dudarlo.

En los próximos días me consta que la Hermandad de Emigrantes volverá a realizar su III Carreta Solidaria en colaboración con el Banco de Alimentos y el apoyo de Supermercados el Jamón. Será una edición especial tras suspenderse la del año pasado por la crisis sanitaria. Hoy más que nunca tenemos que ser solidarios.

Tampoco quiero olvidarme del trabajo que también realiza el comedor del Matadero, el comedor comunitario gestionado en Lepe por la Fundación Europea para la Cooperación Norte-Sur, los ayuntamientos de Bollullos par del Condado e Isla Cristina, que desde sus servicios sociales continúan trabajando también para combatir estas colas del hambre.

Carmelo Merchán Álvarez