viernes. 29.03.2024
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La solidaridad de los 'hiperinmunes' Covid facilita el tratamiento de casi 200 personas

Diariodehuelva.es ha hablado con dos hiperinmunes que han donado su plasma para poder "ayudar a los que más lo necesitan", y con la jefa de Hematología del Centro de Donaciones de Huelva que confirma la "importancia de donar plasma y sangre" ante el tratamiento del Covid-19.
La solidaridad de los 'hiperinmunes' Covid facilita el tratamiento de casi 200 personas

Han pasado el Covid-19, como miles de onubenses, pero su sangre está ayudando a las personas que luchan en los hospitales para superar esta enfermedad. Concretamente, su plasma está siendo uno de los mejores tratamientos que están facilitando la mejora y pronta recuperación de muchos de los enfermos Covid de la provincia. Tal y como ha confirmado la hematóloga del centro de Donación de Huelva, Lola Fernández, "la donación del plasma de las personas que ya han pasado por la enfermedad ha hecho posible que 184 personas se hayan tratado en la provincia".

La solidaridad mostrada por los pacientes de Covid-19 ya recuperados en nuestra provincia es uno de los "mejores recuerdos que tenemos en el centro de Donación, porque en cuanto se supo de la fiabilidad y efectividad de este tratamiento, cuando estuvimos informando a sanitarios y donantes habituales, corriendo notamos una ola de solidaridad que no ha parado a día de hoy", ha señalado Lola Fernández.

En este casi año de pandemia han sido más de 80 donaciones las que el centro ha recibido. Y es que "una persona puede donar varias veces al mes, pero vamos estudiando cada caso para asegurarnos de la seguridad del donante y poder hacer donaciones siempre seguras para todos. Por ello, recomendamos una sola donación al mes". La donación de plasma es "algo diferente" a la de sangre ya que "el plasma se extrae a través de un circuito cerrado, pasa por una centrifugadora que separa el plasma del resto de sangre. Así, una vez separado el plasma, el resto de componentes (plaquetas, glóbulos rojos y blancos...) se devuelve al donante gracias a este circuito cerrado. Es una donación que suele durar unos 40 minutos".

Este sistema favorece que los donantes de plasma no sufran consecuencias graves como pudiera ser la anemia. Por ello, "los donantes de plasma pueden donar en más ocasiones que los donantes de sangre total. Aunque es cierto, que de una donación de sangre también podemos extraer los elementos, con lo que si se necesita se extrae plasma de las donaciones totales de sangre".

Es muy importante recalcar que "para ser donante de plasma para los tratamientos en Covid, los donantes deben esperar a su total recuperación y haber pasado al menos 28 días sin ningún síntoma para poder ofrecer su plasma. Asimismo, el resto de requisitos son como para los de la donación de sangre: ser mayor de edad, no tener enfermedades importantes...", ha expuesto la hematóloga del centro de donación.

Para vigilar por la seguridad de los pacientes, donantes, trabajadores, "se hace a través de cita previa. Se realiza una llamada telefónica para informar al donante y realizarle un pequeño cuestionario, y posteriormente se le ofrece la información del procedimiento si nunca han donado. Una vez hecho esto, se le cita para realizarle la extracción y comprobar el nivel de anticuerpos y ver si es apto para la donación".

Testimonios de vida

Y este proceso no solo ayuda a los pacientes Covid sino que "salva vidas". Literalmente. Así lo ha confirmado el onubense Fermín Cabanillas, uno de los donantes 'hiperinmunes' que desde que descubrió que su plasma podía ayudar a más enfermos de Covid "se me quitó hasta el miedo a las agujas".

Fermín ha pasado la enfermedad "afortunadamente, sin problemas. Yo supe que era positivo porque pedí una PCR tras una semana fuera de casa trabajando. Quería estar seguro de que no me había contagiado, y la PCR dio positivo. Un día antes había perdido el olfato y el gusto, pero como soy propenso a la sinusitis no le di importancia".

Un hecho que le llevó a seguir investigando sobre su caso, ya que "cuando el 8 de septiembre había cumplido la cuarentena el médico me dijo que hiciese vida normal, y yo le dije que quería una PCR que confirmase que ya era negativo. Me dijo que no hacía falta, pero como no me fiaba decidí gastar 120 euros en hacerme una prueba en un laboratorio privado".

Esta insistencia de Cabanillas le dio como resultado una "prueba positiva, y entonces mi médica me dijo que me iba a pedir una serología, que dio positivo en anticuerpos. Me dijo que no podía contagiar a nadie y que había generado un anticuerpo muy fuerte, aunque siguiese dando positivo, y me aconsejó donar plasma. De modo que pedí cita en el centro de transfusión sanguínea, y tres semanas después me hicieron un estudio de sangre que determinó que tenía hiperinmunidad a la Covid".

Poco después, su iniciativa estaba salvando vidas y generándole mil y una experiencias inolvidables. "A mediados de octubre, una chica de Vitoria me pidió que fuese al hospital de su padre a donarle plasma, y le tuve que decir que no funciona así, pero que confiase en el médico. Por lo que me dijo, el padre estaba muy mal, y dos días después murió. Se llama Tino, y mi libro está dedicado a él y a tantos anónimos que han muerto por culpa del coronavirus. En lo positivo, una mujer de Alicante me mandó un mensaje parecido, y dos días después me dijo que su marido había recibido hiperplasma y le habían dado el alta. Tengo mil cosas que contar parecido en estos meses".

Vivencias que le hacen sentir como si tuviera "dos hijos. Decir que ha sido la mayor alegría de mi vida no sería justo, pero se le parece mucho. Cuando me enteré de que tenía hiperplasma, en Andalucía había unos 200 donantes, y hoy somos casi 5.000. Es otra alegría de todo esto, ver cómo ha respondido la gente cuando se ha difundido esto".

En este sentido, José Fernández de los Santos ha explicado a diariodehuelva.es que la experiencia y sentimientos coinciden con los de Cabanillas. "Lo importante en esta cuestión es ayudar a los demás, porque para eso me hice donante hace aproximadamente 4 años", ha apuntado Fernández.

Su caso es más reciente, y ha donado plasma "una vez. La información que me facilitaron es que podemos donar plasma una vez al mes, así que dentro de un mes volveré a concertar una cita y me acercaré al centro de transfusión y me pondré a disposición de los profesionales para que vuelvan a valorar si mi plasma sigue siendo útil para aplicar a pacientes COVID o puede ser útil para cualquier otra cuestión".

Fernández ha vivido la experiencia en casa, con toda su familia. "El Covid lo hemos pasado los cuatro miembros de mi familia. Primero fue mi hija, después a los 9 días dio positivo mi hijo y a los 10 días mi mujer y yo. Así que mi hija estuvo aislada en su habitación y cuando se contagió mi hijo, y teníamos algunos síntomas mi mujer y yo, pues dejamos los aislamientos en las habitaciones y volvimos a la normalidad, pero confinados", ha manifestado.

"Al principio, cuando te dicen que das positivo te preocupas, porque son muchos los casos que vas conociendo y que tienen desenlaces desgraciados. Conforme pasan los días y ves que no tienes síntomas alarmantes, empiezas a pensar que vas a tener suerte y formarás parte del grupo de personas que lo van a pasar sin hospitalización", ha señalado.

Ha continuado narrando que "mi hija cumplió el protocolo y después de los diez días de confinamiento volvió a la Universidad a Sevilla. Mi hijo al colegio y yo me incorporé al trabajo. Mi mujer estuvo algunos días más aisladas porque seguía dando positivo hasta que el día 3 de Diciembre dio positivo en anticuerpos", ha expuesto el concejal del Ayuntamiento de Huelva.

Esta situación también les ha traído sinsabores. Como bien ha recordado Cabanillas, "no sé si seguirá pasando, pero en agosto, cuando di positivo, el protocolo de control de la enfermedad era desastroso. Desde las ocho de la mañana que me enviaron el mensaje de confirmación hasta las dos de la tarde no hice otra cosa que coger el teléfono a rastreadores, médicos, enfermeros… Algunos no sabían que ya me habían llamado, otros me preguntaban si yo era contacto o positivo… Hasta que una médica de Huelva me llamó para decirme que en adelante ella coordinaba. Como había estado en tres provincias trabajando, el SAS de esas tres provincias me llamó por separado. Era una locura".

Fernández en su caso recuerda el miedo inicial del diagnóstico y, una vez sin mayores síntomas y complicaciones, la tristeza de no poder ver a sus padres "ni en la distancia". "Los primeros días de confinamiento en los que piensas si todo saldrá bien. Por lo demás yo no he tenido ningún síntoma grave y he podido estar trabajando desde el teléfono sin problemas. Cierto es que estuve mucho tiempo sin ver a mis padres y que además en la primera ola prácticamente tampoco había tenido contactos con ellos. Con lo que me lleve casi dos meses sin verlos físicamente aunque fuera a distancia".

Ambos coinciden en la importancia de donar, sangre y plasma. Para Cabanillas "es como una donación de sangre, pero dura un poco más. Los enfermeros extraen la sangre y la centrifugan para sacarle el plasma, y luego te devuelven la sangre. Cuando se extraen 600 mililitros de sangre la donación termina. De esos 600 se sacan dos bolsas, una para cada enfermo, y un botecito que es para investigación de vacuna o medicamentos. El hiperplasma se aplica a enfermos en planta que no han pasado a UCI, y tiene un 60 % de efectividad. Si funciona, el enfermo recibe el alta en pocos días y puede incluso generar el anticuerpo y convertirse en donante".

Esta emoción de poder ayudar es lo que ha movido a Fernández a seguir donando, aparte de sangre, plasma. "La información que tengo es que este plasma hiperinmune se lo están poniendo a enfermos de COVID, me imagino que en el marco de ensayos clínicos o estudios de investigación para ver si ayudan a la recuperación, el caso que yo entendí que está era una forma de ayudar y me sume a la causa", ha señalado.

Un mensaje de esperanza y solidaridad para aquellas personas que han pasado el coronavirus Covid-19 y no saben si pueden o no donar plasma. "Que hablen con su médico. Que no se conforme con pasar la covid e irse a la calle, porque puede que tenga oro en las venas y no lo sepa. Es un pinchazo en el brazo y salva muchas vidas, y hay que ser curioso e ir más allá del protocolo a veces para que pasen estas cosas", ha finalizado Cabanillas.