El Ciudad de Huelva reacciona justo a tiempo (86-80)
Por dos veces tuvo que ganar el Ciudad de Huelva su partido ante el Almansa. No es lo más recomendable. Y no sólo por evitar infartos. También porque jugar con fuego es el camino más seguro para quemarse. Esta vez, la escuadra de Íñigo Núñez supo reaccionar a tiempo (léase defender) y terminó sumando su décima victoria de la temporada (86-80).
Amparado en un extraordinario acierto en el tiro exterior -seis triples en los primeros diez minutos-, el CDH debió liquidar el duelo en el primer cuarto (27-11, min.8). Más aún ante un adversario con sólo ocho jugadores disponibles. No fue así porque los locales no defendieron un pimiento durante toda la primera mitad (32-23, min.10; y 44-48 al descanso).
Contra un enemigo superior en centímetros y kilos, el Ciudad se mostró blando e insolidario. Ante la falta de ayudas, cada defensa se transformó en un 'uno contra uno', en el que el jugador más alto y más fuerte no vestía la onubense. El ejemplo más patente fue el traje que Monteiro le hizo a David Gómez, sin que nadie le echara una mano al pívot local. También extrañó que Núñez no tirará de Chemari Morales, su interior más físico, para detener la sangría.
La segunda parte fue otra historia. Chemari tuvo minutos, aunque la clave estuvo en el cambio en la actitud del equipo. Aparecieron al fin la intensidad, la dureza, las ayudas y el rebote. Pero como nada hay tan difícil como matar a un equipo al que le has perdonado la vida, el Almansa, hinchado en moral y confianza tras su remontada, siguió mandando (59-67, min.30).
La cosa pintaba mal, pese a la ayuda del debutante Gordon. La sombra de una nueva derrota tras la sufrida en el derbi con el Enrique Benítez, planeaba sobre el Carolina Marín. Todo en la previa de visitar al CB Morón, segundo clasificado. Y justo cuando peor lo tenía, el cinco de Íñigo Núñez puso el alma en la cancha para darle la vuelta al calcetín.
Con una defensa cada vez más férrea, el CDH fue recortando la desventaja en un último cuarto espectacular. Los onubenses recuperaron su acierto en el tiro en el momento preciso (15/30 triples en total) y forzaron un final igualado (80-80, min.38). En ese ecosistema de máxima presión, Fran Cárdenas tiró de galones para anotar una bandeja decisiva y cambiar la angustia por felicidad.
CIUDAD DE HUELVA: Fran Cárdenas (4), Alfonso Ortiz (16 con 5/8 triples), Ander Urdiaín (16), David Gómez (12 y 5 asistencias), Chabi Yo (14 y 7 rebotes) -cinco inicial-; Víctor Nickerson (0), Álvaro Herrera (5), Juanma Cebolla (11), Chemari Morales (0), Fede Ristori (0), André Gordon (6) y Pape Sow (2).
CB ALMANSA: Kevin Navarro (13), Mark Ivankovic (13), Carlos Toledo (9), Jeffrey Godspower (5), Ricardo Monteiro (17 con 2/2 triples) -cinco inicial-; Luis García (10 y 10 rebotes), Adriano Gase (9 y 2 asistencias) y Víctor Andrade (4).
CUARTOS: 32-23, 12-25, 15-19 y 27-13.
ÁRBITROS: Calvillo Rendón y Cotta Ávila. Sin eliminados.
CAMPO: Palacio de Deportes Carolina Marín, unos 1.100 espectadores.
