martes. 07.05.2024
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Del Arco firma la biografía deportiva de los campeones onubenses de ajedrez

José Carlos Del Arco, uno de los mejores jugadores que ha tenido Huelva y el también tres veces campeón provincial, ha asumido el reto de recopilar y documentar la biografía deportiva de genios del tablero.
Del Arco firma la biografía deportiva de los campeones onubenses de ajedrez

El ajedrez onubense se ha visto siempre huérfano de historia, no sólo por el ostracismo mediático en el que se veía asumida este deporte hasta finales del siglo XX, sino por falta documental que recogiera los logros deportivos de una nómina de jugadores que llegaron a brillar en el panorama andaluz.

José Carlos Del Arco, uno de los mejores jugadores que ha tenido Huelva y el también tres veces campeón provincial, ha asumido el reto de recopilar y documentar la biografía deportiva de genios del tablero como José María Manzano, Enrique Biedma o Carlos Barrero, por citar tres de los mejores jugadores onubenses de todos los tiempos. Deportistas que tumbaron a grandes maestros a lo largo de su carrera y a los que la historia le debía un merecido homenaje que ahora este programador y profesor de secundaria en la rama de informática viene quiere honrar con un minucioso trabajo de investigación que da luz a los 64 escaques onubenses. 

Del Arco imparte una simultanea de ajedrez observado por Cecilio, uno de los grandes campeones de Huelva

¿Cómo nace este proyecto de recapitular en un libro todos los campeones provinciales?

La finalidad del proyecto es realizar una reseña deportiva de cada uno de los campeones provinciales de Huelva en la categoría absoluta. La idea parte del actual Delegado Onubense de Ajedrez, José Antonio Picallo, y yo soy el encargado de escribir el citado trabajo. Me produce una enorme satisfacción que el mundo del ajedrez pueda conocer la trayectoria de estos jugadores, referentes de los maestros de mis maestros

Hace unos años tomé la decisión de recuperar la memoria de los ajedrecistas onubenses del pasado, entusiastas que practicaron buen Ajedrez a pesar de no contar con los recursos de ahora, e invirtieron esfuerzo, tiempo y dinero por promoverlo. Mi intención es que las nuevas generaciones conozcan el legado que dejaron: fotos y partidas inéditas, resultados deportivos y archivo diverso. Resulta emocionante haber puesto cara a nuestros ilustres antecesores y descubrir la calidad de su juego, e incluso contactar con familiares para hacerles llegar fotos que no tenían. Quisiera agradecer a todos los ajedrecistas veteranos que me han ayudado en el desarrollo de esta labor, muy especialmente a Rafael Delgado Fuentes.

¿Cuándo comenzó a interesarse por este deporte?

  A los 12 años mis padres me hicieron un regalo inesperado que siempre les agradeceré: un tablero de ajedrez, unas piezas y un libro de iniciación. Poco tiempo después, Eduardo, un amigo de la familia, me transmitió los rudimentos básicos del juego. Me quedé entusiasmado y comencé a practicar Ajedrez con mis padres y los amigos. 

A los 16 años decidí federarme, decisión clave que favoreció mi crecimiento como ajedrecista y la oportunidad de hacer muchísimos amigos apasionados de este milenario arte.

¿Cómo era su preparación cuando competía?

En 1988 debuté en la segunda categoría del provincial, en aquel entonces éramos todos autodidactas pero jugar con ajedrecistas fuertes me permitió subir mi nivel de juego y ascender a primera división, para, posteriormente, lograr ser campeón provincial.

En aquella época se disponía de menos recursos para el estudio, me refiero a que no existía acceso a Internet, ni base de datos de partidas o software de nivel alto. Las fuentes bibliográficas eran escasas, pero ante la falta de variedad, intentábamos sacar provecho de aquellas grandes obras: básicamente partidas comentadas de campeones mundiales, la enciclopedia de aperturas y las novedades del Informator. El estudió lo enfoqué mal, pues prefería echar un vistazo a muchas partidas más que al hecho de analizar unas cuantas en profundidad.

Francisco Domench, el primer campeón provincial de ajedrez de Huelva.

Huelva disfrutó en la época de los 90 de un puñado de los mejores jugadores de Andalucía. ¿Qué ocurrió para que a nivel de equipos no emulara los éxitos de los individuales?

En Huelva el número de licencias siempre ha sido mas bajo que en provincias que suelen cosechar grandes éxitos deportivos. En los años 70 y 80 había muy pocos clubes en la provincia, realmente la cultura de club ha estado bajo mínimos y ello acarrea que no se haya trabajado en una estructura formativa adecuada y la cantera. A pesar de este hecho, Huelva ha contado con grandes jugadores que ahora pasaremos a comentar.

¿Quiénes fueron los jugadores onubenses a los que usted admiraba?

Mi gran referente local es José María Manzano Orta: campeón de Andalucía, de Sevilla y provincial multitud de veces. Manzano podía haber llegado mucho mas lejos sí se lo hubiera propuesto. Asimismo, tuve la oportunidad de aprender con el juego de Jesús Romero (subcampeón de Andalucía), Enrique Biedma, Alfonso Carlos Gómez, Rafael Delgado, Antonio Andrés y Perera, todos campeones provinciales. Posteriormente emergieron nuevos valores como Carlos Barrero y Antonio Ramón Hernández, jugadores de gran talento, de los mejores de nuestra historia.

Disputó la simultanea que ofreció Karpov en Huelva. ¿Cómo recuerda aquel hito histórico para la provincia?

Lo describo como un momento inolvidable para la ciudad y los aficionados a este bello deporte. Karpov estaba en su mejor momento en 1993, de hecho, dejó constancia de su clase en partidas memorables en el Salón de Chimeneas de la Casa Colón. Estuve cerca del empate, pero un error en un final de claras tablas me impidió culminar el sueño. Karpov se acordaba de toda la partida, a pesar de que había disputado 28 en total. Enrique Biedma, Anatoli Espejo y Ana María Alfonso firmaron las tablas contra el campeón mundial, todo un logro.

El ajedrez vive a nivel mediático uno de sus momentos dorados. No obstante, ¿cuál es la razón de que estos tiempos de bonanza no se traduzca en personas viviendo de este deporte?

Los años pasan y el boom no se ha traducido en un incremento de patrocinadores que financien premios y clubes, incluso hace veinte años había m-as dinero que ahora. De todas formas el éxito de series como Gambito de Dama, y de personajes como Rey Enigma, han contribuido a captar la atención de las audiencias, y esperemos que de patrocinadores. Resulta vital para la promoción que las instituciones públicas acerquen el juego-ciencia a los espacios públicos, centros cívicos y la escuela.  Su práctica despegará si los niños lo practican a gran escala, además de otros deportes.

A día de hoy resulta complicado vivir de ajedrez. Cada vez más jugadores de gran nivel deciden apostar por la formación en internet, ofreciendo sus servicios en redes sociales diversas. Urge apostar por fórmulas creativas que doten de singularidad a la marca: diferenciarse es vital ante la competencia. 

El auge de las computadoras esta cercenando la creatividad. Yo mismo he sido testigo de cómo en lentas he sufrido derrotas sin contestación alguna como consecuencia de la profunda preparación previa a la partida. ¿Crees que esta deriva puede matar el ajedrez como deporte?

El ajedrez siempre seguirá entre nosotros, pero estimo que el ritmo lento está perdiendo fuelle frente a modalidades de ritmo rápido y online, en la que la emoción está reñida con el buen juego, junto el deseo de que los torneos presenciales terminen pronto para regresar antes a casa.

La sociedad actual se enfrenta al reto de abrazar la conciencia crítica ante la inmediatez de las redes sociales, escenario que se repite cuando el aficionado decide seguir el criterio del módulo frente las ideas propias y originales. El jugador fuerte sabe apreciar la singularidad de una posición y es fiel a sus principios. El ajedrecista mediocre juega de oídas, memorizando jugadas sin profundizar en la dimensión estratégica o sin entender las claves de una apertura.

Nicolás Soler recoge uno de los numerosos torneos celebrados en Huelva

El circuito provincial de ajedrez fue de los torneos veraniegos más fuertes de toda Andalucía. ¿Qué ocurrió para que se perdiera este activo?

A principios de los 90 gozamos con la presencia de números ajedrecistas de élite que dejaron constancia de su clase por localidades de la provincia. Las instituciones públicas, a través de los patronatos municipales de deporte y la colaboración de patrocinadores, fueron esenciales, mas la labor de la DOA. Quizás esta entidad pueda responder mejor a la cuestión que planteas, pero estimo que probablemente el declive del Circuito de Verano pudo deberse a la falta de presupuesto de los consistorios para financiar los premios de los torneos. Sin premios suficientes los jugadores fuertes no acuden por falta de rentabilidad.

¿Considera que falta apoyo por parte de las administraciones?

Cómo decía antes la promoción  puede reforzarse con la presencia del ajedrez en las plazas, parques y calles en las que transite el gran público; y por supuesto en la escuela, que el juego ciencia sea practicado por los niños. La existencia de escuelas deportivas municipales es un paso importante, y la difusión en los medios públicos. Todo depende de la voluntad de los cargos políticos, si no la hay y se otorga preferencia a deportes mayoritarios, pues mal asunto.

Por supuesto las federaciones y delegaciones provinciales, clubes y los aficionados debemos aportar nuestro granito de arena para divulgar sus virtudes. Si nos quedamos en el sofá y que otros trabajen, o si no reconocemos el esfuerzo ajeno, pues no avanzamos. 

El ajedrez ha comenzado a entrar en las aulas. ¿Considera adecuada la capacidad de los profesores para impartir esta asignatura?

Depende de lo que se entienda por “ajedrez educativo”. La dimensión competitiva no termina de casar con la educativa. Si la idea es introducir el ajedrez como asignatura en horario lectivo, es decir, como un cuerpo de conocimiento independiente, y empleando la metodología clásica, es evidente que la mayoría del profesorado carece de la formación adecuada. Capacidad estimo que sí tienen, a medio y largo plazo.

Si la finalidad es utilizar el ajedrez como recurso educativo en otras materias para así promover la transversalidad, el aspecto pedagógico gana peso frente al nivel de conocimientos del docente. Un profesor de matemáticas puede perfectamente utilizar el tablero para plantear actividades sobre geometría o cálculo, para nada es necesario que sea experto en Ajedrez.

¿Qué valores y destrezas entraña la práctica de este juego?

En la literatura y bibliografía académica se describen multitud de beneficios que aporta su práctica, entre ellos reforzar la atención y la concentración, la memoria, la capacidad analítica y el desarrollo de la visión estratégica. No soy de los que pretenden exagerar las virtudes del ajedrez, pero básicamente en el tablero se toman decisiones a corto y largo plazo, se reflexiona sobre la mejor de las opciones, teniendo en cuenta tus jugadas y las del rival. Aceptar la derrota por los errores propios estimula la responsabilidad, la derrota viene determinada por la toma de decisiones erróneas. Pensar a largo plazo está reñido con la impulsividad. Ser reflexivo en 64 casillas puede trasladarse al contexto vital… sólo percibo beneficios. 

¿Cree que al frente de estos planes de estudios están los mejores jugadores?

Las competencias en materia de educación residen en las comunidades autónomas. Lo que observo es que las Federaciones deberían disponer de mayor protagonismo para poder incidir en la agenda pública, básicamente en los programas de introducción del “Ajedrez Educativo!. Volvemos a la cuestión de siempre: qué se entiende por este concepto y qué peso debe otorgarse al aspecto competitivo. Por otro lado, estimo que las distintas comunidades deberían colaborar entre sí a la hora de articular sus propios programas: sumar es poder.

¿Qué considera que necesita Huelva para dar un salto de calidad?

Construir cantera y organizar mas torneos. Si se logra, a medio y largo plazo llegarán resultados. Para hacerlo, además de trabajo y vocación, es necesario que los clubes dispongan de un plan de formación y una estructura sólida. Considero un error que la capacitación no se distribuya por niveles y tramos de edad. 

Además, los clubes deben disponer de capacidad de captación, especialmente en el ámbito escolar y las escuelas deportivas; y por supuesto de patrocinios, para ello hay que atraer el interés del sector privado. Plantear actividades en los centros comerciales puede resultar una buena práctica para acercar el ajedrez al gran público y las marcas, o dinamizar las arterias comerciales de la ciudad con eventos ajedrecísticos.

Otro aspecto importante es que en la provincia haya más clubes y logren presencia, mas vitalidad. Un solo club activo no es un escenario deseable. La competencia además debe ser sana: sumar, y no restar. Los clubes además deben actuar conforme su misión y visión.