Es una victoria moral para el San Roque de Lepe. Y para los que abogan por un fútbol limpio de amaños. La denuncia presentada por el club aurinegro a tenor del sospechoso desenlace del partido de la última jornada entre el CD Coria y el Mensajero, cuyo resultado dejó a los leperos fuera de los 'play-offs' de ascenso a la Primera RFEF, ha surtido efecto.

El Juez de Competición de la RFEF ha decidido abrir un expediente disciplinario extraordinario al Coria y al Mensajero por la "realización de conductas que eventualmente podrían ser constitutivas de una o más infracciones de las normas deportivas". Y el director de Integridad y Seguridad ha recibido un informe de la empresa Sportradar sobre las apuestas de aquel partido.

Justicia poética

Suceda lo que suceda con el mencionado informe, deportivamente ya no hay marcha atrás. La Federación desestimó las demandas del San Roque acerca de la suspensión cautelar, primero del sorteo y luego de la disputa del 'play-off' de ascenso, que ha seguido su curso con normalidad. De hecho, el CD Coria fue eliminado a las primeras de cambio en un acto de justicia poética.