Tarjeta verde para Nardy Lafuente
A lo largo de su dilatada trayectoria en el Recreativo de Huelva, ha sido testigo de todo tipo de ardides, propios y ajenos, para conseguir la victoria. Al fin y al cabo, la máxima del balompié profesional es competir y ganar, en ocasiones, por encima del juego limpio.
Sin embargo, a pesar de lo vivido, Nardy Lafuente siempre ha tenido claro cuál es el camino correcto. Y sobre todo, siempre supo diferenciar los comportamientos y motivos de los profesionales de los de la cantera, "el único fútbol puro que existe" según sus propias palabras.
No se trata de un farol, pues el que fuera jefe de prensa del Decano durante tantos años es hoy un ejemplo a seguir en su labor como entrenador de los escalafones inferiores del Huelva Balompié, club cuya reciente creación el mismo ha impulsado.
Y para muestra lo sucedido este fin de semana, cuando Nardy Lafuente ha sido recompensado con la tarjeta verde, la segunda que muestran los colegiados onubenses esta temporada, por su comportamiento deportivo hacia un rival.
Los hechos sucedieron durante el encuentro entre la Escuela de Fútbol Base Marismas Polvorín y el Huelva Balompié de la Tercera División Andaluza Alevín, y han sido reflejados en el acta arbitral de González Cumbreras del siguiente modo.
El trencilla mostró tarjeta verde a Nardy Lafuente por "el gesto deportivo de atender a un jugador adversario que se encontraba lesionado en el banquillo y llevarlo hasta vestuarios en brazos, preocupándose en todo momento por su situación". Todo un ejemplo de educación en valores de un hombre que destila fútbol por los cuatro costados.
