Si en el Nuevo Colombino tienen motivos para estar muy satisfechos con el sistema de competición de la Tercera RFEF, no ocurre lo mismo en el Ciudad de Lepe. En su debut en la Segunda RFEF, el San Roque deberá rozar la perfección para conseguir el objetivo de la salvación, porque el ratio de descensos será uno de los más altos de la historia del fútbol español. Tan es así que perderán la categoría el 30% de los participantes. Esto es, uno de cada tres equipos descenderá.

Según se desveló en la Asamblea de la Real Federación Española de Fútbol, la cuarta categoría del balompié nacional estará formada por 90 equipos, divididos en cinco grupos, cada uno con 18 clubes. De cada grupo, descenderán directamente los cinco últimos clasificados. Y de los cinco equipos que finalicen en la décimo tercera posición, los cuatro peores disputarán un 'play off' por la permanencia. Los dos perdedores también bajarán.

Diez ascensos a Primera RFEF

En cuanto al salto a la Primera RFEF -en principio una meta que no se contempla en el San Roque de Lepe-, habrá diez ascensos, cinco directos y cinco por la vía de las eliminatorias. Cada uno de los campeones de grupo subirá automáticamente, mientras que los segundos, terceros, cuartos y quintos clasificados jugarán una liguilla de ascenso en sede neutral, ascendiendo el campeón.

La composición del grupo del San Roque

Más incertidumbre existe sobre los rivales de los aurinegros. En principio, el equipo de Antonio Fernández Rivadulla competirá contra el Córdoba, Cádiz B, El Ejido, Granada B, Xerez DFC, Mancha Real, Pulpileño y Vélez. Se puede alcanzar los 18 equipos necesarios con los dos norteafricanos (AD Ceuta y UD Melilla) y los seis extremeños (Villanovense, Don Benito, Mérida, Cacereño, Montijo y Coria). O con el Real Murcia, Mar Menor, Águilas, Puertollano, Toledo y Socuéllamos.