Todos somos humanos. Y todos fallamos. Estas verdades universales son aplicables a los abogados del Recreativo de Huelva, que se hicieron 'famosos' al presentar mal y tarde el recurso de apelación contra la resolución judicial que condena al club a pagar a Pablo Comas. La consecuencia es bien conocida. Salvo que medie un milagro, el club deberá abonar 633.000 euros a su anterior dueño o será embargado.

Pero los letrados del empresario madrileño también han fallado en este proceso. De hecho, los representantes legales del ex-propietario y ex-presidente del Recre reclamaron inicialmente 753.288 euros, más intereses y costas. Esa cantidad saldría del dinero prestado al Decano por Gildoy España SL, Poientose SL y Ternera de Dehesa SL, todas ellas firmas propiedad de Comas.

Un error muy caro

Sin embargo, a la hora de formular la demanda, lo hicieron sólo en nombre de la primera de las empresas, olvidándose de las otras dos. Debido a este error, el Juez estimó únicamente las cantidades reclamadas por Gildoy, cifradas en 483.661 euros, más intereses y costas, e ignorar el resto. Lo cual no significa que Comas no vaya a intentar cobrar el dinero que no ha podido reclamar por un fallo de su abogados.

Nueva demanda

De hecho, los letrados del empresario madrileño han presentado una nueva demanda contra el Recreativo, en nombre de Poientose y Ternera de Dehesa, por valor de 269.627 euros, más intereses y costas. Esta doble reclamación ha sido admitida a trámite, pero ahora el proceso judicial comienza de cero y la demanda debe recorrer otra vez el sinuoso laberinto judicial, dando al Recre un respiro de varios años.