Decenas de inmigrantes 'se refugian' en plazas y portales tras el incendio de sus asentamientos
Apagadas las brasas de los incendios que han devastado tres asentamientos de inmigrantes en Huelva (Lepe y Lucena) en pocos días, las personas que residían en ellos buscan cómo y donde pueden lugares para descansar y pernoctar. Se enfrentan a una dura realidad en medio de una pandemia de coronavirus que lo hace todo más difícil y de una canícula que castiga sin piedad.
De momento, la Asociación de Trabajadores Africanos pide que se investigue si los tres incendios en los asentamientos han sido intencionados. El portavoz del colectivo, Amadou Doumbia, considera al menos extraño que salga ardiendo un campamento a las 4.30 de la madrugada. Una hora en la que no hay actividad ni nadie haciendo comida en el lugar.
Ayer mismo, desde Asnuci, una de las Asociaciones que defiende a estas personas compartieron numerosos mensajes de denuncia en los que se hace ver a la opinión pública las condiciones de vida que están soportando estas personas. Los mensajes fueron compartidos a través de las redes sociales por miles de personas no solo en España sino por todo el mundo, influencers, cantantes y personajes conocidos, generando un gran impacto social.
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También desde Cáritas y Derechos Humanos han criticado la falta de respuesta de las administraciones públicas para resolver un problema de exclusión social y precariedad. La organización cristiana afirma que "no podemos seguir tolerando que esta realidad de los incendios en los asentamientos chabolistas de inmigrantes en torno a los municipios freseros se convierta en un hecho cotidiano".
Mientras tanto, el Defensor del Pueblo andaluz ultima una visita a varios pueblos freseros la semana próxima para abordar un problema que ha puesto a los municipios freseros de Huelva en el foco público por las condiciones de un colectivo al que no se le da una solución habitacional desde hace 20 años y eso que muchos de los inmigrantes afectados son asiduos trabajadores agrícolas.
Una solución que para más inri está provocando incluso el enfrentamiento entre administraciones que son del mismo signo político, como es el caso de la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Lepe.
Mientras el consistorio lepero, el municipio que acoge el mayor número de campamentos de este tipo, reclama coordinación y ayudas públicas el vicepresidente del Gobierno andaluz responde que se trata de un asunto local.
