jueves. 28.03.2024
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Las grandes cárnicas 'amparan' 3,5 millones de jamones y paletas en la marca Jabugo

El Pozo, Incarlopsa, Vall Company, Grupo Jorge, Sánchez Romero y Dompal inflan la capacidad de producción en la Sierra de Huelva hasta los 3,5 millones de jamones y paletas. La D.O. P Jabugo solo certifica 61.000 piezas de máxima calidad.
Las grandes cárnicas 'amparan' 3,5 millones de jamones y paletas en la marca Jabugo

Cuando la nueva factoría de El Pozo Alimentación abra sus puertas en Jabugo en el primer semestre de 2020, la Sierra de Aracena y Picos de Aroche multiplicará su capacidad productora de derivados del cerdo ibérico.

El centro de Jabugo tendrá una capacidad productiva de 2,5 millones de piezas de jamones y paletas y de otros 300.000 kilos anuales de productos elaborados como caña de lomo, lomito a chorizo. Una producción que saldrá al mercado bajo la marca El Pozo Legado Ibérico y tendrá una línea dedicada al ibérico de cebo preparada para la exportación.

Pero El Pozo no es la única gran cadena que en los últimos años ha apostado por la comarca serrana.

El gigante ganadero de Lérida Vall Company entró en Jabugo en 2015 a través de la firma local Industrias Reunidas de Jabugo (El Repilado) y ya facturó globalmente 1.304 millones de euros en 2013. En sus instalaciones de El Repilado tiene capacidad para producir hasta 416.000 jamones y paletas con marcas como Flor de Jabugo o Jaracena.

Y el pasado mes de septiembre, Incarlopsa, la carnicera que surte al gigante Mercadona, adquirió Consorcio de Jabugo, antigua filial de Agrolimen. Tiene una capacidad para producir aquí 120.000 piezas de jamones y paletas.

Una marca a la que se ha unido el potente Grupo Jorge, que comercializa ya marcas señeras como Capa Negra o Iber Ibéricos.

Las inversiones en la comarca no acaban aquí. El Grupo Dompal acaba de invertir otros 8 millones de euros en Jabugo. Dompal asegura que tiene capacidad para producir 200.000 piezas de jamones y paletas de su línea de ibéricos, dirigidas al mercado nacional a internacional.

A todas ellas hay que sumar la marca Sánchez Romero y Carvajal, la conocida como Cinco Jotas, con capacidad para comerciar con los derivados de hasta 40.000 cerdos que pasan por sus cadenas de sacrificio y distribución.

Esta ingente y millonaria producción no estará amparada por la Denominación de Origen Jabugo. Porque el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Jabugo certificó solo 61.727 jamones y paletas durante el año 2018, de los que el 89,83% alcanzaron la máxima designación de calidad, Summum.

El boom del jamón que vive la Sierra de Aracena y Picos de Aroche, con 29 municipios dedicados casi en exclusiva a la cría, engorde y sacrificio del cerdo ibérico entre los que destacan Jabugo, Cumbres Mayores, Cortegana o Aracena, obliga a las autoridades a extremar la vigilancia sobre el cumplimiento de la norma de calidad del ibérico. No es oro (pata negra, 100% ibérico) todo lo que reluce y sale de sus instalaciones.

Resulta obvio decir que los 3,5 millones de jamones y paletas que pueden mover las grandes marcas afincadas en la comarca no serán 100% ibérico, un marchamo de calidad difícil de conseguir y que marca la diferencia.

Lo que sí es indiscutible es el empujón económico y laboral que los grandes productores están dando a una zona necesitada de inversiones y amenazada por la despoblación.

Grandes inversiones

Nada más que la puesta en marcha del proyecto de El Pozo supone una inversión de 73,5 millones de euros y la creación de 475 puestos de trabajo, entre directos e indirectos. Está previsto que las obras de ejecución finalicen en junio de 2019.

Las instalaciones se distribuyen en una superficie construida superior a los 58.000 metros cuadrados e incorporan la tecnología más avanzada. Un ejemplo de los nuevos tiempos que vienen, entre otras causas, motivados por las necesidades alimenticias de China.

Pero no todas las luces son blancas en el horizonte. La presencia en la Unión Europea (Bélgica) de brotes de peste porcina africana está llevando a las autoridades españolas a extremar la vigilancia en las fronteras, en el movimiento de animales y hasta en el comercio de piensos.

Con las inversiones realizadas y toda una comarca dependiendo casi del monocultivo del cerdo ibérico y sus dehesas no cabe otra que controlar exhaustivamente la entrada de animales y las explotaciones ganaderas.

En la provincia de Huelva se contabilizan, según los datos facilitados desde la Delegación Territorial de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, unas 2.097 explotaciones ganaderas de porcino ibérico ligados al sistema tradicional de explotación extensiva en dehesa con un total de 197.253 animales. La mayoría ubicadas en la Sierra de Aracena y el Andévalo.

La mayoría de este tipo de explotaciones en Huelva son de carácter familiar y de un tamaño medio, según los datos que baraja COAG-Huelva, entre 80 y 120 hectáreas y con unos 100 cochinos de media por finca.

En el conjunto de Andalucía, el número de explotaciones se eleva a 6.227 con un total de 662.682 animales, que suman más de un millón de hectáreas.