VOX acusa al PP de abandonar a los agricultores del Condado de Huelva y anuncia que reactivará la ley de regularización de tierras
Manuel Gavira lamenta que las ayudas del Pacto de Doñana no hayan llegado al campo y critica tanto al Gobierno andaluz como al central por “engañar y jugar con los agricultores”

El portavoz del Grupo Parlamentario VOX en Andalucía, Manuel Gavira, ha cargado este martes desde Huelva contra la actitud del Partido Popular por su negativa a reactivar la proposición de ley para la regularización de las tierras de la Corona Norte del Condado de Huelva, limitándose –según ha afirmado– a “instar al Gobierno de España a que acelerase la convocatoria de esas ayudas”.
Gavira ha asegurado que esta postura demuestra que “Moreno Bonilla no pinta absolutamente nada en las ayudas” y que “cuando hace seis meses dijo que no iba a dejar tirado a los agricultores, era una pura pantomima”.
Durante su intervención, el portavoz de VOX ha denunciado que tanto la Junta de Andalucía como el Gobierno de Pedro Sánchez “tratan a los agricultores como si fueran muñecos de trapo”, trasladando la responsabilidad entre administraciones mientras los afectados siguen recibiendo sanciones, multas millonarias e incluso penas de cárcel. “Ayer, el PP lo que vino a hacer es echar balones fuera y mandar a los agricultores al Gobierno de España”, ha insistido.
Gavira también ha declarado que “hasta que las ayudas no lleguen al campo, el Pacto de Doñana será un fraude”, en referencia a la percepción de abandono manifestada por los agricultores del Condado. Ha lamentado que, pese a que las ayudas se han distribuido entre ayuntamientos, entidades sociales y universidades, los propios agricultores, principales destinatarios, no han recibido nada.
Asimismo, ha recordado que VOX presentó en solitario, el 6 de octubre de 2022, una proposición de ley como vía para regularizar las tierras afectadas, que reactivarán “con o sin el PP”, asegurando que los agricultores “ya se merecen una respuesta a una injusticia de la que ya se cumplen 11 años”.
La proposición, ha explicado, se centra en el uso de aguas superficiales y en la ejecución de infraestructuras hidráulicas prometidas desde hace décadas tanto por el PP como por el PSOE, “y que nunca llegan a materializarse”.