María Márquez acusa a Moreno Bonilla del desmantelamiento “ruin y miserable” de la sanidad pública andaluza: "Juega con lo más importante"

La vicesecretaria general del PSOE de Andalucía, María Márquez, ha acusado este viernes al presidente de la Junta, Juanma Moreno, de “jugar con lo más importante, la salud” del pueblo andaluz, con un “plan ruin y miserable” que busca, según afirma, el desmantelamiento de la sanidad pública en favor del negocio privado.

A las puertas del Hospital Comarcal de Riotinto, acompañada por la alcaldesa de Minas de Riotinto, Rocío Díaz Cano, y otros representantes socialistas onubenses, Márquez ha denunciado que “dos millones de andaluces están atrapados en listas de espera” para una consulta con especialistas, pruebas diagnósticas o intervenciones quirúrgicas. Una situación que, asegura, se agrava por las investigaciones judiciales abiertas contra el Gobierno andaluz por supuestas adjudicaciones irregulares de recursos públicos a empresas privadas.

“El plan del PP es claro: destrozar la sanidad pública y desviar dinero a dedo a la privada, sin control”, ha afirmado Márquez, quien ha puesto como ejemplo la situación del Hospital de Riotinto, al que ha calificado como “hospital fantasma” por el cierre de plantas, la falta de personal y el deterioro de servicios esenciales. “Estamos escandalizados. Esto es casi una emergencia sanitaria”, ha declarado.

La dirigente socialista ha lamentado casos como el de “un recién nacido con su madre compartiendo habitación con un paciente con una enfermedad infecciosa”, algo que considera “una atrocidad”. También ha vinculado esta situación con el aumento de las agresiones al personal sanitario, ante una ciudadanía cada vez más indignada y frustrada.

Por su parte, la alcaldesa de Riotinto, Rocío Díaz, ha cargado contra los recortes sufridos en los últimos años: “Nos quitan servicios como el de urología y derivan a nuestros pacientes no a Huelva, sino al Hospital Macarena de Sevilla”. Díaz ha recordado el origen del centro hospitalario, “levantado con el sudor de los obreros y mineros de esta comarca”, y ha acusado al Gobierno andaluz de querer “fomentar la sanidad privada recortando económicamente los servicios públicos”.

Ambas dirigentes han coincidido en mostrar su apoyo al personal sanitario y en exigir que se restituyan los servicios esenciales para garantizar la calidad asistencial a toda la comarca de la Cuenca Minera, la Sierra y parte del Andévalo.

“Vamos a seguir defendiendo nuestro hospital y los derechos sanitarios de nuestros vecinos y vecinas. No nos vamos a callar”, ha sentenciado Díaz.