lunes. 09.09.2024
El tiempo

Vicente Serrano: "Con 8 años ya operaba lagartijas y ratas"

A nuestra tribuna se acerca un Quijote de la medicina con un humor tan afilado como la mejor espada y que hace de la ironía su mejor estilete.
Vicente Serrano: "Con 8 años ya operaba lagartijas y ratas"

Se acerca hoy a esta tribuna publica Vicente Serrano, un doctor muy singular, que cuando le pregunto por su currículum, contesta con la guasa que le caracteriza de la siguiente forma: "Yo he dicho siempre dos cosas, que soy como el maestro liendre, que de todo sabe y que de nada entiende, y también que es como el satre de El Campillo, que cosía y ponía el hilo"

Pero te diré que nací en un lugar de La Mancha, de cuyo nombre no me importa acordarme. Un pueblo de Ciudad Real, el de las dos mentiras, Puertollano, pues ni tiene puerto ni es llano.

Empezando así, ya puedo imaginar lo que puede pasar cuando siga preguntando. Veo a Vicente con ganas de hablar, y por tanto empiezo.

¿Qué opinión tienes de la situación que estamos viviendo?

Depende de para quién estemos hablando, no es lo mismo estar en un lado que en otro y ya me entiendes. De todas formas, la situación que estamos viviendo es la broma que ha vivido toda la vida la humanidad entre los poderosos, y, no los emponderados, sino los apoderados. ¿Se me entiende?

¿Del Covid qué piensas? 

Te lo puedo decir de muchas formas, pero te diré asi: "mira que hacerme a mi esto". La película es, que no se ha demostrado que nadie haya ido a buscar el pangolin y limpiarle las uñas al que se escapó del laboratorio, y mientras, los que tienen que dar la cara no la dan, y digan, esto se nos escapó de las manos, la película del Covid ha sido el engaño más gordo que hemos vivido, y te digo una cosa, que aquí vivimos como si esto se hubiese acabado, pero todo el planeta está esperando la verdadera vacuna.

¿Has pasado miedo en algún momento?

Yo he pasado miedo toda mi vida, desde el primer examen que tuve que hacer para la primera comunión.

¿Qué soñabas ser de pequeño? 

Siempre he sido pequeño, no ves lo que mido, nunca he sido grande Jajaja. Quería ser como todo el mundo, astronauta, futbolista, torero... Vamos, fui un torero muy precoz, con tres años ya toreaba en casa con una servilleta.

¿Qué es para ti la medicina? 

La medicina la tuve que admitir porque me gustaba mucho la cirujía y, acabé siendo médico. Mira Camacho, yo con 8 años operaba lagartijas, ratas y cosas de esas. Y el mejor momento de mi vida fue cuando estaba haciendo la tesis doctoral sobre avances en la cirugía e hice un espectáculo que mejor no lo cuento.

¿De qué estás más orgulloso y de qué te avergüenzas? 

Avergonzarme de todo, pues lo mío ha sido para "matarme". A mí me ha dado vergüenza de la vergüenza de mi familia por mi.

Lo que más me ha gustado de la vida, es la suerte que tuve que mi padre por circunstancias viniera a Huelva, y, aquí estamos, en todo el cogollo. Hay quien dice que estamos en el culo del mundo y no es así, esto es el clitoris. ¡Viva Huelva!.

¿Progresa Huelva adecuadamente? 

Recuerdo ahora una viñeta que en su día publicó La Codorniz, que era la revista más audaz para el lector más inteligente y que dirigía Álvaro de Laiglesia. Iba dedicado a un ministro en la época de Franco y que se llamaba López Rodó.  Pues bien, este ministro dijo un día, ¿cuál es el sitio donde nadie se va a enfadar con nosotros? Y él mismo se contestó, Huelva.

Vinieron y nos pusieron una Fertiberia, que a mi me sonaba bien, pero que era un fertilizante de Iberia. Se trajeron fosfoyesos y se contaminó una de las marismas más bonitas del planeta, y no se contaminó con yerbabuena acida, sino con material radioactivo, que tenemos para hacer 300 bombas con las balsas que taparon.

¿Qué aficiones tienes? 

Quitándonos del cachondeo que ha sido el norte de mi vida, mi afición siempre ha estado basada en la cirujía, y en los últimos años la arqueología, pero nunca me olvido de lo que quería, lo que ocurre es que luego falló el tema, pero yo iba a ir de ayudante de un trasplante de la cabeza humana, eso me hubiese hecho feliz hacerlo, además he invertido mucho tiempo en pensar en ello.

¿Ahora qué haces? 

Lo que me ha gustado toda mi vida, una doble negación: "no hacer nada", pero eso sí, me voy de cachondeo cada vez que puedo.

¿Qué ha sido de tu espíritu aventurero?

Ha sido mi vida. Gracias a mi amigo el gordo Fragio, he visitado prácticamente todo el planeta, y cuando no estaba el gordo, me he ido solo. Las aventuras vividas es para escribir un libro.

Recuerdo un momento muy especial, pero no el más significativo, fue en el año 1998 cuando fui a Filipinas para celebrar el grito de Isabel Navalla "Viva Filipinas libre", organicé yo solo un viaje inolvidable.

Vicente, me lo paso en grande cada vez que coincido contigo, y desde luego recordando a nuestro común amigo Juan Luis Álvarez, que se nos fue demasiado pronto.

Un abrazo grande amigo