José Antonio Quilón: "La ría y el sol de esta tierra marcan nuestra forma de ser"

Me apetecía que se acercara por esta tribuna pública José Antonio Quilón, policía local que durante muchos años ha estado junto al que fuera alcalde de Huelva, Pedro Rodríguez velando por su seguridad como escolta. 

Quilón es hijo de panadero y ama de casa, su niñez transcurre junto a su hermano Juan Manuel, a caballo entre Villa Rosa del Conquero y el Huerto Paco, educación muy marcada por su centro de enseñanza, el Colegio Salesianos "Cristo Sacerdote" y todos sus amigos del barrio, donde  compartían juegos en el Cabezo de La Morana, siendo protagonista siempre un balón, como corresponde a un apellido ligado al Recreativo de Huelva y su portería.

Finalizado los estudios de EGB, decide estudiar una rama técnica que le llamaba mucho la atención: Formación Profesional Mecánica del Automóvil, pero en segundo grado, la luz de su  horizonte se encamina con dieciocho años a la que es hoy su profesión.

Paralelamente, el fútbol le acompaña en todo momento, recalando en el Atlético de Huelva a los 11 años, pasando posteriormente al Recreativo de Huelva por sus categorías Infantil, Juvenil y Recreativo B Senior, disfrutando de la enseñanza en la portería de veteranos  como Alonso, Trujillo, Garmendia y Castell.

Siempre asesorado por su guía laboral y deportivo Alberto Gago, hombre de confianza de la familia, empieza a trabajar en Imprenta Ortega, a turno partido, compaginándolo con el  fútbol y sus estudios para las oposiciones a Policía Local.

Un año después, el esfuerzo tiene su recompensa y obtiene su plaza de la cual disfruta a día de hoy, sin haberse dado cuenta de estos 33 años que han pasado de servicio.

En esta etapa profesional en lo deportivo ha participado en varias disciplinas policiales, consiguiendo meritorios premios, entre otros, un campeonato nacional y cuatro títulos andaluces, en 100 metros lisos, y un título nacional y tres andaluces, en tiro policial. 

La vuelta al fútbol la motiva su hijo pequeño, quien le hace ver el fútbol desde la perspectiva de los banquillos y, de la mano de Juan Carlos Álvarez y la ayuda importantísima de Pepe Domínguez, inicia una aventura en el CDC Nuevo Molino que dura 6 temporadas.

La temporada pasada Juan Carlos Álvarez y José Antonio Quilón recalaron en el Recreativo de Huelva en el alevín de primera Andaluza y a día de hoy se encuentran inmersos en una ilusionante  temporada del cadete A del Recreativo de Huelva.

A José Antonio, con el que me une una buena amistad, lo conocí cuando se vino a jugar al equipo de la Prensa, como "gato", o por lo menos eso nos decían los rivales, pero yo describí a un tipo, amable, servicial, entrañable, buen amigo, discreto, alegre, risueño, observador, empático, optimista, listo y desde luego buena gente. 

Ha costado su tiempo hasta que hemos conseguido realizar esta entrevista, pues nuestro protagonista de hoy ha estado muy liado, pero nunca es tarde si la dicha es buena, y aquí está el resultado de un ratito de lo más agradable. 

P. - ¿Qué opinión tienes sobre la situación que estamos viviendo?

R. - La situación actual es de incertidumbre y no pinta bien, porque además no es sólo este momento concreto aislado, sino que venimos de intentar levantarnos de la brutal crisis económica de 2008, que tanto empleo y empresas se llevó por delante, y cuando todavía no estábamos totalmente recuperados y se empezaba a ver la luz, nos hemos encontrado con la  pandemia, con un coste emocional y de vidas importantísimo, y así mismo la economía se ha vuelto a tambalear. Ahora nos encontramos en una guerra de dos países a 3.000 km, donde sin  entrar en los motivos de la misma, pues la geopolítica nos queda muy lejos, nos está afectando a todos los ciudadanos de a pie, por el encarecimiento de los productos de primera necesidad y además de una forma brutal, donde también se está produciendo un aprovechamiento de aquellos que, no estando afectados por el conflicto, han subido el precio de sus productos de una forma exponencial.

P. - ¿Cómo crees que ha cambiado la vida después de más de 2 años de pandemia?

R. - La pandemia a nivel estructural ha traído cambios que han venido para quedarse, como la proliferación del teletrabajo, el menor uso del dinero efectivo, las compras por internet,  reuniones por videoconferencia que realizábamos por prevención y ya es algo normalizado y preferible, el aumento del uso de las redes sociales, como así mismo el reparto a domicilio de comida, uso de tarjetas, del bizum, etc., cambios que nos hubiesen costado una década y esta situación lo ha normalizado en este breve espacio de tiempo por un motivo de subsistencia y adaptabilidad.

P. - ¿Has pasado miedo en algún momento?

R. - No, pero sí preocupación por cómo se desarrollaban los acontecimientos y la información que recibíamos por los canales oficiales. Durante el confinamiento, al estar trabajando y permanentemente en contacto con mucha gente, decidí que no lo tendría con los míos, con lo que estuve 45 días sólo y sin contacto presencial con los niños, se hizo duro.

Respecto al trabajo, responsabilidad extrema, como el resto de mis compañeros, sabíamos que debíamos ser pulcros en nuestras medidas sanitarias y temas de contacto, pues no podíamos permitirnos el lujo de que cayeran grupos enteros de trabajo por contagios, hubiese sido un caos para la ciudad, dado que además de los propios problemas de la pandemia, nos seguían llegando la necesidad de servicios policiales por parte de los ciudadanos. 

Desde la Jefatura de Policía Local se diseñó un plan de trabajo que incluía grupos estancos de trabajo, lugares de reunión por grupos, uso de los distintos aseos según turnos, horarios para no coincidir turnos etc., un tiempo estresante para todos, pero acabamos con un resultado muy óptimos de bajas por Covid.

P. - ¿Qué proyectos tienes de cara al futuro y qué haces ahora?

R. - Con la experiencia vivida estos últimos de crisis, pandemia, etc., añadiéndole el dolor de la pérdida de mi madre de forma repentina y de mi padre meses después, y también la importante pérdida para mí del compañero jovencísimo Fran López, mi largo plazo es muy inminente, mis proyectos y el ahora pasan por vivir con intensidad, pasión y entrega a lo que hago, mi profesión, el fútbol desde la dirección, y el asesoramiento que realizo a empresas en materia de equipamientos de seguridad para miembros de los Cuerpos de Seguridad y por encima de todo la familia. 

P. - ¿Cómo llevas tu experiencia en los banquillos?

R. - Es otra perspectiva del fútbol, disfruto cada sesión de entrenamiento, cada partido y los "post", donde tienes que analizar los aspectos a mejorar, esta parte es espectacular, es un no parar en buscar la mejora, tuve la suerte de encontrarme con Juan Carlos por mi hijo y a día de hoy llevamos siete años juntos. Aplicamos en los jugadores mucha formación de la que imparto en mi trabajo, relacionada con la biomecánica y las proporciones del cuerpo humano (Vitruvio), para lograr la mejora de cada jugador en los aspectos técnicos, para posteriormente sumarle la formación táctica y el entendimiento del juego, pues basamos el crecimiento de lo grupal desde la perspectiva de la mejora individual del jugador.

P. - ¿Cómo fueron los años que estuviste de escolta del alcalde?

R. - Echando la mirada atrás y con la perspectiva de los años que han pasado, esos años profesionalmente fueron muy exigentes, requería muchísima dedicación, recibimos siempre el máximo respeto profesional, jamás se nos cuestionó una decisión en 17 años, que a 24 horas son muchas. En lo personal fue una universidad de la vida, con el mejor Catedrático que podíamos tener, aprendimos que el día tiene 24 horas, lo importante que es escuchar, que a todo lo que haces debes ponerle la mayor entrega y toda la pasión del mundo, y que la actitud ante la vida está por encima de todo, fueron años de lealtad profesional y personal correspondidos a día de hoy con una amistad muy especial.

P. - ¿Te arrepientes de algo que hayas hecho en esta vida?

R. - No he sido de toma de decisiones viscerales, las decisiones se toman en un momento dado, con unas circunstancias e información determinada, a toro pasado todo el mundo sabe qué cartas había que jugar, lo que sí puedo es acumular errores, pero no arrepentimientos, arrepentirse es no intentar algo y eso te persigue toda la vida, y ésta no es más que un aprendizaje a través de aciertos y errores.

P. - ¿Qué significa Huelva para ti?

R. - Es el principio y la estación a la que siempre volver, Huelva es todo, es cobijo, es calor de su gente, amabilidad, porque todos hacemos ciudad y provincia, la ría y el sol de esta tierra marcan nuestra forma de ser.

P. - ¿Crees que Huelva progresa adecuadamente?

R. - Huelva progresa y crece, no a lo mejor como quisiéramos o nos gustaría. Somos una provincia, con la Capital a la cabeza, por descubrir, quien la halla descubre un paraíso. Creo que la apertura a este descubrimiento deberíamos encaminarla hacia la provincia más beneficiosa para nosotros, que sería con nuestros vecinos extremeños.

P. - ¿Qué recuerdos guardas de los partidos con el equipo de la prensa?

R. - ¡¡Espectaculares!! ¡Un entrenador exigente, como Camacho Malo, que en partidos de visitante por Sevilla y Jerez amenazaba en caso de pérdida con hacernos venir andando! ¿Te suena algo? 

Nos llevaste entre otros sitios a jugar a Monte Castillo, un campo espectacular, tratado como un green de golf, ahí si la pelota botaba y no rodaba con un pase, se te veía el cartón. 

Tus charlas técnicas de 2 minutos incluida alineación las recuerdo perfectamente: "Señores, balón a los centrocampistas y ustedes pelotazo y que corra Quilón". Jajaja. 

Tuve la suerte de reencontrarme con compañeros del Recreativo de Huelva como Oscar Arias, Jorge Lara, Carlos Botrán, Miguel Ángel del Pino, Melo, Rebollo, Chiqui, Manuel Contreras,

Manolo Picón, Indalecio España, Pedro Peña, camara de Canal Sur, Cristóbal Pérez , los hermanos Montes, Josúe y muchos más… pero el crack era Pepe Lapi!!

P. - ¿Huelva es una ciudad segura?

R. - Tenemos la suerte de vivir y ofrecer una ciudad muy segura, con la ayuda de todos los ciudadanos y la aportación que realizan mis compañeros con una responsabilidad exquisita, profesionalidad y dedicación brutales, sin olvidar a quienes están con nosotros codo con codo, como son los compañeros del Cuerpo Nacional de Policía, con quienes nos une una relación y un trato inmejorable.

P. - ¿Cómo fue tu niñez y qué soñabas ser de mayor?

Una niñez muy normal, como la de cualquier niño de esa época y muy alejada de la que viven los niños de hoy; en la calle después del colegio, las vacaciones y fines de semana los límites de la calle era la hora de la comida y cuando era de noche, puertas de casas abiertas, balón, muchos sitios para jugar, solo se quejaba la señora mayor si partías algo, vaqueros, indios,  escondite, chicharito la java, niñez con sueños de fútbol.

P. - ¿Quiénes son tus referentes personales y profesionales?

R. - Profesionalmente todos y cada uno de mis compañeros, se aprende todos los días de ellos, honra verlos con la dedicación y profesionalidad que atienden el día a día y sobre todo en los momentos críticos, cuando acuden a un lugar donde el resto de personas corren en la dirección contraria a ellos y personalmente mis padres, mi hermano Juan Manuel del cual estoy orgullosísimo, ejemplo de dedicación y crecimiento tanto en su etapa como policía como la que viene desarrollando desde hace años hasta hoy, así como su implicación con la ciudad, estamos siempre haciéndonos mutuamente de padre y madre, y como no, mis amigos Juan Carlos Guerra, Saturnino Rodríguez y Luis Ángel Espeso, por enseñarnos cómo se afrontan los baches y reveses de la vida, un ejemplo de personas, fieles, leales y con actitud ante la vida.

P. - ¿Se van cumpliendo tus proyectos de vida que te habías propuesto?

R, - El proyecto de vida más importante que una persona puede marcarse es trabajar en lo que le apasiona en cada momento y además en algunos casos como el mío, formar una familia, tener un par de hijos los cuales me enloquecen, procesando un amor eterno a sus madres, las mejores del mundo.

P. - ¿Con qué personaje histórico o no, te gustaría compartir una cena y qué le preguntarías?

R. - Con Leonardo Da Vinci. Y en cuanto las preguntas, todas en torno a su cuadro de La última cena, para empezar. Y no como histórico, tuve la oportunidad de compartir salida nocturna con Joaquín Sabina y estaría encantado de repetir.

P. - ¿Te gustaría añadir algo más? 

R. - Sí, agradecerte por supuesto este rato que hemos compartido juntos y la oportunidad que nos das de conocer a muchas personas de Huelva más en profundidad, haciendo con todo lo que haces, más Ciudad y más Huelva. Por lo demás, un mensaje a todos de esperanza y optimismo, que relativicemos los inconvenientes y los problemas, tratemos de ver siempre lo positivo de las cosas, y pensar que cuando una puerta se cierra, siempre se abre otra, el pasado es pasado, el presente ya está pasando también y el futuro es mañana mismo, por lo tanto, la vida hay que vivirla ya.

Quilon, como siempre es una auténtica gozada echar un ratito de charla contigo, verte feliz y optimista me da mucha alegría. 

Un abrazo grande amigo