Javier Álvarez: "Me parece lamentable que en España haya 17 protocolos sanitarios diferentes"

Javier Álvarez de Miranda Aceña, compañero durante muchos años y sin embargo amigo, es nuestro invitado en el día de hoy, persona entrañable donde las haya, cordial, educado, servicial, trabajador, empático, con alto sentido de la amistad, sincero, amante de los perros.... Buena gente sin lugar a dudas

Javier nació en Madrid. Licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense. Llegó a Huelva en 1989 y trabajó en Huelva Información desde entonces a julio de 2020, con un paréntesis de casi dos años en la antigua Teleonuba (enero de 2000 a diciembre de 2001). Casado desde hace 25 años con el amor de su vida y su mejor amiga, Lupe,  con quien tiene dos hijos: Javier y Nacho.

Nos vemos habitualmente, pero hace unos días mientras esperaba en la puerta de la peluquería donde acudía a arreglarse la barba, le propuse echar un ratito de charla para confeccionar esta entrevista. No lo dudó, aceptó del tirón y este es el resultado:

La pandemia nos ha cambiado la vida a todos. Tengo claro que la ciencia ayuda a la humanidad y es necesario destinar muchos más recursos a la investigación. En España, lamentablemente, las cifras son ridículas en comparación a otros sectores que, para mí, son mucho menos importantes. La verdad es que me siento engañado. Al principio nos decían que el coronavirus tendría los efectos de una simple gripe, luego que las mascarillas no eran necesarias cuando más tarde fueron obligatorias. Después, con la llegada de las vacunas, se afirmó que llegaría la que denominaron 'nueva normalidad' cuando se alcanzara la inmunidad de grupo. Ahora, con aproximadamente el 90% de los españoles vacunados, la incidencia vuelve a dispararse. Tengo claro que las vacunas funcionan, pero veo que hay un enorme problema: mientras que en el primer mundo se está empezando con la vacunación infantil y se administra la tercera dosis a los mayores, en muchos países pobres (por ejemplo de África)  apenas hay vacunados y eso es un laboratorio idóneo para que el virus siga mutando.

Ojalá llegue pronto el final, aunque sinceramente creo y vamos a tener que acostumbrarnos a vivir largo tiempo con el virus. Pienso que las mascarillas y las vacunas han llegado para quedarse. El mundo de la prensa ya estaba sufriendo una transformación enorme y con la pandemia se ha acelerado el proceso. Por ejemplo, tengo claro que el futuro de los periódicos es el formato digital, en sustitución al papel. Bueno, ya no es el futuro, claramente es el presente.

Miedo no, pero sí inquietud y preocupación al ver la enorme cantidad de muertos y hospitalizados.

Muy negativa. Como te he comentado, pienso que nos han mentido en reiteradas ocasiones y que cada uno hace la guerra por su cuenta buscando su propio interés partidista. Me parece lamentable que en España haya 17 protocolos sanitarios diferentes según decida cada comunidad autónoma. El Gobierno se ha puesto de perfil y prefiere no coger el toro por los cuernos en asuntos que sabe que le van a restar votos.

Estoy prejubilado. Tras muchos años trabajando en Huelva Información, con unos horarios infernales y sin apenas descansar los fines de semana, decidí salir del periódico para poder disfrutar más de mi familia y amigos. Se puede decir que he comprado tiempo para hacer lo que me apetece, algo que apenas tenía antes. He recuperado el placer de la lectura. Desde niño he sido un lector voraz, pero en los últimos tiempos apenas tenía ganas de leer, llegaba a casa con las pestañas quemadas.

Mi proyecto inmediato es convertirme en un avezado 'thermomixer' para alegría de mi mujer, que muchas veces tendrá la comida preparada cuando llegue a casa.

Huelva es la gran desconocida. La provincia tiene unas posibilidades increíbles, pero para su desarrollo hacen falta inversiones en infraestructuras y comunicaciones para que se pueda generar empleo y crear riqueza. Los onubenses, durante décadas, han sufrido y siguen sufriendo un déficit enorme en inversiones respecto a ciudadanos de otras provincias españolas. Es lamentable que se tarde casi hora y media en ir en tren a Sevilla. Además los políticos de Huelva deben trabajar por esta tierra, alzar la voz de una vez y dejar de obedecer sin rechistar las órdenes de sus partidos para asegurarse un puesto en el sillón.

Nací en Madrid, pero me siento onubense. Mi mujer y mis hijos son choqueros y llevo más de media vida aquí. Es una provincia que enamora con una historia milenaria, un clima benigno, paisajes de ensueño y una gastronomía envidiable.

Cuando acabé la carrera de Periodismo me hice con una Guía de Medios de Comunicación y envié cartas para solicitar trabajo a muchísimos periódicos y emisoras de radio de España. Me llamaron de Huelva Información y aquí vine. En principio a prueba durante un mes, pero ya llevo más de tres décadas en la vieja Onuba...

En el Huelva Información he tenido la oportunidad de conocer a grandes personas, de las que he aprendido mucho y con las que he compartido momentos felices y también algunos amargos, dejándonos la salud para hacer un periódico de calidad. También tengo un grato recuerdo de mi etapa en la antigua Teleonuba, donde trabajé casi dos años (entre enero de 2000 y diciembre de 2001). Me encantó el mundo de la televisión. A lo largo de mi carrera he vivido experiencias inolvidables y guardo excelentes amistades.

Mi tío Fernando, hermano de mi padre, fue el presidente del Congreso de los Diputados durante las Cortes Constituyentes y más tarde Defensor del Pueblo. Fue un hombre que luchó por traer la democracia a España y estuvo deportado en Fuerteventura por el régimen franquista. Una de las grandes diferencias que veo entre los políticos de antes y los de ahora es la formación y la educación, aunque actualmente también hay algunos excelentemente preparados. Un político debe ser un servidor público y no servirse de lo público para llenarse los bolsillos.

Recuerdos entrañables de mi familia, mi vida en Madrid y jugar con mis amigos. De pequeño soñaba con ser futbolista, pero pronto me di cuenta que no tenía las cualidades físicas y técnicas necesarias. También me planteé ser ingeniero, como mi padre y mi hermano, aunque al final me decanté por el Periodismo.

Me encantan la lectura, el cine, el disfrutar con la familia, pasear y hacer deporte. Antes iba al gimnasio pero desde que empezó la pandemia lo he dejado por precaución. También adoro viajar y conocer nuevos lugares aunque el coronavirus lo está poniendo mucho más difícil.

He tenido la fortuna de trabajar con excelentes profesionales, algunos desgraciadamente han fallecido, como Ana Vives o Ángel Serradilla. He conocido a grandes periodistas como Rafael Unquiles, Rafael Moreno, mi compadre Paco Gamero, Manolo Saraiva, Javier Ronchel, José Carlos Galván, Raquel Rendón... Mi referente individual es mi padre, que fue una gran persona. Un hombre amable, sincero, educado, inteligente y cordial. Sin duda, un ejemplo de bonhomía.

En el deporte de Huelva el Recreativo tiene una importancia mayúscula. El Decano copa titulares, como es normal, pero creo que también se debe ensalzar el trabajo de otros muchos clubes y deportistas onubenses. A mí me encanta el fútbol, pero también he disfrutado muchísimo con los éxitos logrados por el Ciudad de Huelva y el Club Voley Huelva (lamentablemente desaparecidos por problemas económicos), el Conquero, el Sporting o el Club de Bádminton IES La Orden. En cuanto al deporte individual, en los últimos años han brillado especialmente Carolina Marín y Emilio Martín, aunque hay otros onubenses que también han destacado en diferentes modalidades.

Pues si, quiero añadir que el Recre esta temporada milita en la categoría más baja de las que ha estado en su centenaria historia. Tras la vergüenza de campaña del curso pasado, en la actual parece que el equipo va a lograr su objetivo. El club ha atravesado momentos delicadísimos y su mayor patrimonio, sin duda, es su afición. ¡Ojalá que los recreativistas sigan disfrutando con su equipo el próximo año y en un breve plazo de tiempo el Decano regrese a la categoría que le corresponde!

Javi, que me ha encantado este ratito de cháchara, disfruta de tu tiempo que bien merecido lo tienes. ¡Ah! Y ahora que estás liado con los robot de cocina, si algún día te decides por hacer alguna tarta, no se te olvide que soy muy "chuchón"