El milagro de uno de los mejores futbolistas de la historia del Recreativo

El nombre de Santi Cazorla evoca en el recreativismo cabriolas imposibles, regates de fútbol ficción, pases al milímetro y goles espectaculares. El asturiano es el compendio del mejor Recreativo de todos los tiempos, aquel que se clasificó como el octavo mejor equipo de España y estuvo a nada de llevar el balompié de Huelva a Europa.
Luego, Cazorla y el Decano separaron sus destinos para seguir caminos bien diferentes. Y mientras el Recre se hundía, el ídolo de la afición albiazul vivía lo mejor y lo peor del fútbol. Títulos y contratos millonarios, frente a una lesión que amenazó incluso su salud. Aún así, nunca se rindió y su esfuerzo ha tenido recompensa.
Porque al fin Santi Cazorla vuelve a sentirse futbolista. Tras participar en la pretemporada del Villarreal a modo de período de prueba, aquel genio menudo que hacía enloquecer al Nuevo Colombino con su talento y simpatía se ha ganado ocupar una de las licencias de la plantilla del Submarino Amarillo. Un milagro hecho realidad.