sábado. 27.04.2024
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Carolina Marín, ¡eres increíble!  (16-21, 21-15 y 22-20)

La onubense se mete en los cuartos de final del Mundial de Tokio tras remontar un set y cuatro bolas de partido a la china He Bing Jiao.
Carolina Marín celebra uno de sus puntos contra Bao.
Carolina Marín celebra uno de sus puntos contra Bao.
Carolina Marín, ¡eres increíble!  (16-21, 21-15 y 22-20)

Carolina Marín no sólo es la mejor deportista de la historia de Huelva. No sólo es una de las mejores deportistas de España, Europa y el Mundo. Su poder va más allá. Como Michael Jordan, Maradona o Usain Bolt, la onubense es única e irrepetible. Nuestra volantista es y será una leyenda.

Porque para ello hay que poseer un talento especial, una genialidad impredecible y un carácter ganador que te hace levantarte cuando todos los mortales habrían enarbolado la bandera blanca de la rendición. Todo eso hace que Carolina trascienda más allá de los títulos y el palmarés.

Carolina Marín sonríe durante su encuentro con Bao.
Carolina Marín sonríe durante su encuentro con He Bing Jiao.

Se ha visto esta madrugada en los octavos de final del Campeonato del Mundo, que se viene disputando esta semana en Japón. Marín se enfrentaba a la china He Bing Jiao, una dura rival. Y como era previsible, la onubense atravesó serias dificultades para imponerse (16-21, 21-15 y 22-20)

Para empezar, tuvo que remontar el set inicial, jugando la mayor parte del tiempo con la presión de saber que un fallo más y se iría a casa. Pero además, una vez forzada la tercera manga, se enfrentó a una crisis letal. Marín perdía por cuatro puntos (16-20) y estaba a un paso de la eliminación.

Bao muerde el polvo ante Carolina Marín.
Jiao muerde el polvo ante Carolina Marín.

Sin embargo, justo cuando peor lo tenía, el gen ganador que diferencia a los mitos del deporte del resto, se activó. Ante la incredulidad y la admiración del público que se daba cita en el Gimnasio Metropolitano de Tokio, Marín levantó ¡¡¡cuatro bolas de partido!!! para acabar ganando el set con un parcial de seis a cero. Carolina, eres increíble.