Braulio pide perdón con dos meses de retraso
"Me equivoqué con aquel gesto a la grada", admite el delantero en relación a su desafortunada retirada del partido contra Las Palmas, que se disputó el 13 de diciembre.
Es el jugador menos querido por el Nuevo Colombino. Y no le faltan razones a la grada. Al margen de su nulo rendimiento goleador, su dudoso estado de forma durante buena parte de la temporada y su turbulento horizonte judicial (está imputado por el supuesto amaño del partido Levante-Zaragoza y ya fue condenado en firme por abusos sexuales), Braulio se convirtió en el 'enemigo público número uno' del recreativismo el pasado 13 de diciembre.
Ese día, el ariete jugó de titular en el partido entre el Decano y Las Palmas, para ser sustituido en la segunda mitad. En su camino hacia el vestuario, Braulio fue objetivo de los abucheos del público y no tuvo otra idea mejor que responder lanzando varios besos al graderío y señalándose el escudo en varias ocasiones con un sonrisa irónica.
El gesto no pasó desapercibido para nadie, tampoco para los dirigentes y para el entonces entrenador albiazul, José Luis Oltra. El club le abrió expediente, aunque el técnico valenciano siguió dándole minutos, en otro acto de desafío a la zona noble.
Para enlodar aún más el asunto, Braulio se ausentó de los partidos ante Osasuna y Barcelona B alegando molestias físicas con las que han jugado otros compañeros, al tiempo que dejaba claro su deseo de abandonar el Recreativo en el mercado de invierno.
Cerrada la puerta de salida una vez finalizado el plazo para fichar, Braulio parece haber recapacitado. Aunque sigue sin ver portería, su actitud en el campo ha mejorado y Juanma Pavón ya ha señalado la recuperación del delantero como una de sus prioridades.
Y fuera del campo, también ha rectificado. Ha sido este jueves, en una rueda de prensa en la Ciudad Deportiva. "Me equivoqué con aquel gesto a la grada. Pido perdón por ello y aseguro que mi propósito es darlo todo para salvar al Recre", ha dicho. Más vale tarde que nunca.