viernes. 19.04.2024
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Inspección de Trabajo interviene ante la desprotección del personal sanitario

La Inspección de Trabajo urge al SAS a cubrir y solucionar las carencias después de la denuncia de CSIF registrada en la Inspección de Trabajo por “inacción” en la protección de sus trabajadores.
Inspección de Trabajo interviene ante la desprotección del personal sanitario

El sindicato CSIF ha valorado el requerimiento que la Inspección de Trabajo ha realizado al Servicio Andaluz de Salud (SAS) para cubrir plazas de técnicos de Prevención de Riesgos Laborales (PRL) después de que el sindicato denunciara la desprotección del personal de la sanidad pública al no estar cubiertas dichas plazas conforme a la dotación mínima que establece la normativa.

Tras la denuncia efectuada en mayo pasado por CSIF, la autoridad laboral insta ahora a la Administración sanitaria a dar cobertura a un total de 17 plazas de distintas categorías relacionadas con la PRL y que no se encontraban cubiertas hasta el momento en distintos distritos, áreas de gestión sanitaria y hospitales de la comunidad autónoma andaluza. En concreto, en Huelva falta un técnico de nivel superior en Higiene Industrial en el Hospital Infanta Elena, así como un técnico intermedio de Ergonomía y Psicosociología Aplicada en el Hospital Juan Ramón Jiménez.

Con ello, la Inspección da la razón a CSIF en su planteamiento sobre la “inacción” de la Administración sanitaria a la hora de cubrir dichos puestos, tras haber solicitado al SAS información detallada sobre el personal integrante de cada unidad de PRL. Ha sido a raíz de dicha información, precisamente, cuando la autoridad laboral ha concluido que faltaban por cubrir las mencionadas plazas de estas categorías.

CSIF mantiene que la falta de estos profesionales, fundamentalmente técnicos en Seguridad en el Trabajo, en Higiene Industrial y en Ergonomía y Psicosociología Aplicada, conlleva una sobrecarga de trabajo en el seno de las unidades de Prevención de Riesgos Laborales y supone un riesgo para la seguridad y salud, no sólo de los profesionales de la sanidad pública, sino también para el medio ambiente y para las personas usuarias.

Tipologías de riesgos que deben ser controlados

De hecho, en el trabajo del ámbito sanitario existen muchas clases de riesgos que deben ser controlados y que traspasan el ámbito de los propios centros. En concreto, se trata de riesgos químicos: sustancias nocivas que se encuentran en distintas formas, sólido, líquido, aerosoles, gases y polvo y que pueden generar daños por inhalación, absorción o ingestión; así como de riesgos biológicos, que son elevados en los centros hospitalarios, y la exposición a ellos puede provocar infecciones  importantes. También se pueden dar riesgos físicos, entre los que se  incluyen las  radiaciones.

La Inspección de Trabajo detalla estas carencias y urge al SAS a cubrirlas después de la denuncia de CSIF registrada en la Inspección de Trabajo por “inacción” en la protección de sus trabajadores al no cubrir las plazas de técnicos de Prevención de Riesgos Laborales con la necesaria agilidad en los centros sanitarios públicos andaluces, cuyas unidades de PRL están “totalmente desbordadas”.

Asimismo, advierte que “de no dotar a los recursos preventivos de los medios que sean necesarios para el desarrollo de las actividades preventivas, se podría incurrir en falta grave tal y como así establece el Real Decreto Legislativo 5/2000, de 4 de agosto, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley sobre Infracciones y Sanciones en el Orden Social, en su sección 2ª y artículo 12”.

Cobertura de plazas

Ante esta situación, La Administración sanitaria se ha comprometido a corregir el déficit de estos puestos incluyendo las categorías correspondientes en la Bolsa Única del SAS (antes del próximo 30 de abril), agilizando así su cobertura, que hasta ahora se realizaba por convocatoria específica.

CSIF entiende que la selección de técnicos de PRL ligada a convocatorias específicas conlleva un proceso muy lento, que en ocasiones se dilata durante más de un año, periodo durante el que el puesto se mantiene sin cubrir. Por ello, ha reclamado que, tras el requerimiento de la Inspección de Trabajo, estos puestos se cubran a través del procedimiento general, un extremo al que ha accedido la Administración.