Teletaxi encara nuevas elecciones para poner fin a la ‘guerra civil’

El actual presidente de Gas Auto, Roberto González, ha anunciado que presentará su candidatura con una nueva junta rectora, y se propone como reto "unificar al sector en una sola cooperativa"
La cooperativa Gas Auto (Teletaxi) celebró la semana pasada una asamblea en la que se disolvió, con 108 votos a favor y 63 en contra, la junta directiva de la entidad. La desunión en el seno del sector del taxi en la ciudad de Huelva es incuestionable, y la última protesta (de un sector minoritario en la capital) contra el Ayuntamiento dio fe de ello. Precisamente, como ha manifestado en declaraciones a diariodehuelva.es Roberto González, presidente de Teletaxi, esta disolución de la junta directiva viene a ser el primer paso para acabar con una guerra civil que viene padeciendo el sector desde hace años.
La cooperativa ha fijado el día 23 para la presentación de candidaturas para tomar las riendas de Gas Auto, y el propio Roberto González, que hasta entonces ejercerá como presidente en funciones, ha adelantado que volverá a presentarse (hasta ahora es la única candidatura confirmada, oficiosa de momento), y se propone como reto la unión y la paz no sólo en Teletaxi, sino también en el conjunto del sector: “Intentaré unir el taxi en una sola cooperativa”. Porque, como ha lamentado, “el sector se ha desunido”.
Es la asignatura pendiente, y por ello se ha querido ‘resetear’ y empezar de cero. González sabe que esta unión es “necesaria” para aunar objetivos y prioridades, así como para armonizar las relaciones con el Ayuntamiento de Huelva, que ya ha anunciado que el rescate de licencias –hay 263 en la actualidad- y la reestructuración que necesita el taxi contarán con partida presupuestaria.
Roberto González ha anunciado que volverá a presentarse para presidir la cooperativa con otro consejo rector, y además de la unificación del sector buscará “poner orden en las cuentas” de Gas Auto.
Sea como sea, el objetivo común tanto de Gas Auto SCA como de Taxi Huelva, el otro colectivo del sector, y en el que coinciden todos los profesionales, es precisamente reestructurar el número de licencias para dar una solución a una oferta saturada y nada rentable para los trabajadores, con paradas de taxis repletas y sin movimiento. La viabilidad del servicio pasaría por la retirada de medio centenar de licencias.