Palos desmonta el monumento del Ícaro para restaurar sus cimientos
El estado de deterioro de la base ha llevado al Ayuntamiento a despiezar la obra, con piedras de unos 400 kilos.
Operarios del Servicio Municipal de Obras del Ayuntamiento de palos de la Frontera comenzaron este miércoles las obras de despiece de las piedras que revisten la cimentación del monumento del Ícaro, ubicado en la Rábida y que recuerda la inmortal hazaña del Vuelo del Plus Ultra. Los servicios técnicos municipales han comprobado que la cimentación del monumento esta corroída; el paso del tiempo y las inclemencias climatológicas ha provocado su oxidación lo que está provocando un empuje hacia fuera de las piedras que lo revisten.
Por ello, como ha manifestado el primer teniente de alcalde y concejal de Obras y Turismo de Palos, Ricardo Bogado, se ha decidido desmontar tanto la estatua de bronce como las piedras perimetrales, para proceder a romper la cimentación existente en el núcleo, que se encuentra muy deteriorada. A continuación se hará una nueva cimentación y se volverá a colocar las piedras que la recubren.
Según Bogado, se trata de un trabajo muy complicado y laborioso que realiza el Consistorio con medios propios. Un total de cinco trabajadores municipales se encargarán de este cometido para el que se ha dispuesto un andamiaje industrial que rodea el monumento y que tiene una altura aproximada de 8 metros.
Por la complejidad de los trabajos, que requiere mover piedras de alrededor de los 400 kilos, los técnicos del Ayuntamiento han precisado que las obras tendrán una duración mínima de dos meses.
Los servicios técnicos han confirmado que el problema se encuentra en el revestimiento y el soporte que sustenta la estatua de bronce.
El alcalde, Carmelo Romero ha hecho hincapié en lo delicado de la actuación ya que se trata de "preservar una de nuestras señas de identidad en las mejores condiciones". “Desmontar la base custodiando en todo momento la integridad del monumento para una vez reparada volver a colocarlo requiere mucho cuidado y esmero”, comentaba el edil.
Este monumento forma parte de la historia del pueblo, ya que fue donado por el gobierno Argentino en los años veinte del siglo pasado, como muestra de gratitud por dejar allí el hidroavión que realizó el primer vuelo transoceánico que voló desde Palos de la Frontera hasta Buenos Aires.