La peatonalización de la avenida de Italia divide a los detallistas del Mercado

La peatonalización de la Avenida de Italia a la altura del Mercado del Carmen se ha ensayado estas Navidades antes de comenzar las obras definitivas y el resultado no es todo lo satisfactorio que cabría esperar entre los dueños de los puestos, que reclaman aparcamientos, y los taxistas. Los que están satisfechos son, claro está, los vecinos de la zona. Aunque el presidente de los detallistas del mercado, Pedro Miguel Nieto, se muestra contento con la peatonalización y asegura que "es una reivindicación desde cuando se inauguró el nuevo mercado" (en febrero hace siete años), no todos comparten su opinión y hay tantas críticas como alabanzas hacia el nuevo proyecto.
Uno de los que mantiene una oposición más activa es el frutero Francisco Blandón, hasta tal punto que ha iniciado una recogida de firmas de apoyo a un manifiesto en el que pide que se paralice la peatonalización hasta que no se garanticen aparcamientos gratuitos y facilidad de acceso al mercado. Entre las medidas defendidas por Blandón figuran también autobuses gratis para los clientes, invertir en publicidad, desarrollar actividades que atraigan al público, traer a la zona el mercadillo de los viernes, facilitar carros de la compra e instalar aire acondicionado, además de echar a la empresa que gestiona las instalaciones y contratar a un especialista en marketing a tiempo completo para que defienda los intereses de los concesionarios. También solicita que sea la Policía Local la que se encargue de la vigilancia porque "la seguridad privada nos cuesta 180.000 euros al año".
Blandón cree que va a contar con el apoyo de bastante gente porque el presidente de los detallistas "ha pedido la peatonalización sin contar con nosotros". "El que viene en coche -continúa- se lleva más de media hora para llegar y una vez aquí no tiene sitio donde aparcar; después de estar dando vueltas tiene que estacionar en el parking más caro de Andalucía". La clave está en facilitar el acceso y los aparcamientos, que "los hay gratuitos en cualquier centro comercial", y esto lo suscribe gran parte de los detallistas consultados. De realizarse la peatonalización, Blandón apuesta por cortar el tráfico a la altura de Renfe, desviar el tráfico en el Ensanche y poner autobuses gratuitos que acerquen a los clientes. También quiere que el solar del antiguo mercado sea el aparcamiento del nuevo.
La falta de aparcamientos es también el principal problema para el carnicero Manuel Rodríguez, que asegura que "las Navidades han sido para echarse a llorar porque quien viene a comprar aquí son de los barrios de alrededor y esa gente necesita coche y, al no poder aparcar, se van a los centros comerciales donde el parking es gratis". Rodríguez señala que nadie le ha consultado ni a él ni al 80% de los detallistas si querían la peatonalización. Para este carnicero, el cierre al tráfico no ha hecho más que empeorar una situación que empezó a ir mal desde hace cuatro años hasta tal punto de que ha pensado más de una vez en cerrar, pero "a donde voy con 50 años, quien me va a contratar", se queja.
A Demesio Pérez, que vende cupones a la entrada del mercado, la medida ni le beneficia ni le perjudica, aunque desde su lugar de trabajo ve que "los atascos son monumentales". "Los viernes vienen muchos sevillanos que quieren una entrada y una salida rápida y así no hay manera".
Patricia Pérez y su madre, Concha Rodríguez, son dos vecinas de la zona a las que la medida les parece bien, aunque reconocen que la clave está en facilitar los aparcamientos. Para la joven vecina Isabel Gil, la peatonalización es "genial" y, aunque al principio pueda haber algunas molestias, es cuestión de adaptarse: "Falta concienciación por parte de los peatones, que cruzan por donde no deben, y de los conductores, que aparcan en doble fila. Pasa lo mismo que con el carril bici, que los peatones se piensan que son para pasear, en Sevilla pasaba lo mismo hasta que empezaron a multar".
Isabel Palomino, que tiene un puesto de bivalvos, considera "estupendo" el cierre de la avenida y apuesta porque se haga indefinidamente "porque vienen muchas personas mayores que así lo tendrán más cómodo al no tener que cruzar el semáforo ni enfrentarse a tanto tráfico". El pescadero Domingo Marín cree que la peatonalización le viene bien, pero se queja de que la circulación no está bien señalizada ni se ha avisado del corte con suficiente tiempo. José Luis Burgos, que regenta un puesto de vinos, aprueba la medida, aunque sostiene que se puede hacer de otra manera: "Habilitando aparcamientos y que la Policía no sea tan estricta con las multas". Más aparcamientos y publicidad para el mercado es lo que pide Francisco Javier Narváez desde su tienda de salazones y productos gourmet "para que la gente salga con las bolsas y tenga el coche cerca pagando poco".
Al pescadero Manuel Cruz no le parece mal que el tramo frente al mercado se haga peatonal, lo que ya no le gusta tanto es que el ensayo se haya hecho coincidiendo con la Navidad porque asegura que tiene muchos clientes de otros pueblos y de Sevilla "que no sabían para dónde tirar". Cruz también quiere traer el rastro, que se dé una solución a los aparcamientos y que el Ayuntamiento haga algo para dinamizar y atraer clientes "si no el mercado de Huelva se muere", advierte. Carmen Minero, una de sus clientas, interviene para decir que hay que dar más facilidades para que acuda la clientela. "A mí no me viene mal porque soy de aquí, pero comprendo los problemas de tráfico", sostiene.
Y de problemas de tráfico sabe mucho el taxista Francisco Pérez: "Llegar desde Renfe hasta aquí puede suponer 10 ó 15 minutos y claro, muchos no cogen taxis". Pérez aboga por que quiten la peatonalización o por que dejen pasar al menos al servicio público. Su compañero Miguel Ángel Manzano, más que estar contra la medida en sí está contra la fecha en la que se ha hecho. "De momento hay mucho atasco -relata- pero hace falta que la gente se haga con la circulación y con el tiempo se normalice", sentencia.