sábado. 27.07.2024
El tiempo

El comercio del centro de la capital agoniza desde que comenzó la pandemia

Las grandes firmas como Zara abandonan las calles del casco viejo de la capital para concentrarse en núcleos comerciales de mayor auge como el parque Holea.
El comercio del centro de la capital agoniza desde que comenzó la pandemia

El verano significa la enésima embestida al comercio de Huelva. Pese a los constantes intentos públicos por reforzar a la pequeña y mediana empresa, el sector resiste a duras penas esperando con urgente necesidad que la llegada del otoño vuelva a retomar el pulso de las calles de la ciudad.

El centro de la capital se ha convertido desde que comenzase la pandemia en una colección de siniestros letreros y carteles: se traspasa, se alquila. Se vende. Hasta los anuncios de liquidación que antiguamente eran sinónimo de cambio de escaparate ahora esconden una despedida. 

“El centro se muere y las ayudas son insuficientes, casi no quedan incentivos y la gente está dedicando este espacio únicamente a la hostelería, en parte porque son quienes más incentivos reciben”, explica Antonio L, dueño de una zapatería.

Las grandes firmas, como es habitual, han sido las primeras en echar el cierre. Inditex, escudada en un proceso de transformación digital, ha cerrado en menos de un año sus dos tiendas cercanas a la calle Concepción:  Zara, en octubre de 2020 y Zara Home, el pasado julio. “Si Amancio tiene problemas para llegar a fin de mes, imagina cómo está la pequeña empresa”, comenta irónicamente Antonio.

Aunque la multinacional acordó con el Ayuntamiento que reubicaría a sus trabajadores en otras tiendas de la provincia, lo cierto es que algunos de ellos ya engrosan las listas del paro por finalización de contrato. “Es cierto que nos reubicaron temporalmente en otras tiendas. Durante la campaña de navidad estuve trabajando en la tienda de Holea pero al acabar mi contrato se acabó”, explica María B. exdependienta de Inditex. “Estamos en agosto y todavía estoy esperando que me llamen”

Otros comercios como Intimissimi, del Grupo Calzedonia, han abandonado también las calles del casco viejo de la capital para concentrarse en núcleos comerciales de mayor auge. Mientras sucede esta maniobra, el pequeño comercio sin apenas margen opta por el cierre definitivo. “No podíamos hacer frente al alquiler y a los gastos diarios, eran demasiados y las previsiones, con la llegada del verano, no era buenas así que decidimos cerrar. No tuvimos otra opción”, explica Pepa, dueña de una tienda de complementos.

Caída libre en España

La situación no solo es catastrófica en Huelva. El sector del comercio ha perdido este año alrededor de 160.000 empleos en todo el Estado desde que comenzó la pandemia, según un reciente informe del sindicato CC.OO.

Buena parte de esta hemorragia corresponde a personas empleadas en el comercio minorista, el sector que acumula el mayor porcentaje de trabajadores con un 63 %. Este tipo de comercio de venta directa al consumidor final ha perdido hasta 131.900 trabajadores en el último año. Actualmente el modelo minorista se mantiene en 1.825.300 empleados según los datos facilitados por el sindicato.

Esta misma fuente recoge que el comercio mayorista ha perdido cerca de 25.600 empleos desde el inicio de la pandemia y actualmente mantiene alrededor de 767.100 personas activas, un 26 % del total de empleadas.

La venta y reparación de vehículos es la tercera fuerza motriz en cuanto a porcentaje de empleo, situándose en un 11 % y 331.000 personas activas. Este sector ha sido testigo de la pérdida de 1.600 puestos de trabajo a finales del segundo trimestre de 2021.

Para entender mejor estos datos, CCOO en un reciente informe proyecta una imagen escalofriante que resume a la perfección lo que ha significado el coronavirus para la pequeña y mediana empresa dedicada al comercio: De las 3.082.500 personas ocupadas en el comercio en el primer trimestre de 2020, explican desde el sindicato, se ha pasado a 2.923.400 al final del segundo trimestre de este año. 

La situación es especialmente alarmante para los trabajadores que están atravesando un ERTE y todavía no saben si recuperarán sus empleos. Desde CCOO se hace especial hincapié en que se trata de casi 60.000 las personas afectadas por ERTE en el comercio.

A pesar de la situación angustiosa que viene atravesando el sector, el sindicato asegura que existen “datos suficientes como para ser optimistas”. En este último trimestre, especialmente en lo que respecta a las cifras de paro, el desempleo se ha reducido un 29,8 % y casi 75.000 personas han vuelto al mercado laboral este verano.