Acera, asfalto y aparcamientos en Isla Chica
Las obras que se están llevando a cabo en calles de Isla Chica y Viaplana, al margen de los movimientos en el Estadio Colombino, no están siendo del agrado de los vecinos de la zona, primero, porque entienden que todos estos trabajos del Ayuntamiento se están acelerando ante la cercanía de las elecciones municipales, y segundo, porque el problema de las vías no estaba tanto en la estética del acerado, sino en el estado mismo del asfalto, que presenta serias grietas y socavones. Además, hay un malestar creciente entre los residentes por la falta de plazas de aparcamiento, ya que las mismas obras en el acerado impiden estacionar a los vecinos, teniendo que buscar muy lejos de sus casas (quien no tenga garaje) zonas susceptibles de encontrar plaza de aparcamiento. La solución provisional de habilitar uno de los carriles de la avenida Federico Molina es una solución a medias que agradecen los comerciantes, pero que de ninguna manera soluciona el déficit de aparcamientos en la populosa barriada de la capital. El principal problema está en las calles sometidas a obras, donde ya era difícil encontrar aparcamiento. Se han medido mal los tiempos y las formas, y esa solución de asfaltar los aparcamientos del solar junto al colegio Reyes Católicos ha tenido que paralizarse ante las quejas de vecinos y comerciantes, que preveían ya otro zarpazo a los plazas para aparcar mientras durasen las obras, y en una época tan sensible como la Navidad. Y la impresión es la de siempre, que estas obras siempre llegan en el último momento, cuando las municipales están a la vista.