lunes. 09.09.2024
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José Antonio Cera presenta su colección "Dibujando Retratos"

José Antonio Cera presenta su colección "Dibujando Retratos"

A las 8 de la tarde el pintor trianero, como a él le gusta llamarse, José Antonio Cera Grande-Caballero ha presentado en la sala de la cafetería capitalina La Atarazana, su nueva colección llamada "Dibujando Retratos", en la que se recoge inicialmente retratos de personajes de los años sesenta y setenta tanto del mundo de la música como de la cinematografía mundial. Rostros como Paul Newman, Alaska o Miguel Bosé cuelgan desde ayer y hasta el día 15 de noviembre en las paredes de la conocida cafetería La Ataraza de Huelva.

José Antonio Cera es un pintor de nacimiento, a pesar de que el arte del lápiz pudo venirle por su profesión como arquitecto. Hace mucho tiempo que conocí a José Antonio y cualquier tipo de opinión sobre su persona y obra estaría irremediablemente teñida por la subjetividad del cariño y amistad que le profeso. Pero dejando a un lado este aviso, hemos de señalar la facilidad y magia de sus trazos y la técnica para esparcir los oscuros y destacar la esencia humana. Los ojos de Cera son los ojos naturales del retratado, recoge su alma, la pasión y sentimientos que los mismos, los ojos, transmiten. Donde hay pena recoge pena, donde se visualiza ilusión absorbe la ilusión, donde físicamente hay algún defecto o irritación son plasmadas con tal precisión de realismo que parece fotografiada.. Y los mismo puedo decir de lo que él llama triangulo vital. Ojos, nariz y boca. Tres elementos que hacen el alma visualizadora de la persona y que refleja su alma, su estado de ánimo o, simplemente, su corporeidad.
Este Trianero de sesenta y cuatro años comparte desde su más tierna edad sus dos pasiones. El dibujo y el deporte. A los seis años, por motivos de trabajo del padre, se marcha a Madrid . Por entonces un niño flaco y de aspecto enfermizo con dos ilusiones bajo el brazo. Su carpeta de dibujos y su deseo de recuperase físicamente a través del deporte. Su fuerza de voluntad y su tesón le ayudaron a conseguir ingresar en La Residencia Blumer y ser campeón de Castilla de Gimnasia a los ocho años. Cuando un año más tarde vuelve a Sevilla, José Antonio Cera se enfrenta a una realidad que va a marcar su vida. Los constantes destinos profesionales de su padre hace que desde esa temprana edad viva deambulando entre casas de familiares y estudiando en los Padres Blancos del barrio de los Remedios. Su pasión por el deporte y el dibujo se hace más fuerte en consuelo a su soledad indirecta familiar. Así que no es raro ver le por el Barrio de santa Cruz pintando y vendiendo sus bocetos a los turistas para ganarse algunas pesetas que nunca venían mal. A los diecisiete años ingresó en La Escuela de Arquitectura de Sevilla y comienza su época como universitario, como gran deportista del rugby y dibujante con cierto reconocimiento.


- Qué técnica prefieres a la hora de plasmar tus sentimientos?
- Mira es muy complicado pintar sino sabes dibujar y yo soy un enamorado del dibujo. Aunque también utilizo las técnicas de la acuarela, la témpera o el óleo. Pero lo que realmente me apasiona es el retrato y el boceto.
- ¿¿ Porqué "Dibujando Retratos", José Antonio?
- Se me ocurrió este verano de pronto. Pensé que sería muy interesante recoger retratos o caras de personajes que hayan representados algo o mucho en una época determinada y por ello pensé en los años sesenta, setenta y ochenta y en diez personajes que en esas décadas me impactaron. Y a cada uno le di un tratamiento distinto, técnicamente hablando. Mira, Miguel Ángel, lo que quiero y deseo con esta colección no es otra cosa que transmitir mi pasión al que ve mi obra, disfrutar con ella.
- ¿Porqué esa fijación por los ojos en tu obra?
- La parte más importante de un retrato son los ojos y la boca. El fondo de los ojos, sus venas, manchas o brillos que tiene el retratado son fundamentales para recoger o atrapar su alma. Y la boca es un todo para coger su expresión.


- ¿Es esta tu primera Exposición?
- No, no es la primera,aunque si con esta técnica del dibujo. He hecho varias que he expuesto en el Restaurante Rocataliata . algunas con el pintor onubense Antonio Suárez. He utilizado para ellas dibujos con rotuladores sobre papel plástico, acuarela o esmaltes, en ocasiones simples esmaltes de uñas con unos efectos verdaderamente sorprendentes.
- Por lo que tengo entendido tus cuadros se venden muy bien. ¿ Darías el salto al profesionalismo en el sentido de vivir solo de la pintura?
- Es esa una pregunta bastante compleja. Por un lado está la difícil situación de atraviesa mi sector profesional, la construcción y, por otro lado, mi ilusión cada vez más profesionalizada de la pintura. ¿Qué quiere decir esto? Pues que la ausencia de ingresos por parte de la arquitectura se suple con los ingresos provenientes de las ventas de mis cuadros. Yo, por ahora, funciono por encargos , sobre todo en lo que se refiere a retratos y, en verdad, me va muy bien pues los precios asequibles y el resultado final del gusto del cliente. Pictóricamente me encajo en la tendencia más pura del realismo. Quiero y creo que consigo que lo que dibujo se vea y pueda ser comparado y ello sirve para que la gente se deje pintar. Aparte, que pinto también numerosos paisajes y desnudos, que son temáticas que me encantan.
- Por último, José Ántonio, ¿qué esperas con esta exposición?
- Seguir los pasos marcados. Que la gente me vaya conociendo a mi y obra y que la aprecien. Y sobre todo que disfruten al menos la mitad de lo que disfruto yo al hacerla. Espero, por supuesto, que esta exposición se convierta en una lanzadera profesional por la que se me encargue trabajos y seguir trabajando. La he retomado con mucha fuerza. Pero no quisiera terminar sin decirte de mi agradecimiento sincero a Moncho Llanes, Armando Martinez y Fran Rubio, dueños de La Atarazana, por el comportamiento y buena disposición personales que han tenido conmigo para la celebración de esa exposición en su local
José Antonio Cera llegó hace veintiocho años a Huelva arrastrado por la venida a esta ciudad de casi toda su familia. En ella, en Huelva, sin dejar de ser Trianero hasta la médula, se estableció como su primera tierra y sus primeras vacaciones en la Punta Umbria de los cincuenta se hicieron eternas. Aquí se casó con la onubense Mercedes Lozano e igualmente con ella tuvo dos hijos choqueros, Davis y José Antonio. Cuenta Cera con una gran popularidad en la villa, tanto por su labor profesional cuanto que fue pionero, entre otras, de traer a Huelva el deporte de sus amores, el rugby. Ese deporte que tanto practicó federado por los desaparecidos campos sevillanos de Chapina y de toda la geografía nacional. José Antonio Cera pintor, retratista del alma, amigo del corazón.

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