Así se han adaptado los bares y restaurantes de Huelva a la fase 1

Desde el pasado 11 de mayo Huelva se encuentra en la fase 1 de la desescalada. Una etapa en la que, por fin, los onubenses pueden disfrutar de los ansiados reencuentros en la calle.

La pasada semana el Gobierno autorizaba al sector de la restauración a abrir sus terrazas con el 50% de ocupación y asegurando los dos metros de distancia entre una y otra mesa. Como mucho puede haber 10 personas por mesa y tanto mesas como sillas deben ser desinfectadas entre cliente y cliente. El interior de los establecimientos estará cerrado al público y será solo lugar de paso del cliente para ir al aseo, al menos, hasta la siguiente fase.

Aunque algunos establecimientos ya se encuentran abiertos, lo cierto es que no todo el mundo está dispuesto a asumir riesgos o pérdidas con una apertura, todavía, cargada de restricciones.

Unas restricciones que, unidas al mal tiempo de estos últimos días, han obligado a un gran número de bares y restaurantes a mantener el cierre. A día de hoy, la mayoría de empresarios del sector hostelero de Huelva siguen sin abrir sus negocios.

"De momento, la incidencia es muy baja, ya que hasta el domingo 17 de mayo tan solo han abierto un 10 % de las terrazas de los establecimientos hosteleros de la provincia de Huelva", cuenta a este diario Rafael Acevedo, presidente de la Asociación Provincial de Bares, Restaurantes y Cafeterías de Huelva (BARECA).

Muchos esperarán hasta la próxima fase para la apertura. Mientras tanto, trabajan a puerta cerrada mediante el reparto a domicilio, con el objetivo de evitar la caída total de ventas.

Según BARECA, en torno a un 5 % de los bares y restaurantes onubenses funcionan con pedidos a domicilio actualmente.

CÓMO SE HAN ADAPTADO LOS BARES QUE HAN ABIERTO EN ESTA FASE 1

Desde BARECA resaltan la capacidad del sector para adaptarse a las medidas del confinamiento: "la hostelería de la provincia de Huelva se adapta a todo aquello que se establezca, ya pasó en su día con la ley antitabaco. Como sector responsable que somos vamos a asumir todas las medidas de higiene y prevención que nos han establecido, para que nuestros clientes, proveedores, y trabajadores tengan la mayor seguridad posible".

El Restaurante L’Italiano Gran Vía TheAtre, en el corazón de la capital onubense, volvía a abrir sus puertas el pasado viernes, 15 de mayo. Desde su reapertura, en este restaurante han colgado cada día, el cartel de completo.

"La respuesta de la clientela ha sido muy buena. Mucho mejor de lo que esperábamos. La gente ha reaccionado bien a los cambios y nos está ayudando a que recuperemos la 'normalidad' cuanto antes. A pesar de que las 10 mesas permitidas en este local se han llenado desde el viernes, los onubenses han respetado las normas, preguntándonos las dudas y acatando las restricciones. De momento, estamos contentos porque no hemos tenido ningún contratiempo. Sólo, como anécdota, algunos clientes han intentado entrar al local para comer sin acordarse que sólo disponemos de la terraza ahora mismo", cuenta José Carlos Santana, responsable del restaurante.

Para poder realizar la apertura, el encargado de este local nos cuenta cómo han tenido que adaptarse a la normativa para evitar el riesgo de contagios:

"Tenemos la carta con el código QR, para que el cliente la tenga en su teléfono móvil sin necesidad de tocar la carta de papel; hemos implantado la figura de una persona de Prevención de Riesgos Laborales, específica del Covid-19 (esta persona nos informa de todo, tanto a clientes como a trabajadores y además desinfecta mesas y sillas antes de sentarse); para ir a los baños, los clientes pisan una alfombra con desinfectante y luego otra seca para limpiar; disponemos de gel hidroalcohólico, tanto en baños como en terraza y guardamos más de 2 metros de distancia de seguridad entre mesa y mesa", explica Santana.

Otro restaurante que abría sus puertas en la capital la pasada semana es Salvaje Lobster & Burger.

"El pasado viernes, por fin, pudimos abrir nuestra terraza y el balance es muy positivo. La gente estaba deseosa de salir, pero ha respetado muy bien las normas. Aunque, eso sí, tras la apertura del establecimiento, los pedidos a domicilio han caído. Ahora la gente quiere comer en la calle", asegura el propietario, Chema Martín.

Este restaurante fue uno de los primeros de la provincia en abrir el servicio a domicilio. "El día 13 cerramos y a la semana siguiente comenzamos con los envíos a domicilio. Durante los primeros días de confinamiento la gente estaba más reacia a pedir por el miedo a los 'riders' (repartidores), pero a medida que fueron pasando los días comenzó el repunte en los repartos. A finales de abril, el número de pedidos creció y hemos tenido hasta 30 pedidos en un día", explica Martín.

"Inlcuimos nuestro servicio en la plataforma Just Eat, para que los onubenses pudieran encontrarnos más fácilmente, pero la entrega siempre la hemos realizado con servicio propio. Cuando cerramos, tras la declaración del estado de alarma, tuvimos que reducir la plantilla. De 8 personas nos quedamos tres: el repartidor, una persona en cocina y yo. Ahora, por fin, hemos recuperado a todo el personal y volvemos a estar al completo", afirma el responsable del restaurante.

Gracias a la apertura de su terraza y al mantenimiento de los pedidos para llevar y a domicilio, en este local, están actualmente al 50% de sus ventas.

OTROS BARES Y RESTAURANTES RESISTEN CON PEDIDOS A DOMICILIO

Desde cadenas como La Mafia se sienta a la Mesa, Pizzería Huracanes, Burguer King o Cervecería Bonilla; hasta los lugares más tradicionales: Restaurante Azabache, Bar los Maestres o Heladería Portobello. El sector de la restauración se ha adaptado al confinamiento incluyendo sus servicios en las diferentes plataformas digitales de entrega a domicilio disponibles en la capital como Just Eat, Uber Eats o Glovo.

En el emblemático Bar Los Maestres, situado en la Plaza Doce de Octubre de la capital, han decidido esperar hasta la fase 2 (25 de mayo) para abrir el local. Mientras tanto, se mantienen activos desde hace varias semanas gracias a los repartos a domicilio.

"Nuestro restaurante está presente en las tres apps de reparto en Huelva desde hace una semana. A través de las mismas y del teléfono propio de la empresa, hemos tenido hasta 20 pedidos al día, sobre todo, los fines de semana. Estamos contentos con la respuesta de la gente con el servicio, porque, después de todo, estamos produciendo algo", dice el propietario, Antonio Barbosa Maestre.

Pese a la gran demanda del servicio a domicilio, desde el bar aseguran que la gente en los repartos todavía tiene miedo. "Muchos nos dan el dinero en bolsitas de plástico y otros nos piden pagar con tarjeta o a través de Bizum", cuenta Antonio.

Pero, sobre todo, lo que se palpa en los hogares detrás de cada entrega es, dicen desde el bar, agradecimiento. "Nunca antes las personas habían agradecido tanto el trabajo de un repartidor o que les llevasen el almuerzo o la cena a casa. Les brillan los ojos, muestran felicidad y eso, no está pagado", confiesa el propietario de este tradicional restaurante onubense.

Con todo, desde la Asociación Provincial de Bares, Restaurantes y Cafeterías de Huelva, siguen reivindicando al Gobierno medidas para paliar la crisis en el sector y hacer posible que los establecimientos vuelvan a funcionar de manera rentable:

"Seguimos haciendo hincapié en la necesidad de extender la flexibilidad en los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) hasta final de año; la derogación de la cláusula de mantenimiento de empleo durante seis meses y la bajada de impuestos para volver a reactivar el sector", indica Rafael Acevedo.