Marc Martínez: "No nos van a callar con una nómina, queremos estar al día"

Más en pie de guerra que nunca. Así se encuentra la primera plantilla del Recreativo de Huelva tras lo que los jugadores consideran un nuevo incumplimiento por parte de los rectores del club. Esta vez, el portavoz de la indignación de los futbolistas ha sido el capitán Marc Martínez, quien ha tirado de galones y ha elevado el tono de la reivindicación laboral del plantel.

"El viernes se nos dijo que el pago de una nómina iba a ser inminente y seguimos sin cobrar. Yo por inminente entiendo por ya o un día después. Se dijo el viernes y estamos a miércoles, así que no sabemos si creerlo o no, si dar un voto de confianza o no. Igual estoy equivocado e inminente a lo mejor es un mes", ironiza el cancerbero albiazul.

En esa reunión "también nos dijeron que el 31 de diciembre estará todo arreglado y yo me pregunto, ¿por qué no está ya esa solución? ¿por qué hay que esperar cuarenta días más? Eso son dos nóminas atrasadas más y yo no le puedo decir al casero que el 1 de enero le pago cuatro alquileres. Personalmente, me cuesta creer, porque pasan los días y no hay nada", agrega.

El capitán recreativista detalla el calvario por el que atraviesan los jugadores cuando "llegas a casa y tienes que dar una explicación a tu mujer, a tus padres, a tu hermano o a quien sea. Y estás en casa y cada veinte minutos te viene la situación a la cabeza, porque hay que atender las necesidades cotidianas. Lo de no estar al día es inhumano, es inhumano", certifica.

"Es que yo no concibo -continúa explicando-, no me entra en la cabeza un trabajador que no cobre. Si no le puedes pagar, no lo tengas. Y el viernes lo dijimos bien claro, si no hay dinero, que se nos diga, pero nos dijeron que el pago era inminente y estamos a miércoles y no se ha cobrado un euro. Es que no hemos recibido ninguna llamada para avisarnos", denuncia.

"Vamos a hacer las cosas bien. Ya que estamos 'jodidos' y 'puteados', al menos que nos den un poco de cariño, que somos personas, y no nos están tratando como personas", prosigue. Y anuncia que "si hasta el final de temporada vamos a estar así, será insostenible. Si no voy a cobrar, dejo de entrenar y no vengo más, pero si seguimos es porque tenemos la esperanza de que se arregle", proclama.

Una esperanza que no evitará que los futbolistas protesten este sábado en el partido contra el Sevilla Atlético. "Nosotros vamos a reclamar lo que es nuestro y con una nómina no nos van a callar, queremos estar al día. Porque no son sólo los jugadores, hay familias detrás y se está jugando con ellas. Que hay trabajadores que están yendo al club a pedir 50 euros y eso no puede ser".

Respecto a la posibilidad de que se pague sólo a los futbolistas y no a los empleados, el portero califica esa hipótesis como "una vergüenza. Creo que mañana tienen una reunión y no sé que les van a contar a los trabajadores, pero que aquí todos tenemos nuestras necesidades, y ellos más aún, porque imagino que tienen una nóminas más bajas".

En este sentido, el meta catalán señala que "mucha gente se piensa que para la Segunda B nosotros tenemos unas nóminas altísimas y están equivocados. No cobramos 300.000 euros o 200.000 euros como la gente se puede llegar a creer, al contrario, muchos jugadores vivimos al mes y llevamos tres meses sin ver un euro, y así no se puede".