El Cajasol Sporting celebra el aniversario de la consecución de la Copa de la Reina
Esta semana el Cajasol Sporting celebra el primer aniversario de la consecución de su primer título, la Copa de la Reina. Fue un 17 de mayo de 2015, en el Álvarez Claro de Melilla, cuando las blanquiazules se impusieron al Valencia CF en la gran final. Previamente, el once onubense, al que todos consideraban como el rival más débil, había eliminado al Rayo Vallecano y Atlético de Madrid.
"Fue como un cuento de hadas" rememora Manuela Romero, presidenta del Cajasol Sporting. "Un sueño que se hace realidad después de muchos años de trabajo y esfuerzo. Es increíble pasar de sentirse la cenicienta a sentirte la reina y haber logrado algo histórico para nuestro club y nuestra ciudad", señala la dirigente, que vivió la hazaña de su equipo desde el palco del estadio.
En su álbum de recuerdos, la máxima mandataria destaca también "la llegada a Hueva y cómo nuestras familias, amigos y la cantera nos estaban esperando para celebrar la conquista de la Copa de la Reina. Bajar del autobús en la fuente, sentir todo ese cariño y festejar con todos ellos este título que es de todos... Fue muy emocionante y no puedo explicar todo lo que sentí", confiesa.
Desde el banquillo, Antonio Toledo coincide en señalar que "todo fue como un cuento, un precioso cuento con un final feliz, donde la cenicienta demostró ser la verdadera reina. Cuando el árbitro pitó el final, me acordé de los sacrificios y penurias que hemos pasado. También tuve tiempo para reírme de aquellos que nos han puesto tantas zancadillas en nuestra ciudad y que al final no pudieron con nosotros".
En el césped, la protagonista principal había sido Cristina Martín-Prieto, autora de los dos goles del triunfo blanquiazul. "La verdad que no se puede pedir nada más. Creo que cuando se empieza esa competición toda jugadora quiere un registro así. Yo gracias a mis compañeras lo pude lograr. Ganar el título fue el mejor cuento que pudimos contar".
La primera futbolista en alzar la Copa de la Reina fue, sin embargo, Patri Gavira. Al recoger el trofeo, la capitana del Cajasol Sporting sintió "máxima tranquilidad y relajación por saber que se había cumplido el sueño y que éramos nosotras las Campeonas. También tenía ganas de soltarla para que el resto de compañeras la pudieran coger. Me quedo con la felicidad de un equipo unido por las victorias obtenidas".
