José Félix Sequera: "Ser Heraldo Mayor queda en mi corazón y mi mente para el resto de mi vida"

Me agrada muchísimo que se acerque hoy por esta tribuna publica José Félix Sequera Molina, que este año ha hecho feliz a los niños y niñas de Huelva, al encarnar al Heraldo Mayor.
Nuestro invitado de hoy nace el 19/04/1972 en el barrio del Higueral, en una familia trabajadora y cristiana. Con tan sólo 3 años de edad, llegó a su Barrio de la Orden, donde creció, estudió, se relacionó con sus vecinos y amigos.
Actualmente está felizmente casado con Emilia Salguero Carretero y son padres de un hijo de 22 años llamado José Félix.
En referencia al ámbito laboral, tras pasar por varios empleos a lo largo de su vida, todos relacionados con la atención al público en distintos ámbitos, se preparó varias oposiciones, policía local, policía portuaria, conductor en diputación, etc.., hasta que hace 16 años, aprobara unas oposiciones a conductor-perceptor de EMTUSA, en la que actualmente ejerce de Inspector de la Empresa Municipal de Transportes Urbanos de Huelva. Entre tanto le dio tiempo para acceder también a la Universidad en el grado de Relaciones Laborales y Recursos Humanos, la que tiene aparcada por no disponer de tiempo para ella y a la que le gustaría regresar algún día, ya que fue una experiencia maravillosa según nos dice.
Asimismo cuenta, que esos valores cristianos en los que le educaron, tanto en casa, como en la EGB, donde fueron desembocando en lo que hoy en día es uno de sus principales objetivos, el ayudar y darse a los demás que tanta falta hace en los tiempos que corren. De ahí que a la edad de 12 años comenzó su andadura por la Parroquia de Santa Teresa, donde comenzó junto a un grupo de jóvenes de la parroquia a representar un teatro de la pasión de Cristo, germen de la actual Hermanad del Perdón, de la cual fue hermano fundador y ha pasado por innumerables Juntas de Gobierno en distintos cargos y en la actualidad a día de hoy su Hermano Mayor.
Persona sociable, carismático, empático cofrade, rociero y mariano de nacimiento, con alto sentido de la amistad, de no tener nunca un no por respuesta y de seguir siempre de frente ayudando en lo que se lo solicite, optimista por naturaleza, vamos lo que se puede decir muy buena gente.
Cuando lo llamo para proponerle charlar un ratito y que cuente a los lectores de diariodehuelva.es, algunos aspectos de actualidad y recordar cosillas del pasado, no lo duda y con la amabilidad que le caracteriza va respondiendo a nuestras preguntas:
P. - ¿Qué opinión tienes de la situación que estamos viviendo?
R. - Seguimos inmersos en una vorágine de idas y venidas de olas continuas sin tener claro todavía el día de mañana con que noticia nos volveremos a levantar o acostar, sin ver ningún resultado positivo a esta situación pandémica. Todavía no somos consciente de lo que hemos vivido y no podemos llegar a saber el alcance real que todo esto ha tenido a lo largo de casi estos dos años transcurridos.
Por mi experiencia vivida en los primeros momentos de incertidumbres, te reflejo mi experiencia particular, ya que como
trabajador esencial que nos han considerado, hemos estado a pie de calle desde el primer día, sin saber, sin información y sin medios como la gran mayoría de los que hemos estado a pie del cañón. Momentos duros e inexplicables cuando se estaba en
plena pandemia y estábamos todos encerrados y sólo se veía por las calles a los esenciales. Los autobuses vacíos por las calles, que sólo recogíamos a trabajadores para los Hospitales y comercios de alimentación. Calles sordas y sin almas y sobre todo sensación de impunidad por no saber nada de nada de este maldito virus.
Seguimos sabiendo poco de este virus, pero nada de lo que ponemos en practica es 100 por 100 positivo y ayuda a que esto remita. Al final doblegaremos a este virus como todos los que en anteriores épocas hemos doblegado y nos pasará por la cabeza como una mala pesadilla que acechaba con extinguirnos y quitarnos nuestras costumbres y vida social.
P. - ¿Cómo crees cambiará la vida para la pandemia y especialmente en el mundo de la prensa?
R. - Creo que cambiarán algunas formas de relacionarnos, que ya estamos poniendo en prácticas por motivos de distancia social y tal. Aunque por esta zona donde vivimos nos cuesta mucho el no podernos abrazar o dar dos besos como nos enseñaron nuestros mayores. Con respecto a vosotros la prensa, creo que no cambiará mucho, ya que vosotros vuestra labor es informar y mejor o peor todos intentáis ser los primeros en dar la noticia del día, aunque sí creo que hemos tenido demasiada información y en algunos casos hemos llegado a la confusión e incertidumbre por si las noticias eran fiables o no. En definitiva, creo que como todo lo que sube, baja y la prensa volverá a sus noticias e intentará dar sus mejores opiniones.
P. - ¿Te esperabas esta nueva ola de contagio?
R. - Siendo sincero sí, porque los contagios se producen cuando nos relacionamos e intercambiamos actividades, ya sea en el trabajo o en el ocio. Es lógico que encerrados haya menos casos, pero así nunca íbamos a llegar a ser inmunes, las relaciones humanas traen impreso el contacto y el acercamiento y hasta que todos no estemos inmunes o lleguen más variantes del virus a las que no estemos vacunados habrá contagios. Pero las relaciones humanas no las podemos emplazar por una pantalla de móvil o de ordenador. Tenemos que relacionarnos y lo iremos haciendo con todas las medidas de seguridad posible y sobre todo vacunados, para poder así mitigar en mayor medida las consecuencias.
P. - ¿Has pasado miedo en algún momento?
R. - Miedo lo que se dice miedo NO, sí por las personas mayores que me rodean, mi madre, mi suegra, etc.… pero por mi persona no, ya que he intentado llevar esto de la mejor manera y cumpliendo en la mayoría de los casos con las pautas a seguir, mascarilla, distancia social y sobre todo la vacunación, que no dude en ningún momento en ponérmela. Es la mejor forma de intentar parar estos contagios y así la pandemia.
P. - ¿Cómo valoras la labor de los políticos en general ante esta pandemia?
R. - Uff... Eso es un tema peliagudo, partiendo de la base que ha ellos les vino de sopetón como a nosotros, en primera instancia era normal que se equivocaran al intentar hacer lo mejor en el menor tiempo posible. Aunque vivimos muchos momentos de parodia de cuarteto de carnaval, lo que valía por la mañana, ya por la noche o al día siguiente no era efectivo o no era necesario. Han dado muchos palos de ciego, pero era normal el no saber por donde atajar todo lo que se venía encima y sin saber a quien recurrir o acudir, los mismos expertos no daban con la solución, y es aún todavía que hay momentos que no hay una buena directriz. Sin embrago una de las mejores propuestas y así ha quedado demostrado por el momento, era el tema vacunas, que en esa parcela han apostado fuerte y firme. Dando los resultados que han dado y por supuesto con sus limitaciones y en algunos casos con sus aciertos o sus errores. En definitiva, el nivel ha estado para un 5 raspando casi en un suspenso, tanto por un lado como por el otro. Han sido momentos para construir entre todos y dejar a un lado los colores, que solo era uno, el de todos los ciudadanos de España, nacidos o no en ella y que viven y trabajan para llevar adelante un país tan hermoso como el nuestro. El tema financiero mejor no tocarlo, porque a ríos revueltos ganancias de pescadores, ahí lo dejo. No tengo los conocimientos adecuados para valorar la financiación en profundidad, pero siempre se puede hacer algo más.
P. - ¿Qué ha supuesto para ti ser Heraldo mayor este año y cuáles son los momentos que más te han impresionado?
R, - Esta pregunta me hace mucha ilusión, tanto como el nombramiento del Primer Heraldo de nuestra Ciudad, nombramiento que estaré siempre agradecido al alcalde Gabriel Cruz y su equipo de gobierno por darme esa oportunidad. Fue un día inolvidable, vivencias nunca antes vividas y una experiencia que se queda para mi corazón y mi mente para el resto de mi vida. Las caras de ilusión de niños y mayores son indescriptibles, fue un día para enmarcar en nuestra ciudad. Como tuvo a bien nuestro Alcalde y sus concejales de hacerme entrega de un diploma en el que se conmemoraba el ser el primer Heraldo de la ciudad en el año del centenario de nuestra cabalgata de Reyes Magos. Podría alargarme en esta respuesta días y días hablando de ese maravilloso día de ilusión y magia que se transmitió durante todo el recorrido del Heraldo. Como momento especial podría señalar cuando llegue al Ayuntamiento, me bajé de mi cabalgadura y me recibió nuestro Alcalde y todos los niños y niñas de la ciudad para el acto de la entrega de la llave de la ciudad. Fueron momentos que nunca te imaginas que fuesen a pasar. Como ya dije en las redes gracias por la gran acogida que tuvo el Primer Heraldo Real de la Ciudad de Huelva. “Mi Huelva”
P. - ¿Qué proyectos tienes cara al futuro?
R, - Proyectos muchos como todo hijo de vecino, ganas bastante y al final será lo que Dios quiera. De momento seguir formándome y trabajando particularmente en mi trabajo. Como Hermano Mayor de mi Hermandad del Perdón, seguir adelante para culminar y engrandecer la hermandad de la Orden hasta donde sus Hermanos queramos llegar y si todos los Hermanos así lo ven a bien, volveré a los comicios para renovar otros cuatro años de Hermano Mayor de esta bendita Hermandad, para consolidar los grande proyectos patrimoniales y humanos que tiene.
P. - ¿Cómo vives tu la Semana Santa y durante todo el año tu hermandad?
R. - Para mí, la Hermandad del Perdón vive intensamente todo el año, somos al igual que la mayoría de hermandades
de la capital, trabajamos durante todo el año, intensamente para y por nuestra Semana Mayor.
El concepto ha cambiado mucho de las hermandades en la sociedad, todas estamos vivas todo el año, si es verdad que algunas más que otras, pero en definitiva estamos abiertas todo el año, haciendo, inventando y participando con nuestro alrededor, que no es otro que nuestro barrio, nuestros colectivos más vulnerables, en fin, sentirnos parte de nuestra sociedad como tal y, que no se nos vea como algo que funciona solo una semana del año. No es así el concepto cambió para bien y tenemos tanta actividad que nos faltan días del año para poder seguir trabajando por nuestra Semana Mayor y sus tradiciones.
Además de tener nuestros propios quehaceres como entidad religiosa y ayudar a nuestras parroquias en lo que nos solicitan o nosotros les solicitamos a ellas. En definitiva, vivir en comunidad con Dios y el prójimo. Personalmente como Hermano Mayor de la cofradía, mi Semana Santa es más de responsabilidad e intranquilidad para que todo vaya bien, porque el cargo así te lo exige.
Mi Semana Santa es más interna y profunda, ya que siempre he portado a mi Señor del Perdón y desde que cogí las riendas de la Hermandad tomé la decisión de que mi sitio era otro en la cofradía, el Señor tuvo a bien el ponerme al frente de esta bendita Hermandad, en unos momentos duros para estar y así lo asumí y comprendí. No por ello dejo de disfrutar de mi Semana Mayor y de mi cofradía desde otro punto de vista. El costal te da unos privilegios que sólo el que sale de costalero sabe bien y lo aprovecha hasta el máximo. Sé que algún día volveré a esa trabajadera, porque soy consciente de que ningún cargo es eterno y hay que darle paso a los que vienen empujando…. Y al final volveré al principio de mis inicios.
P. - ¿Qué papel han jugado las hermandades durante la pandemia y especialmente en los meses del estado de alarma?
R. - Las hermandades y sus hermanos han jugado un papel importante, junto a sus parroquias en los primeros momentos más duros de esta pandemia, se pusieron a hacer mascarillas de telas las primeras, a repartir raciones de alimento, recaudar ropa y calzado para los sin techo, etc. Las hermandades por su carácter de caridad, no dudaron en arrimar el hombro desde el minuto uno y estuvieron dentro de lo que estaba permitido, que recordemos estábamos confinados y con la libertad de movimiento sesgada, se pusieron los mecanismos disponibles para que se pudiera hacer todo lo que se pudiera o más, para poder mitigar alguna necesidad de algún hermano o simplemente vecino, amigo o necesitado en cuestión.
Momentos en los que nada ni nadie sabíamos que era lo mejor para combatir a esta pandemia. Las hermandades tienen todo el año esas vocalías de caridad que lo mismo buscan comida para el hambriento, que juguetes para que ningún niño se quede sin él. Es labor todo el año, cómo no se iba hacer en los momentos críticos de la pandemia.
P.- ¿Qué quitarías y añadirías de la Semana Santa de Huelva?
R. - Quitar quitar, solo quitaría una pandemia que eso si que persiste y no se agota por los siglos de los siglos en la Semana Santa, y no es otra cosa que los "Yoismos", el yo antes que nada y si yo no estoy en ese tema o en otro tema esta mal hecho o es una infamia lo que estas haciendo. Esa endemia ya va siendo hora de que se extinga, se pierden muchos valores y muchas amistades en este mundo por ese "YOISMO". Las personas nos presentamos a nuestras hermandades para servir a estas y a Dios, no para enriquecer nuestros egos y banalidades, para eso no se está en estos sitios ni en ninguno por supuesto, pero menos aquí. Cada persona se enfrenta a estos momentos con sus mejores deseos y sabiendo que nunca llueve a gusto de todos, pero intenta de que todos seamos uno y eso es muy difícil, porque cada cual tiene su opinión al respecto. Si es verdad que para que todo fluya y naveguemos hacia el norte todos tenemos que remar en una misma dirección que a veces cuesta, pero por el bien común hay que resignarse y no poner palitos a las ruedas para que el carro no avance o avance muy poco, para que cuando YO llegue sea el salvador que quito ese lastre y el carro tire hacia adelante.
También quitaría a los kofrades con k, que no son otros que vean lo que vean, se haga lo que se haga, no les parece bien o ellos lo harían así o "asao", bromas aparte esos son los catedráticos del arte y el modelaje, que por nuestras redes sociales bien que se despachan a gusto, aunque después nos les pida que te echen una mano porque no tienen tiempo o no saben de eso.
Y por añadir, añadiría más compromiso y trabajo al proyecto que se embarcan algunas JUNTAS DE GOBIERNO, aunque no está del todo mal ese compromiso a la vista está los proyectos de algunas de nuestras hermandades.
P. - ¿Qué supondría si este año no volviesen a procesionar las hermandades?
R. - No sería bueno para nadie, tanto para las hermandades como para la socio/economía de todos. Las hermandades generan una riqueza a la ciudad que se ha demostrado con su ausencia en estos dos últimos años. La ciudad vive uno de sus mejores momentos en esa Semana Mayor y en los 40 días de preparativos. La economía de una ciudad acusa el no tener sus hermandades en la calle y eso está del todo demostrado. Por otra parte, las hermandades se crearon principalmente para salir a la calle y dar testimonio de fe por las calles, evangelizando por donde quiera que pasen. Para las hermandades y para una generación que aún no ha visto la Semana Santa por las calles de su ciudad, seria muy triste volverse a quedar en casa.
P. - ¿Qué crees que necesita Huelva para despegar de una vez?
R. - Huelva lo que necesita son más proyectos e inversiones, que ayuden a nuestros políticos para poder dar el salto definitivo por y, para HUELVA, que de una vez por todas nos creamos el potencial que tiene nuestra tierra y que nos dejemos de complejos inútiles de que somos el culo de España. Si es verdad que aquí hay que venir no estamos de paso, pero todo el que viene se quiere quedar y no solo somos playas. Somos gentes emprendedoras, luchadoras, trabajadoras y sobre todo BUENA GENTE. Huelva necesita que creamos en ella y en su potencial.
P. - ¿Cómo fue tu niñez y qué soñabas ser de mayor?
R, - Pues mi niñez fue una muy bonita, en un barrio de trabajadores que eran foráneos del lugar, pero que nos supimos unir para construir una barriada donde los niños jugábamos en la calle a todo lo que se nos ocurría, donde todos nos conocíamos y nos gustaba decir que éramos de La Orden, aunque más de uno era de algún pueblo de nuestra provincia. Fueron unos años que no los cambios por los de ahora con tanta videoconsola y ordenadores. Jugábamos en la calle y lo pasábamos genial. Siempre soñé con ser Policía o Guardia Civil, sirviendo a los demás, de ahí mi vocación de servir al prójimo y trabajar siempre con el público.
P. - ¿Se han cumplido hasta ahora tus expectativas de vida?
R. - Hasta el momento se están cumpliendo. Familia, trabajo y amigos, son PRIORIDAD, pero sin dejar de dar
gracias a DIOS por todo lo que tengo en la vida y no es dinero, la felicidad y la salud compensan todo lo demás.
P. - ¿Quiénes son o han sido tus referentes?
R. - No he tenido mucha referencia, pero si una persona que se me fue pronto, me enseñó el camino para el éxito, para todos los aspectos de la vida, y todavía sigo guiado por él…
P. - ¿Cuáles son tus aficiones preferidas?
R. -. Mi mayor afición es la equitación, que aunque la practico, no lo hago todo lo que quisiera, estoy muy comprometido con todo lo que me hago cargo y mis aficiones son las que dejo siempre a un lado. El montar a caballo te desinhibe de los problemas que hayas tenido en el día, el animal se compenetra contigo y los dos somos uno y cuando trabajamos o paseamos los dos nos entendemos y sabemos lo que queremos. Un mal día se puede solucionar con un compañero como caballo, ellos son más que un animal, más que un caballo, una vez que se llega a tal compenetración somos más que amigos, que bonita es mi afición verdad (MATUSALEM) mi caballo…
José Félix, ha sido toda una gozada este ratito que hemos echado de conversación, me han gustado tus reflexiones y desde luego te deseo toda clase de éxitos en tus proyectos y que sigas tan optimista e ilusionado con tu hermandad del Perdón.