Alberto Garmendia: "En el Recreativo tuve la sensación de disfrutar del fútbol"

Se asoma hoy a esta tribuna pública un ex jugador del Recreativo, gran amigo mío, al que conocí cuando llegó a jugar al Decano y con el que sigo manteniendo contacto habitual, lo cual me alegra, pues José Alberto Garmendia Martínez, que es de quien se trata, es de esas personas de las que te puedes fiar en la vida, es entrañable, de ideas claras, conversador, empático, optimista, trabajador, ahora abuelito, con alto sentido de la amistad, y sobre todo, eso que por aquí abajo llamamos muy "güenagente"

Alberto nace en Zarauz, ya tiene 65 abrirles, se acaba de jubilar y es feliz en su tierra. En la parte deportiva, se inicia como portero en los escalafones inferiores del Alavés, donde fue subiendo peldaños hasta llegar al primer equipo y en la entidad vitoriana está ligada a ella durante 10 temporadas, pero llega el momento de conocer nuevas sensaciones y otros equipos, por lo que marcha al Salamanca para jugar en la máxima categoría del fútbol patrio, donde sólo milita una campaña, para posteriormente fichar por el Albacete donde juega tres años y recalar en el Recreativo de Huelva, donde se compromete por 4 temporadas, para terminar su carrera como futbolista en el Ibiza, donde sólo juega media campaña.

Asimismo reseñar que jugó en la selección de Guipúzcoa, de lo que se siente muy orgulloso. 

Una vez que cuelga los guantes, comienza como entrenador de porteros en el Alavés, 9pm con Mané y seguidamente en el Rayo Vallecano con Pepe Mel como míster.

También ha sido comentarista de la Cadena Ser en Vitoria, analizando los partidos del "glorioso"

Cuando lo llamo para charlar un rato para confeccionar esta entrevista, no lo duda y como no podía ser de otra manera acepta, pero el muy "joio" se da su tiempo y cuando empezamos lo hacemos de esta manera:

¿Qué opinión tienes de la situación que estamos?

De una sensación rara, parece que nos acostumbramos a todo, pero como casi siempre, hay gentes que no valoran nada de lo conseguido hasta ahora, que no ha sido poco, pues por lo menos ya podemos estar más tranquilos. 

¿Después de más de 2 años del inicio de la pandemia, como crees ha cambiado la vida y sobre todo en el mundo del fútbol?

Me gustaría que nos diéramos cuenta, que ha sido una primera vez, y que hay quien no ha aprendido nada, quizás porque nadie se lo esperaba, en adelante hay que estar preparado por si vuelve otro virus. En ralación con el mundo del fútbol, al princio de la pandemia que se nos privó ir a los estadios, pero por lo demás, todo siguió igual y ya está normalizado totalmente.

¿Has pasado miedo en algún momento?

Más que miedo, preocupación en los últimos meses, especialmente por lo que representa una guerra, por lo que deseo que se solucione el conflicto bélico lo antes posible.

¿Qué proyectos tienes cara al futuro y que haces ahora?

Una vez jubilado, mi principal proyecto es disfrutar lo más posible de la vida, eso sí, todo lo que me deje el cuerpo, fundamentalmente con la familia y de mi nieta que es lo que más hago en estos momentos. Ahora lo paso muy bien caminando por el monte y la playa, y desde luego viajar mucho.

¿Qué significó para ti fichar por el Recreativo?

Tuve la sensación de disfrutar del fútbol, con lo que conlleva de bueno y de malo. Allí noté un cambio en mi vida, que pensé no podía ser posible, de lo que había vivido hasta entonces y como lo hice en Huelva. Tengo unos maravillosos recuerdos del Recre y de Huelva en los 4 años que estuve allí. Hace 3 años estuve visitando esa tierra y la verdad es que me lo pasé muy bien.

¿Cuáles son tus mejores recuerdos de tu vida profesional como futbolista?

Sin lugar a dudas, el jugar con la selección Gipuzcoana en mis inicios como futbolista, lo que me hizo dar el salto al Alavés, luego el debut en segunda división con en conjunto vitoriano, los ascensos vividos con Alavés y Albacete, los dos trofeos Colombinos que ganamos los primeros años en Huelva y desde luego, de la cantidad de gente sana que me rodeé.

¿Qué jugadores te han impresionado en tu vida y de qué entrenadores aprendiste más?

Como portero del mítico José Angel Iribar y como jugador Messi. En cuanto entrenadores, de todos se aprende un poco, pero voy a destacarte un par de ellos, Ben Barek, cuando empiezo en el Alavés  y luego de Víctor Espárrago, que fue un amigo y el entrenador con el que me gustaba mucho trabajar.

¿Cuál sería tu once ideal de compañeros tuyos?

Sería de jugadores de mi primer año en el Decano: Portero: Castell; Defensas: Jaime, Tirado, Juárez y Cumbreño; Centrocampistas: Márquez, Luzardo y Cristóbal; Delanteros: Rodríguez, Merayo y Alzugaray.

¿Qué diferencia encuentras entre el fútbol de tus inicios y el actual?

El fútbol es fútbol y seguirá como siempre, pero si es verdad que ha cambiado muchísimo, pues ahora se tienen herramientas que hace que se perfeccionen muchas cosas. En mis inicios no existían los entrenadores de porteros, ni físios, por citar algunos ejemplos que hoy serían impensables, aparte de sistemas técnicos específicos, trabajo en gimnasios, prevención, dietas... Todo es brutal en relación a lo que teníamos entonces.

¿Qué borrarías del fútbol?

Quitaría la falsedad de las gentes que hay dentro del mismo fútbol y, a los padres que sólo ven en sus hijos a Messi, Ronaldo y demás jugadores figuras.

¿Eres partidario del VAR?

Si. Pero con una mayor agilidad, y que no creen tantas dudas a los equipos, pues siempre es bueno tener un fútbol más justo, donde a nadie se le escapa que los arbitrajes han favorecido a los equipos grandes, que además creo que no les hace falta, lo que hay que esperar es que se perfeccione y se pueda disfrutar como decía antes, de un fútbol más justo.

¿Cómo fue tu niñez y qué soñabas ser de mayor?

¡¡Que de tiempo José Luis!!. Jugando todos los días en la calle, practicaba todo tipo de deportes, hasta que un día me puse debajo de una portería y empecé a trabajar y a disfrutar de esa posición en el terreno de juego y conseguí grandes cosas gracias a los consejos de mi padre.

Soñar, no soñaba, iba todos los días a entrenar con mucha ilusión y con la mente puesta en subir peldaños, además veía muy lejos a mis ídolos, Iribar y Arconada. 

¿Quién ha sido tu referente en la vida?

Sin lugar a dudas mi padre con el que empatizaba mucho y me dirigió hasta que llegué a ser profesional. Nunca tuve entrenadores que les gustara trabajar con porteros hasta que fuí al Recre con Víctor Espárrago.

¿Te gustaría añadir algo más?

Que me has hecho recordar ese tiempo tan bonito que viví en Huelva y esa gran familia que es el Recreativo, a los que doy las gracias por la hospitalidad que me brindaron los 4 maravillosos años que estuve con ustedes y desde luego un recuerdo muy especial para la afición por el trato tan exquisito que me dispensaron.

Alberto, amigo, me ha dado mucha alegría que te hayas asomado por esta tribuna pública, que estoy deseando el que podamos coincidir de nuevo como hace tres años, cuando estuviste a vernos en El Portil, desde luego disfruta y dale todos los caprichos que puedas a tu nieta

Un abrazote grande campeón.