Un asunto ocupa hoy el centro del debate en los despachos de la Segunda División B. De norte a sur y de este a oeste, los dirigentes de la competición de bronce estudian el 'truco' del Córdoba -que algunos llaman 'trampa'-, para librarse de todas las deudas que arrastraba el club califal y seguir compitiendo en la misma categoría. Un ardid del que pueden beneficiarse todos los clubes, salvo el Recreativo de Huelva.

Por resumir la cuestión. El pasado diciembre, el Córdoba Club de Fútbol SAD vendió su unidad productiva a dos empresarios de Bahrein, Abdulla Al-Zain (director del fondo de inversión Infinity) y Mohammed Al-Nusuf (secretario general del Comité Olímpico de Bahréin), por 6,7 millones de euros. Estos crearon la Unión Futbolística Cordobesa, pero en lugar de competir en Regional, el nuevo equipo lo hará en Segunda B.

Ardid empresarial

Se trata de un recurso empresarial que permite mantener a un club en la misma categoría cambiando su nombre mercantil, pero sin variar sus señas de identidad y poniendo a cero el contador de las deudas. Con la actual legislación deportiva, se pensaba que esto sólo se podía hacer creando un nuevo equipo que empezaría a competir en la división más baja. La UFC ha demostrado lo contrario.

Porque según ha dictaminado la justicia ordinaria, en la compra de la unidad productiva no sólo se incluyen los entrenadores, jugadores y empleados que tenía el Córdoba CF. También los colores, el escudo, la bandera y los derechos deportivos, que pasan a pertenecer ahora a la Unión Futbolística Cordobesa. Por el contrario, las deudas generadas serían responsabilidad exclusiva del Córdoba CF.

Agravio comparativo

En principio, la Real Federación Española de Fútbol no estaba por la labor de inscribir al nuevo Córdoba en la Segunda B, pues consideraba la operación un fraude y un agravio hacia otros clubes. De ahí que colocara un asterisco y la expresión 'Pendiente de resolución' al lado del nombre del Córdoba cuando se elaboraron los 'sub-grupos'. Ahora, tras la última resolución judicial, la RFEF ha reculado.

Eso sí, en el calendario oficial de la Federación no aparece el término 'Córdoba CF', figurando en su lugar sólo 'Córdoba'. No es una casualidad, pues los 101 equipos restantes vienen con su nombre y apellido. Es decir, la RFEF da por muerto al histórico Córdoba CF (creado en 1954, nueve temporadas en Primera División) y considera que le ha sustituido un nuevo club fundado a finales de 2019.

Pérdida del decanato

Puede que a otros clubes no les importe interrumpir su historia. Pero el Recreativo no puede hacer eso. Aunque la tentación de dejar al Decano sin deudas es tan grande como la propia deuda (se deben unos 25 millones de euros), la venta de la unidad productiva supondría la pérdida del decanato, que pasaría a manos del Sevilla FC. Sería como vender el alma del Recre al diablo. Y nadie en Huelva está dispuesto a ello.