miércoles. 24.04.2024
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El fuego asedia Matsa y sus depósitos de explosivos y propano, arrasa 1.200 hectáreas y llega de madrugada a Zalamea

El fuego llegó a sitiar la mina de Aguas Teñidas, donde se encuentran depósitos de explosivos y propano. Ya se han quemado más de 1.200 hectáreas. Las llamas llegaban de madrugada al término de Zalamea (El Villar) tras afectar a Cueva de la Mora y Monte Blanco, desalojadas de urgencia.
El fuego asedia Matsa y sus depósitos de explosivos y propano, arrasa 1.200 hectáreas y llega de madrugada a Zalamea

El incendio declarado ayer tarde en el paraje de Olivargas lo devora todo a su paso. Ha arrasado casas de campo, fincas de eucaliptos y sitiado la mina de Aguas Teñidas y Magdalena. Ha obligado ya a evacuar Cueva de la Mora y Monte Blanco. Esta madrugada ha llegado a Zalamea. Ha sido evacuada la aldea de El Villar y cortada la Nacional-435.

Allí, en Aguas Teñidas y Magdalena, se libró el frente más dañino porque podía haber provocado una catástrofe enorme si las llamas alcanzan los depósitos de explosivos y los tanques de propano de la instalación minera.

Pero el amplísimo operativo desplegado por el Plan Contra Incendios Forestales (Infoca) de la Junta, los retenes de la mina de Matsa y sus servicios de prevención, que hace dos años ya vivieron un incendio similar, lograron esquivar lo peor. Aunque la devastación ya ha liquidado más de mil hectáreas y expulsado de casa a 200 personas.

Los frentes del incendio se veían por doquier: desde La Zarza hasta Almonaster la Real y gran parte de la serranía de Huelva y hasta era bien visible por la Cuenca Minera de Riotinto. El frente era kilométrico al atardecer, cuando ya habían sido desalojados los más de 200 vecinos que habitan las aldeas de Cueva de la Mora y Monte Blanco, que tuvieron que buscar refugio en El Patrás, hace poco testigo de otro incendio.

El incendio, a pesar de comenzar en Almonaster, no ha penetrado, de momento, en el Parque Natural de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche. Se ubican las llamas y los frentes en su zona más deteriorada por la actividad minera y las repoblaciones de eucaliptos, que han servido de combustible favorito a las llamaradas.

La devastación del incendio se vio desde el principio. El infierno comenzó sobre a las 14.30 y dos horas después la Junta de Andalucía ya había declarado el Nivel 1 y enviado a la zona todo un 'ejército' de efectivos del Infoca a batallar contra unas llamaradas alimentadas por fuertes rachas de vientos y las altísimas temperaturas que marcaba el mercurio, que sobrepasaban los 38 grados. Un cóctel indomable para aplacar la fuerza del que puede ser el peor incendio de la temporada por estos pagos ya demasiado castigados por estos siniestros.

De madrugada, casi 200 efectivos seguían batallando contra las llamas y los trabajadores de la compañía minera de Aguas Teñidas pasaban la noche en vela, mirando de reojo a la dirección del viento y a la devastación que tenían al lado.

Nadie se fiaba esta madrugada del incendio. Porque las llamas han alcanzado ya el término de Zalamea la Real, muy al sur y el viento seguía al acecho. Las llamas han obligado a desalojar una tercera aldea, El Villar, una población de medio centenar de vecinos que se suman a las 180 personas desalojadas en las aldeas de Cueva de la Mora y Monte Blanco, según confirmó el servicio unificado de emergencias 112 de Andalucía.

Para hacerse una idea de lo que es este incendio basta un gráfico satelital distribuido por Emergencias-Sevilla: el fuego es apreciable desde las provincias vecinas de Sevilla, Córdoba y Jaén.

El incendio es tan devastador que a las 2 de esta madrugada en el Centro Coordinador de Sevilla veían caer las cenizas del incendio de Almonaster.

La noche está siendo larga, muy larga, y la tensión se acumula en los retenes que se afanan por mantener las llamas lejos de los hogares y los trabajos de miles de vecinos. Cientos de ellos, de las aldeas de Cueva de la Mora y Monte Blanco, pasan la noche fuera de sus casas.

Al alba, con el regreso de los medios aéreos y los drones se apreciará la devastación.

Las causas del incendio se desconocen y hasta algunas autoridades políticas especulan con que el punto de ignición estuvo en un coche que al parecer ardió en la zona.

Hasta el Puesto de mando se desplazaron ayer la consejera de Agricultura, Carmen Crespo, y la delegada del Gobierno, Bella Verano, después de activar el nivel 1.