Paula Gallardo: "Hay agricultores que han decidido no sembrar flores por miedo a otro estado de alarma"
Gallardo considera que "no creo que cambie la vida a las personas que no hayan vivido alguna desgracia cercana o que muestre el más mínimo de sensibilidad. La mascarilla será el nuevo accesorio por un tiempo en nuestras vidas".
Dentro de ciclo de entrevistas que estoy realizando me hacía ilusión que contestará a mis preguntas Paula Gallardo, la floristera del kiosco rojo del Mercado del Carmen y es que charlar con el esta mujer es recibir una gran dosis de optimismo, el mismo que ella desprende.
Paula es una joven empresaria, alegre, divertida, emprendedora, creativa, empática, madraza, solidaria, trabajadora, idealista, con don de gentes...
Enamorada de su trabajo, no para de seguir documentándose para ofrecer lo mejor en su floristería e inculca su sapiencia, que no es poca, a su hijo Álvaro, que es otro enamorado de la profesión.
Me recibe con esa amplia sonrisa que es característica en ella y la primera pregunta surge rápidamente después de los saludos pertinentes con mascarillas incluidas.
¿Cuál es tu opinión sobre la situación que vivimos desde hace poco más de tres meses?
Estamos viviendo una situación dura, de mucho sufrimiento e incertidumbre. Novedosa para el ser humano que siempre ha creído tenerlo todo controlado. Nos ha cogido a todos por sorpresa.
Aparte de bailar con tus hijos, como he visto en las redes sociales, ¿qué has hecho en el confinamiento?
He estado confinada en casa con mis dos hijos, Álvaro y Paula. Desde el principio decidimos marcarnos una rutina diaria para sobrellevarlo lo mejor posible en 70 metros cuadrados.
Desayunábamos y al ratito ya estábamos haciendo deporte, descansábamos, leíamos, jugamos muchísimo al parchís y por supuesto, bailar. Hemos estado recibiendo clases online con mi querido profe Dan Danza, pionero en Huelva de la danza urbana. La verdad es que nos hemos mantenido bastante unidos y de buen humor que en estos tiempos es tan necesario.
¿Cómo crees que va a cambiar la vida después de la pandemia?
Soy una idealista nata, siempre intento creer que todo es posible pero desgraciadamente, a los hechos me remito, a gran parte de la población parece ser que ya se le ha olvidado.
Tenemos una capacidad de recuperación increíblemente rápida, y me parece magnífico, pero ello conlleva consecuencias negativas. Tanto dolor se olvida en un simple chasquido.
No creo que cambie la vida a las personas que no hayan vivido alguna desgracia cercana o que muestre el más mínimo de sensibilidad. La mascarilla será el nuevo accesorio por un tiempo en nuestras vidas.
¿Cuáles son tus proyectos de cara al futuro?
Lo que nos ha dejado muy claro esta crisis, es la importancia de la digitalización. Así que nos tendremos que reinventar aparte de seguir formándome ya que es algo fundamental y me apasiona.
¿El mundo de las flores ha quedado muy afectado?
La producción de la flor ha sido el sector agropecuario más afectado. La paralización ha sido en los peores meses del año, los de más actividad para la flor.
La venta de flores se ha derrumbado por la cancelación de grandes eventos, pero aún así, yo me siento una afortunada por la respuesta de mis clientes.
Nuestros vecinos gaditanos han perdido el 70% de la producción de todo el año. Espero que nos vayamos recuperando y no tener esta incertidumbre para la siguiente campaña de los Santos.
Una consecuencia inmediata es el incremento del precio pues se han tenido que destruir en campos e invernaderos miles y miles de flores. Hay agricultores no se han atrevido a sembrar de nuevo por el miedo a otro estado de alarma. De hecho muchos se han ido a trabajar por cuenta ajena o han sembrado verduras y hortalizas en lugar de flores.
¿Qué has echado de menos durante el estado de alarma?
He echado de menos ser libre, el cariño físico de mi gente, acudir a mi trabajo para crear con un trocito de naturaleza, que me diera el sol, la brisa...
El 1 de mayo nació mi sobrino Daniel y no pudimos estar.
Algo que siempre echo de menos es la buena información por parte de las grandes esferas. Considero que nos tratan como simples marionetas.
Paula, ¿quiere añadir algo más?
Quiero ser agradecida con todas las personas que me han mostrado tantísimo afecto y solidaridad. Ha sido precioso y muy emocionante.
Paula, como siempre ha sido una auténtica gozada echar contigo un ratito de charla mientras preparabas un espectacular ramo de flores, y es que con ese gusto tan exquisito que tienes, las flores realzan mucho más su belleza.
