Perros guía en Huelva: el camino hacia la autonomía en plena pandemia
En la provincia de Huelva, 12 personas ciegas han podido vivir con autonomía durante la crisis del coronavirus gracias a la compañía de sus perros guía.
Fieles acompañantes que se convierten en sus ojos, regalando a estos onubenses la posibilidad de seguir siendo autónomos para afrontar y superar el día día durante el confinamiento.
"Cuando llegó es como si yo ya viese. Podía ir a cualquier sitio sin necesidad de que nadie me acompañara. Mi perra es mi amiga fiel. Da igual la hora, el día, que haga frío o calor, siempre está dispuesta a acompañarme", cuenta Francisco Algarra, dueño de uno de estos perros guía en Huelva.
Desde la entrada en vigor del estado de alarma por el Covid-19, los perros guía también se quedan en casa y sólo salen a la calle para acompañar a las personas ciegas a cubrir sus necesidades básicas como realizar la compra en un supermercado, adquirir medicamentos en una farmacia o asistir a una consulta médica. "Siempre lo hacen con el arnés que los identifica como perros guía, y sin acercarse a otros perros ni sus propietarios" según la ONCE.
"Si tengo que salir de compras, a dar un paseo o tomar un café, lo hago libremente junto a ella. Me ofrece seguridad y compañía. Es un miembro más de mi familia. Me costaría mucho imaginarme una vida sin ella", explica Francisco.
Y es que, en mitad de un entorno cada vez más complejo, el perro perro guía, que atesora un esmerado adiestramiento, se convierte en el mejor instrumento de movilidad de una persona ciega.
La ONCE creó la Fundación ONCE del Perro Guía (FOPG) hace más de treinta años, adoptando el modelo de las escuelas de perros guía europeas y norteamericanas. Desde la entidad se encargan, en todo los aspectos, de estos animales: crianza, alojamiento y cuidado de cachorros, entrenamiento e instrucción de perros, clínica veterinaria, albergue para perros jubilados y residencia para la formación de los usuarios de perro guía.
Según Nicolás Vargas, director de la ONCE en Huelva, la provincia onubense cuenta con un total de 12 perros guías que regalan autonomía y hacen la vida más fácil a sus dueños.
"Los perros llevan casi 60 días confinados con sus dueños. Sólo han podido salir a la calle para hacer alguna compra o para actividades muy restringidas. Ha tenido que ser duro para estas mascotas, ya que son animales acostumbrados a estar en la calle y a trabajar sin descanso para garantizar la seguridad de los afiliados", afirma Nicolás.
Ante esta situación de pandemia, la Fundación ONCE del Perro Guía recuerda que ni las personas ciegas ni sus perros son capaces de distinguir la distancia de seguridad de dos metros, para evitar contagios.
Por ello, piden ayuda a la ciudadanía para que en el día a día les indiquen, a través de la voz y no el tacto, la forma de proceder en la calle.
"Hay gente que sí toca a mi perra. No deberían hacerlo, pero lo hacen. Es algo peligroso porque cuando lo hacen, al ser animales cariñosos, reaccionan perdiendo la concentración y desviando la atención del camino", afirma el onubense.
