viernes. 26.04.2024
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El patrimonio de Huelva se reivindica: recuperar y restaurar antes que destruir

A pesar de la pérdida del patrimonio onubense durante las últimas décadas, Huelva parece despertar y la conservación de edificios emblemáticos se está convirtiendo en algo habitual.
El patrimonio de Huelva se reivindica: recuperar y restaurar antes que destruir

Algo está cambiando en la ciudad de Huelva... O al menos eso parece respecto a las decisiones que se toman en la capital en torno a la conservación de nuestro legado arquitectónico y patrimonio histórico. Un progreso que ha provocado que durante las últimas décadas, Huelva haya perdido gran parte de su identidad; algo que está cambiando gracias al apoyo de las instituciones 'a lo nuestro'.

Por ello, durante los últimos meses han surgido muchas iniciativas en torno a la restauración del patrimonio onubense y en torno a muchos edificios emblemáticos que van recuperando (o esperan recuperar) su antiguo esplendor poco a poco.

Antiguo Palacio de los duques de Medina Sidonia

Es el edificio civil más antiguo de la ciudad y además da nombre a la calle donde se encuentra situado. Actualmente los onubenses acuden a él para disfrutar de los distintos platos de comida mediterránea que sirve el negocio de ‘La Mafia se sienta en la mesa’ - y muchas veces lo hacen sin saber realmente dónde se encuentran -.

Históricamente, el uso de este palacio se remonta al siglo XVI y se debe al cambio de residencia de los duques de Medina Sidonia que abandonaron el castillo que se encontraba junto a la parroquia de San Pedro en estado ruinoso (y actualmente desaparecido) por un lugar más emblemático y más dinámico en la ciudad. Una localización perfecta que se encontraba junto al nuevo eje de la ciudad: la Parroquia de la Purísima Concepción.

Cinco siglos después, el antiguo palacio de los duques ha recuperado todo su esplendor tanto a nivel social como a nivel arquitectónico ya que uno de los requisitos que se exigía para su nuevo uso era la recuperación íntegra de su estructura. Algo que se ha realizado con creces y que nos permite observarlo cada vez que pasamos por delante de él.

El emblemático arco de la antigua Papelería inglesa

También situada en la calle Palacio, apenas unos metros más hacia adelante del antiguo palacio de los duques de Medina Sidonia, se encuentra otro lugar con sabor añejo que acaba de recuperar también todo su esplendor, tanto en la fachada que lo alberga como en su característico arco. Hablamos de la antigua Papelería inglesa.

Este lugar, que destaca por su maravilloso arco, es un símbolo de la Huelva del siglo XX y fue propiedad de la familia Muñoz, editora del periódico La Provincia, poseedora de una imprenta que dejó grandes testimonios de la época.

En la actualidad, el lugar finaliza su puesta a punto lentamente ya que albergará una sede de la inmobiliaria Lyncis Real State. Por ahora, se puede observar su fachada ya recuperada que sigue sorprendiendo con su arco tan característico y sus ladrillos azulados.

Antigua Escuela de Ferroviarios

Sin duda se trata de un anhelo que persigue la ciudad y los vecinos de la zona desde hace muchos años. Hablar de la antigua escuela de ferroviarios o del antiguo colegio San José de Calasanz es hablar de un edificio emblemático que lleva en desuso 16 años. El inmueble data del anterior siglo y ostenta una parcela de 2.707 metros cuadrados que alberga dos plantas, más torreones que sobresalen entre la singularidad de la avenida de Italia, lugar que lo acoge.

Durante el pasado 2018, se puso en marcha un innovador proyecto de rehabilitación del inmueble para convertirlo en una comunidad de viviendas colaborativas para personas mayores. Una iniciativa de la cooperativa Senior Cohousing Huelva que permitirá recuperar el brillo perdido de este gran edificio que destaca en uno de los laterales de otro gran edificio que está pendiente de su rehabilitación: la antigua estación de trenes.

"En el ánimo de todos está la recuperación de este inmueble emblemático en Huelva. He pasado horas con cada uno de los cooperativistas y puedo decir que aman el edificio. Tienen el máximo respeto por él porque, además, es objeto de su propio futuro", afirma Pedro Ponce, presidente de la Cooperativa. Algo vital para la recuperación de este edificio "que gozó de esplendor años atrás y que volverá a tenerlo con un nuevo uso que conjugará innovación e historia. Y gracias a ello, Huelva ha dado un paso más para salvar su patrimonio", añade.

La antigua sede del Banco de España será el nuevo Museo Arqueológico

Quizás sea uno de los puntos más calientes de nuestra ciudad en la actualidad. Respecto al lugar en el que se encuentra la antigua sede del Banco de España hay poco que decir. Situado en la Plaza de las Monjas, uno de los enclaves más transitados de Huelva, acapara la atención de ciudadanos y de turistas debido a las grúas y láminas de metal que cubren parte de su fachada.

Tras muchos años en desuso, parece ser que el antiguo edificio monetario albergará una vieja aspiración de nuestra ciudad: el nuevo Museo Arqueológico. Un espacio que albergará más de 1.300 metros cuadrados dedicados a contar la historia de nuestro pasado y que contará varias plantas.

El problema reside en los trámites burocráticos para poder ejecutar el proceso de rehabilitación y en varios restos arqueológicos que se han encontrado haciendo las excavaciones y que se pretende que sean visitables.

Según la Junta de Andalucía, este edificio emblemático de la ciudad volverá a brillar con este nuevo uso durante el segundo semestre del año 2021.

Antigua Comisaría de Policía

Sin lugar a dudas, se trata de otro de los edificios más abandonados de nuestra ciudad. Un monumento arquitectónico que reflejó otra época y que sobrevive como puede al paso del tiempo y a la presencia de los okupas.

Situada al inicio del paseo Santa Fe, vigilada por la Parroquia Mayor de San Pedro, la antigua comisaría de Policía Nacional destaca por su fachada enladrillada, su planta rectangular y por su techo acristalado. El edificio fue diseñado por el arquitecto Manue Pérez y González en 1899 y su construcción fue finalizada por Francisco Monís y Morales en 1925. Un reflejo de la arquitectura propia del siglo XIX que se cae a pedazos entre el temor de los vecinos y la desidia de otros.

Aunque el futuro sobre este inmueble es incierto, el primer paso ya se ha dado con la conversión del inmueble en Bien de Interés Cultural que permitirá la conservación del mismo. Hasta entonces, son muchas las iniciativas culturales y sociales que se manejan para devolver la vida a tan preciado lugar.

Fuente de las naciones

Desaparecida en los años 60, consecuencia de las obras de ensanche del Paseo y del comienzo del trasiego del Polo Industrial, la Fuente de las Naciones se convirtió en un lugar de descanso para muchas generaciones de onubenses. Un lugar diferente que servía para disfrutar de nuestra ría desde sus bancos de ladrillos y azulejos.

Sobre la Fuente de las Naciones, se recogen grandes testimonios de la época donde se destacan sus bellas descripciones. Un lugar que se inauguró en el verano de 1917 y en el que destacó durante años por sus decoraciones de cerámica artesonados, hierro forjado y repujado y mármol labrado. Pero por encima de todo, destacaban los distintos escudos de las Naciones Iberoamericanas en cada uno de sus asientos, dotándola de un ambiente renacentista con aire neomudéjar.

Por ello, el Puerto de Huelva se ha propuesto recuperarla dentro de sus muchos proyectos de integración con la ciudad. Una guinda perfecta a la remodelación del paseo marítimo y de la transformación que se está realizando en la avenida Francisco Montenegro.

“Es directamente la mejor de las ubicaciones para unir tradición y cercanía con la ría y su paisaje”, afirma el divulgador local Diego Lopa. Una labor vital para recuperar esa Huelva que nunca se ha ido del todo. "Me siento feliz y estoy repleto de imágenes de mi adolescencia, de los eucaliptos, del Plus Ultra, del tren, de los paseos por el muelle, de los partidos en la Pista y en los Flechas Navales", añadió Lopa en sus redes sociales.

Un cambio de tendencia

Sea como sea, parece que por fin Huelva está valorando lo que significa realmente cuidar su patrimonio para mantener vivo el legado de su historia. Aunque sea como dice el refrán: más vale tarde que nunca.