viernes. 26.04.2024
El tiempo

Montoya va en serio: Intenta implicar a una exnovia en el crimen de Laura Luelmo

El abogado, Miguel Rivera, asegura que su defendido declarará acerca de un martillo sobre el que Montoya ha hecho mención y que "él sabe dónde debe estar", además de que el acusado ha insistido en que estuvo con su exnovia en una gasolinera el día de los hechos,
Montoya va en serio: Intenta implicar a una exnovia en el crimen de Laura Luelmo

Miguel Rivera, el abogado defensor de Bernardo Montoya, presunto asesino de la maestra zamorana Laura Luelmo en El Campillo, espera que su cliente dé hoy un vuelco al caso. Primero confesó el crimen ante la Guardia Civil y hasta pidió disculpas a la familia. Y hasta parecía que no quería salir de prisión para no repetir hechos semejantes. Pero eso fue al principio. Al cabo de un mes, Montoya intentó implicar a una ex novia en el asesinato. Y ya no se declara culpable y achaca al consumo de drogas las primeras versiones y palabras que pronunció ante las autoridades policiales y judiciales. 

Lo que ocurre es que Bernardo Montoya, si quiere que le crean, deberá dar pistas y aportar datos fehacientes de la existencia del martillo que se emplearía en el crimen, de su paradero y pruebas de que efectivamente su ex novia estaba en la casa, en el coche y en el lugar de los hechos en los momentos cruciales del brutal asesinato. El abogado espera que Montoya lo haga y Miguel Rivera dice que éstá más cerca de creerlo que antes, cuando se hizo cargo de la defensa.

En declaraciones a los periodistas antes de comenzar la comparecencia de Montoya por videoconferencia, el letrado ha manifestado que su defendido va a declarar acerca de un martillo sobre el que Montoya ha hecho mención y que "él sabe dónde debe estar", además de que el acusado ha insistido en que estuvo con su exnovia en una gasolinera el día de los hechos, de la que debe existir una grabación, pero que Rivera ha dicho "no conocer" y de la que además cree que "se ha borrado al haber pasado más de un mes de los hechos".

Igualmente, el abogado ha explicado que quiere pedir a la jueza un nuevo elemento de prueba que se refiere a la intimidad de su defendido, por lo que hasta que no tenga consentimiento expreso del mismo, no puede hacerlo público.

Miguel Rivera ha afirmado también que Montoya aporta datos de algunos lugares de la vivienda del acusado donde estuvo su excompañera el día del crimen, así como detalles de cuando estuvo con la misma y los momentos previos de conocer a Laura Luelmo que, según ha detallado, no había relatado con anterioridad, para recabar "elementos probatorios".

Una vez expuestos estos supuestos elementos de prueba a los que hay que añadir unas supuestas huellas de la exnovia en un coche, será la titular del Juzgado la que decida qué hacer al respecto, si los va a considerar como tal o no, para lo que habrá que esperar a la decisión judicial.

El letrado de Bernardo Montoya se ha mostrado confiado en que la declaración de su defendido va a sorprender incluso al propio jurista, ya que va a contar datos que él mismo ignora. Acerca de las consecuencias que puede tener esta nueva declaración para la expareja de Montoya, Rivera ha señalado que su trabajo no es perjudicarla ni promover su detención, sino buscar "el beneficio de mi defendido".

Cuestionado sobre la veracidad de los datos que presumiblemente ha aportado el acusado, el letrado ha subrayado que cada vez confía más en la última versión de Montoya, por el peso de las pruebas que presumiblemente ha presentado.

La declaración de Montoya es por videoconferencia en los Juzgados de Valverde del Camino y tiene por objetivo ofrecer una nueva versión de los hechos que provocaron la muerte de la profesora.

Esta citación judicial de hoy se produce a raíz de la versión dada por Montoya en la cárcel donde se encuentra, en la que inculpaba de la muerte de Laura Luelmo a su exnovia, versión que motivó que la titular del juzgado dictara una providencia a principios de marzo para que volviera a declarar. Lo dijo ante los funcionarios que le custodiaban.

Montoya se encuentra interno en la cárcel sevillana tras su ingreso la madrugada del día 22 de diciembre en el módulo de enfermería del centro penitenciario con un interno de apoyo para reforzar su vigilancia. No obstante, dada la entidad del delito investigado en el caso, se consideró oportuno su traslado de la provincia de Huelva.

La titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Valverde del Camino decretó ese sábado 22 a las tres de la madrugada el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza para Bernardo Montoya. La jueza lo investiga, por el momento, por los presuntos delitos de asesinato, detención ilegal y agresión sexual.

Asimismo, Instituciones Penitenciarias aplicó a Bernardo Montoya el artículo 75 que regula medidas para salvaguardar la vida o integridad física del recluso a través de la adopción de medidas que impliquen limitaciones regimentales, dando cuenta de ello al juez.

Los hechos sucedieron el pasado mes de diciembre, cuando la joven profesora natural de Zamora Laura Luelmo desapareció en El Campillo, donde residía tras ocupar una plaza de profesora en un instituto de Nerva. LLevaba allí apenas una semana cuando ocurrió todo. Tras su desaparición el día 12, su cuerpo sin vida se encontró el día 17 con signos de violencia en un paraje de los alrededores de la localidad. Un día después, Bernardo Montoya fue detenido como principal sospechoso.