El Recreativo ni puede ni debe planificar la próxima temporada
Mientras el grueso de la afición albiazul celebra el exitoso presente de su equipo, surgen voces que también piensan en el futuro y reclaman que el Recreativo comience a planificar la próxima temporada. Se pide la renovación de Óscar Carazo, José María Salmerón y la columna vertebral de la plantilla que tiene al Decano tercero en la tabla clasificatoria.
Habitualmente, febrero es mes de renovaciones, pero nada se ha hecho en el Nuevo Colombino. Y nada se hará en marzo. Ni en abril, Ni en mayo. Lo impiden las especiales circunstancias del Recre en el terreno deportivo, económico e institucional. Porque el onubense es un club distinto, encadenado, por el momento, al día a día, sin opción de planear nada.
En lo deportivo, todo indica que el Recreativo jugará los 'play-offs', pero aventurarse más allá es fútbol-ficción. El desenlace de una eliminatoria por el ascenso es tan aleatorio y depende de tantos factores que es obligado concluir que el equipo tienes tantas opciones de subir como de quedarse en la Segunda División B. Y sin conocer en qué categoría vas a jugar, el margen para planificar es mínimo.
De todos modos, mucho se ha avanzado en este apartado. Según ha podido averiguar DiariodeHuelva.es, todos los componentes del primer plantel, incluido Salmerón, tienen contratos con cláusulas de renovación automática si logran el ascenso, salvo Álex Lázaro, Iván González y Carlos Martínez que firmaron por dos años. Sólo los cedidos Pablo Andrade, Alberto Ródenas y Charaf no tienen garantizada su continuidad en Huelva en caso de subir.
Claro que todo está supeditado al dinero y a la política. El Decano no puede elaborar un presupuesto para la campaña venidera sin saber en qué división competirá (los ingresos generados en Segunda División no tienen nada que ver con los de Segunda B fundamentalmente por los derechos televisivos) y sin saber si continuará en manos del Ayuntamiento o se venderá en verano a un inversor privado.
Y en este último supuesto, el nuevo dueño del Recreativo seguramente vendría acompañado de su propio director deportivo, entrenador y jugadores, como sucedió en su momento con el aspirante Jesús León y su apuesta por Luna y Berges. Se trata de una incógnita que además no se puede despejar hasta las elecciones de mayo. Bajo estas coordenadas, sólo queda disfrutar del presente y esperar que los acontecimientos traigan el mejor de los futuros.
