viernes. 29.03.2024
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"Estamos embargados por un préstamo que pagamos en 2013"

Una familia de Almonte denuncia que el banco no facilita al juzgado las cantidades abonadas
"Estamos embargados por un préstamo que pagamos en 2013"

Una familia de Almonte denuncia que el banco no facilita al juzgado las cantidades abonadas

Un pequeño retraso durante seis meses en el pago de la cuota de un crédito bancario al que estaban haciendo frente desde hacía seis años ha sido suficiente para que esta familia viva un auténtico calvario. El banco les llevó ante la Justicia en 2010 y, desde entonces, “estamos embargados por una deuda que terminamos de pagar en 2013”, aseguran.

El caso se remonta al año 2002, cuando Francisco José Moreno Martín y Ana Consuegra Ballesta, un matrimonio residente en Almonte, piden un préstamo de unos 17.500 euros para la compra de un coche en una oficina sevillana de lo que entonces era El Monte, hoy día La Caixa, tras lo que posteriormente solicitan una ampliación para afrontar los gastos de la comunión de su hija, por lo que el crédito asciende finalmente a 21.000 euros aproximadamente.

Desde entonces, Francisco José y Ana pagaron religiosamente su cuota mensual de 157 euros durante seis años, tras lo que, durante un periodo de seis meses, no pudieron hacer frente a la totalidad de la cuota. El ‘delito’ de esta familia fue que una de sus hijas enfermó, por lo que Francisco José tuvo que pedir una excedencia de un año en su empresa para cuidar a su hija en Andújar, la localidad natal de Ana, a donde se trasladaron porque el clima de esa zona era más aconsejable para la enfermedad de su hija.

Una vez allí, se ven obligados a volver porque la niña, de 15 años, no podía ser admitida en el centro en el que tenía que ingresar hasta no cumplir los 16 años, por lo que regresan a Almonte y Francisco José comienza a tramitar su reincorporación en la empresa, un trámite que se prolongó durante un periodo de seis meses, justo el tiempo que esta familia no pudo hacer frente a la totalidad de la cuota, “aunque nunca dejamos de ingresar parte de ella”, aseguran.

Francisco José y Ana no salen de su asombro cuando, en 2010, un juzgado les exige el pago de 10.600 euros, la cantidad que les faltaba por pagar para terminar todo el crédito. En ese momento, “nos acercamos a la oficina del banco y llegamos a un acuerdo verbal”, tras lo que “en unos meses ingresamos unos 1.500 euros”.

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Todo quedaba así solucionado cuando, en 2011, se encuentran con dos nuevas sorpresas. La primera es que les retienen la cantidad que les tenía que devolver Hacienda, por lo que la entidad financiera no había dado la orden de que se suspendiera el proceso judicial, y la segunda, que los 1.500 euros que habían abonado no habían sido ingresados por el banco en la cuenta en la que tenían el préstamo, sino en otra cuenta bancaria que tenían abierta para su hija, por lo que “no nos habían cargado nada”.

Ese fue el inicio de un calvario en el que todavía están sumidos. En estos seis años, nunca han dejado de retenerles la devolución de Hacienda y entre esa cantidad y las cuotas que han seguido ingresando “ya hemos pagado entre 15.000 y 16.000 euros de los 10.600 que nos exigían, por lo que el préstamo ya está más que pagado, con intereses de demora incluidos”, sostienen. Sin embargo, “todavía estamos embargados” y “este año también nos han quitado los 760 euros que nos tenía que devolver Hacienda y los 200 euros mensuales de la ayuda que nos corresponde por ser familia numerosa y tener una hija con discapacidad”, añaden.

Esta situación obedece, según la versión del matrimonio afectado, a que desde la oficina de La Caixa que les concedió el préstamo, situada en la avenida Eduardo Dato de Sevilla, aún no han respondido al requerimiento judicial en el que se les pide información sobre las cuotas abonadas. En base a ello, “según las cuentas  del juzgado, lo único que hemos pagado han sido las cantidades embargadas”, por lo que “todavía deberíamos unos 3.000 euros”, explican.

La familia considera que el banco debió haber retenido desde el principio una tercera parte de la nómina de Francisco José, como “suele hacerse en estos casos”. Sin embargo, la que por entonces era directora de la oficina, según denuncia la propia Ana Consuegra Ballesta, “me dijo que nos iba a tener puteados 10 años”, apostilla.

Por último, la familia critica que "La Caixa, con tantas fundaciones y ayudas para discapacitados, en nuestro caso no han mirado que nos están quitando los 200 euros que recibimos por tener a una hija con discapadidad".