jueves. 16.05.2024
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Indignación entre los aficionados por los privilegios de Comas

Los seguidores del Recreativo agolpados en torno al Palacio de Justicia consideran excesivo el despliegue policial en injustas las medidas de seguridad. Pasaron horas de pie y bajo un sol abrasador para recriminar al empresario.
Indignación entre los aficionados por los privilegios de Comas

Habían pasado varias horas de pie, muchos de ellos soportando un sol abrasador y bajo las inquisitorias miradas de la Policía Nacional. Y entonces, cuando el cansancio comenzaba a hacer mella, sonó el ruido de un motor acelerando.

Algunos sólo pudieron ver pasar el taxi, otros más afortunados se quedaron con la imagen de Pablo Comas abandonando los juzgados por la puerta lateral. Todos gritaron e increparon al empresario madrileño y unos pocos salieron corriendo tras el vehículo. Un momento fugaz de furia después de tanto tiempo de espera.

"Tenia ganas de verle la cara al sinvergüenza que ha hundido al Recreativo y ya me he quedado tranquilo", dice Miguel, enfundado en una camiseta albiazul del Decano. Es uno de los aproximadamente cincuenta seguidores recreativistas que han aguardado impacientes la salida de Pablo Comas repartidos en varios grupos en torno al perímetro del Palacio de Justicia.

Eva también se ha equipado para la ocasión con los colores del Recre y está indignada por los 'privilegios' del madrileño. "Este señor tenía que llegar a una hora y ha llegado mucho antes, tendría que haber hecho su declaración como cualquier ciudadano, entrando y saliendo por la puerta principal, y no a escondidas. Espero que la próxima vez lo veamos montado en un furgón policial, camino de la cárcel", sentencia.

Su compañera Mari Loli se queja de que había "mucha seguridad, cuando aquí venimos pacíficamente para que esta persona vea que Huelva y los aficionados del Recre no lo queremos. Y si ha venido aquí a declarar, será por algo. Y espero que si hay delito, que lo pague", añade.

Más comedido, Carmelo explica su presencia en la Alameda Sundheim desde otro punto de vista. "No he venido para recriminarle nada a Comas, si no para que viera que hay muchísima gente que está en su contra. Encima que nuestros gobernantes no nos tienen en cuenta, no vamos a consentir que venga a alguien de fuera a quitarnos algo que es nuestro de toda la vida".