UGT critica los métodos de recolección del siglo pasado y pide a Asaja un convenio justo

Desde  UGT-FICA  Huelva negamos la mayor a la patronal del campo Asaja, y manifestamos que no ha existido una oferta de empleo como  debe  ser.  No compartimos en absoluto  que  una  oferta  de empleo desincentivadora y para cubrir  prácticamente  el expediente,  se utilice para plantear un recorte en el modelo que ha permitido durante cuarenta años, impedir el éxodo  masivo  de  nuestros  pueblos y aunque precariamente,  cubrir  los  elementos más básicos de subsistencia para los trabajadores y trabajadoras del campo onubense .

El problema del  campo es mucho más complejo que eso. Uno de sus más graves problemas es que las condiciones laborales ni  son las adecuadas para personas de más de cincuenta años ni es competitivo socialmente con las condiciones de otros sectores  económicos de nuestra  provincia. Tengamos en cuenta que el Convenio Colectivo del Campo es el más bajo de toda Andalucía  y también en España y por consiguiente hace que las ofertas de empleo no puedan competir con otros sectores como el turismo, que ofrecen mejores condiciones de trabajo y económicas.

Por eso plantear una oferta de empleo a cinco meses vista  sin garantizar una renta adecuada y por muy poco tiempo de trabajo, hace que la mayoría de la  gente afectada ni la hayan tenido en cuenta y apuesten por otras ofertas de empleo que,  para  ese mismo periodo que ofertaban, vienen desarrollando en otros sectores.

El campo de Huelva tiene también un problema estructural, que reside en que no aplica las mejores técnicas productivas para lo que a recolección se refiere, y mantiene unas condiciones de recogida de la fresa de los siglos pasados, por no decir, de cuando empezó el hombre a explotar la agricultura.

Por eso,  hacemos el envite desde el Sindicato y pedimos: constituir una Mesa Sectorial, en  la  que  intervengan los  empresarios,  los sindicatos  y la pata más importante,  las Administraciones,  para consensuar  un  Plan  Decenal  de  Mejora  de  las  Explotaciones Agrarias, que consolide lo que ya tenemos y favorezca caminar en la implantación de la industria transformadora, que permita dejar mayor valor añadido en nuestra provincia.

Desde el Sindicato entendemos que hay que implementar con urgencia ese plan de mejora y dignificación del trabajo en el  campo, con ambiciosas medidas de apoyo desde las Administraciones, a la inversión, a la investigación, a la innovación y al ​desarrollo, que permitan  hacer  más  competitivo  el  sector y a la vez consolidar y fidelizar la mano de obra autóctona  que  necesita el trabajo del campo onubense, reduciendo la alta penosidad que dichas labores tienen.

Hay que ir de manera gradual a la mejor técnica disponible, como es el cultivo hidropónico de la fresa. Un sistema que hará más eficiente y sostenible dicho cultivo y le  permitirá competir con más fortalezas, tanto con nuestros competidores  europeos, como con los países menos desarrollados, que vienen empujando con fuerza. Este sistema tiene muchas más ventajas en todos  los órdenes. Se puede aprovechar mejor la superficie de cultivo, aumentando la producción. Se puede hacer con mejores instalaciones que generan menos residuos plásticos. Y, al poder trabajar en circuito cerrado,  se aprovecha totalmente el agua  y los fertilizantes, con  el  consiguiente ahorro y eliminación de cualquier afección al medio.

Y además, con ser importante la apuesta por este cambio de modelo productivo, no es suficiente. Los empresarios deben  también hacer un esfuerzo en el Convenio Colectivo, para reducir el negativo diferencial que tenemos con  respecto a otras provincias andaluzas y  del  resto del país. En esta negociación del convenio en la que nos encontramos,  se debe dar un salto  cualitativo y se debe pasar de un convenio de mínimos a un convenio que refleje la pujanza y los beneficios que genera  el  sector ,  haciendo también  partícipes a los trabajadores y trabajadoras que contribuyen a ello, con un convenio colectivo más digno y justo y que elimine la precarización de las condiciones de trabajo, con salarios homologables a cualquier provincia de nuestro país.