jueves. 28.03.2024
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'Jumbo’: La aventura de Mónica y Raúl, dos empresarios de altos vuelos

La cafetería Jumbo , un espacio que se encuentra en la céntrica calle Béjar, donde hace años estuvo situado uno de los bares más emblemáticos de la capital onubense, como fue 'La esquinita te espero'
'Jumbo’: La aventura de Mónica y Raúl, dos empresarios de altos vuelos

Perder contacto con la gente es una desafortunada parte de la vida. Es difícil mantener todas tus relaciones, sobre todo, mientras pasan los años y conoces a más personas. Y eso me aconteció con Mónica González , una chica que le perdí la pista hace un par de años cuando trabajaba en el ya desaparecido salón de juegos Majestic que estaba ubicado en la plaza de Los Litri y a la cual le tenía bastante aprecio por su amabilidad, profesionalidad y simpatía y con la cual charlaba de vez en cuando de música, una de sus grandes pasiones que había heredado y compartido con su padre, Jesús González.

De hecho, Mónica era la vocalista del trío ‘Fénix’ y anteriormente del conjunto ‘Reencuentro’ con el que compartía cartel con su padre, que lamentablemente se marchó muy joven.

Pero hace unos días, gracias a Concha , una amiga en común, he tenido la satisfacción de volver a coincidir con ella y comprobar que sigue siendo aquella joven encantadora y risueña, de la que estaba convencido de que lograría alcanzar todas aquellas metas que se propusiera. Y aunque su vida ahora anda de aquí para allá, ya que trabaja como azafata de vuelo en las aerolíneas Plus Ultra.

Con ella pude departir un rato, junto a mi amigo Carmelo Merchán, mientras tomábamos una cerveza y un pincho en la recién inaugurada cafetería Jumbo , un espacio que se encuentra en la céntrica calle Béjar de nuestra capital y donde hace años estuvo situado uno de los bares más emblemáticos de la capital onubense, como fue 'La esquinita te espero' y que acaba de reinventar la amiga Mónica, junto a su socio y compañero de trabajo Raúl Hernández , convirtiendo el citado local en algo más que en un establecimiento acogedor donde reunirse con amigos y donde encontrar riquísimos desayunos, tomar unos aperitivos al mediodía o unas copas por la tarde noche. O al menos, eso es lo que me quiso transmitir, ya que según me seguía manifestando, ha decidido mezclar lo gastronómico, con lo artístico y lo bohemio. Y para ello, algunos días de la semana abre la pista para que se puedan desarrollar en ella clases de salsa o bien actuaciones musicales.

Durante la visita a Jumbo pudimos compartir momentos entrañables con los componentes de la murga ‘Los fresquibiris’ , máxime cuando uno de sus componentes es nuestro amigo, compañero y mucho más Manu Suero . Su disfraz y su representación gira alrededor de aquellos famosos que se marcharon en plena efervescencia de su carrera y que podían haber optado por aquello de lo que tanto hemos oído hablar de la crío preservación: el almacenamiento de nuestro cuerpo en hielo, a bajísima temperatura, con la esperanza de ser revividos en un futuro mejor ¿Quién sabe si algunos de ellos las futuras generaciones lo podrán disfrutar en vivo y directo?

Según cuenta las crónicas periodísticas del día de hoy, pese a tener la gran responsabilidad de abrir noche en el Gran Teatro, siendo “la primera agrupación que saca una sonrisa de principio a fin. Localista 100 % que es como tiene que ser. Un repertorio hecho para Huelva y se nota. Gran pase”. 

Pero siguiendo con nuestros protagonistas de esta vuestra sección, Mónica y Raúl, sin duda, están consiguiendo cambiar el estereotipo de bar-cafetería tradicional, consiguiendo un espacio espacioso, cómodo y luminoso, y lo más importante con mucha personalidad.

No han podido evitar recoger en su decoración, pese a que como ellos mismos insistían, aún quedan algunos otros muchos detalles, convertir el espacio en una terminal de un aeropuerto muy especial, donde pudimos comprobar como en los paneles de llegadas y partidas, figuraban localidades onubenses muy vinculadas a estos emprendedores de altos vuelos, como Lepe, Ayamonte, El Perrunal o Valverde. Tampoco olvidan el ambiente tropical que por su trabajo está tan cerca de ellos ya que el charco lo cruzan constantemente y ello también forma parte del ambiente de Jumbo.

Antes de despedirnos, ambos nos invitaron a volver e incluso nos animaban a disfrutar con las clases de salsa. Nosotros nos comprometimos a volver para disfrutar de su exquisito ambiente y saborear una copa escuchando a Mónica deleitándonos con una magnífica interpretación de esos boleros que tanto le gustan o ese día que comparta escenario junto al amigo Manu, otro de los grandes artistas, aparte de excelente periodista, comunicador, y mil cosas más, que por suerte tenemos la fortuna de contar en esta bendita tierra.