Mónica Rossi, la candidata de La Izquierda, pone el foco de atención en la gente de Huelva

Tiene la candidata de La Izquierda (Izquierda Unida, Podemos, Iniciativa del Pueblo Andaluz) a la Alcaldía de Huelva una ventaja considerable para la cosa pública: se preocupa, le preocupan los más débiles, los desfavorecidos, un perfil social que en Huelva es demasiado común debido a la precariedad laboral y los bajos salarios. Así que Mónica Rossi Palomar, 55 años, diplomada en Trabajo Social y trabajadora social de profesión atesora un perfil idóneo para trabajar desde el Ayuntamiento en un proyecto que cambie esta inercia en Huelva.
https://twitter.com/monicarossipal/status/1658820682170392576?s=46&t=NyjTPJW-hK5NcC_W2KvffA
Lectora empedernida, incluida la novela negra, a Mónica Rossi le gusta usar de referente a las mujeres de clase obrera que afrontaron los años de la Revolución Industrial. Aunque no huye de otras letras, como las letras fantásticas y las lecturas feministas.
Aficionada al cine, fan del contestatario Ken Loach y apasionada del cine español tiene un truco para relajarse en esta vorágine política: “Me gusta tejer lana”. Le vine de los tiempos de su abuela, así que coge aguja y la emprende a mandobles con bufandas y vestidos.
Prefiere la canción de autor y tararea letras de Silvio Rodríguez, Mercedes Sosa, Rozalen o Carlos Cano. Son voces que le recuerdan los momentos de lucha, que también los hay. Y si busca la calma, la música clásica o Sinatra. No olvida el flamenco, al contrario. Para ello escucha a Rocío Márquez. En su carta de aficiones también están todo tipo de actividades, desde el teatro a la poesía y el Taichí, técnica oriental que ayuda a la relajación.
De las cosas pendientes que dejó en la vida, montar en bicicleta.
Guarda Mónica Rossi una curiosa ascendencia italiana a través de su padre, en Verona. Una mezcla que, junto a sus raíces maternas gallegas, le empuja a viajar por lugares y espacios de su vida más cercana.
Cuenta Mónica Rossi que en esos viajes le impresionó como en las iglesias católicas de la bretaña francesa se recuerda a los asesinados por el fascismo, a los integrantes de la Resistencia, a judíos deportados y soldados. Y le sorprende... porque en España pasa lo contrario, se oculta a esta gente que dio su vida por l libertad.
Mónica es una enamorada del mar y prefiere los horizontes costeros a las ciudades de interior y reconoce que le costaría trabajo adaptarse.
Mónca Rossi es familiar. Mucho. Le encanta cantar y hasta hace sus pinitos junto a su padre, que está en el coro de la parroquia. Y se arranca por ‘Sole mío’. Es una forma más de disfrutar de su tiempo y sus espacios, junto a su familia, sus padres, su marido y su hijo y su pareja.
Reconoce que no le gusta hacer planes a largo plazo y vive lo más cercano.
Una faceta un tanto desconocida para el gran público de Mónica Rossi es la de persona profundamente creyente. “La fe en Dios me impulsa a luchar por la justicia, independientemente de que entiende pecados y errores de la iglesia”.
Pertenece a la Hermandad Obrera de Acción Católica, un colectivo que se ubicó al lado de la lucha obrera en unos tiempos en los que el poder y la curia española se situaron al lado de los golpistas. Precisamente en esas reuniones con los curas obreros se forjó la persona que es hoy. Hija y nieta de obreros pudo estudiar y formarse gracias a lo público por eso lo defiende en estos tiempos que corren en los que se comercializa hasta con la sanidad o la educación.
Ahora, Mónica Rossi, quiere que en Huelva haya otra forma de hacer las cosas y se cuide a su gente.