Fitag anuncia que hará "todas las movilizaciones que sean necesarias"
El sindicato Fitag-UGT ha expresado este viernes su rechazo a la decisión de la empresa Ence de cerrar la planta de celulosa que la compañía tiene en la provincia de Huelva, por lo que le ha exigido que "mantenga la actividad" y ha anunciado que hará "todas las movilizaciones que sean necesarias" para conseguir la continuidad de la actividad industrial.
En un comunicado, Fitag-UGT Huelva ha mostrado de manera contundente su rechazo "más absoluto" al pretendido cierre de la fábrica en ENCE en Huelva ya que es "una decisión legalmente ilegítima puesto que se basa en una reforma laboral que fue un timo electoral a los ciudadanos españoles".
Han recordado desde el sindicato que "alegan nueve meses continuados de pérdidas cuando en los últimos ejercicios anuales se han obtenido grandes beneficios y aún en el que estamos, una vez se cierre el ejercicio, el Grupo Ence seguramente también tendrá buenos resultados".
Por tanto, "no existen verdaderamente causas objetivas que justifiquen una medida tan drástica y radical". Más bien lo que hay son argumentos y circunstancias "positivas" que aconsejarían buscar "otras alternativas" al cierre, como son que "los problemas de la madera pueden ser superables y que con ello el precio de la pasta entraría en valores mucho más competitivos incluso que los de los propios centros del grupo, como es el caso de Pontevedra".
Así, acusan a la a la empresa de actuar de "mala fe", puesto que "en ningún momento se había manifestado que la situación de la empresa pudiera desembocar en esta decisión sorpresiva, unilateral y traumática". "Más bien lo que ha habido siempre es un discurso de continuidad y compromisos, como el convenio colectivo, el último ERE firmado, que iban dirigidos a conseguir consolidar los números del centro de Huelva en los ratios más competitivos", añaden.
En consecuencia, consideran esta decisión "una puñalada por la espalda" no sólo a los trabajadores, empresas de servicios, y a los pueblos afectados, sino también a la propia provincia de Huelva en general. Y todo porque es "una empresa que ha generado beneficios en los últimos años, que el grupo también sigue ganando y teniendo beneficios, que la pasta es, en función de los ciclos del mercado perfectamente competitiva".
Se trata de una empresa de alto contenido social en Huelva que generará un efecto dominó "muy grave" en los sectores de servicio, transporte, el campo, el puerto, con una incidencia laboral "muy negativa, de en torno a 2.500 familias en toda la provincia".
Así las cosas, exigen que la empresa mantenga la actividad del centro de Huelva, y con el objetivo de evitar el cierre, realizarán todas las movilizaciones que sean necesarias, pidiendo a las administraciones provinciales, autonómicas y nacionales se haga "un frente común y se obligue a la empresa a rectificar".
"Después de 40 años sufriendo una actividad como la de Ence, la empresa debe asumir su responsabilidad social corporativa y plantear otras soluciones que no sea el cierre con recolocaciones que no se sabe donde van a darse, puesto que la empresa no tiene en la actualidad capacidad para absorber los excedentes que provoca el cierre de Huelva", concluyen.