viernes. 29.03.2024
El tiempo
Sierra

Un proyecto de investigación se asienta sobre el trabajo de las asenteras y las apañaoras

Un proyecto de investigación se asienta sobre el trabajo de las asenteras y las apañaoras. Estos dos sectores centran un trabajo de investigación que se está llevando a cabo en Galaroza.

Proyecto leo echando asientos
Proyecto leo echando asientos
Un proyecto de investigación se asienta sobre el trabajo de las asenteras y las apañaoras

La fabricación de muebles siempre fue un elemento distintivo de la población de Galaroza. Sus carpinteros han obtenido justa fama por un sinfín de productos de la máxima calidad y por su habilidad en su elaboración.

Entre este ámbito, han destacado las sillas de estilo cachonero, que poblaron y alegraron las fiestas de medio mundo. El universo de la fabricación de sillas en Galaroza ha estado rodeado de un amplio catálogo de indicadores patrimoniales que han dejado huella en la localidad. Todavía hoy, sigue impregnando la cultura local y aportando matices muy queridos en el pueblo, especialmente para las asenteras, “mujeres que echaban los asientos”.

Lo mismo sucede con la castañicultura, el cultivo y el apaño de la castaña, fruto identitario del Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche. También ha sido muy feminizado el oficio de la recogida del fruto, siendo las apañaoras unas grandes profesionales que siguen mostrando gran oficio y saber.

Estos dos sectores centran un trabajo de investigación que se está llevando a cabo en Galaroza y que se ha denominado ‘Estamos apañás: documentación de los oficios y saberes de las mujeres apañaoras de castañas y asenteras de sillas de aneas de Galaroza’. Su objetivo es investigar, poner en valor y visibilizar las expresiones de patrimonio inmaterial que pertenecen a las mujeres que identifican y definen al pueblo de Galaroza.

Está siendo desarrollado por la Asociación Matilde para la Protección e Interpretación del Patrimonio Glocal de Minas de Riotinto, y ejecutado por Leonor Fernández Cañuelo, antropóloga, educadora y artífice de esta iniciativa, que ha sido puesta en marcha por el Ayuntamiento de Galaroza desde el Área de Igualdad y el Área de Cultura, a través de la subvención ‘Asistencia económica de concertación 2022, actuaciones en materia de igualdad’, concedida por la Diputación de Huelva.

Entre sus objetivos está fomentar la participación responsable y activa de las protagonistas portadoras de expresiones culturales de patrimonio inmaterial; documentar los oficios y saberes, gastronomía y expresiones orales para su salvaguarda como expresiones del patrimonio cultural inmaterial que otorgan identidad local; impulsar la continuación y el aprendizaje intergeneracional de las expresiones patrimonialistas orales que pertenece a las mujeres de Galaroza; reforzar la autoestima y el empoderamiento de las mujeres de Galaroza en el proceso de reapropiación y afirmación de su propio patrimonio cultural; conocer las expresiones de patrimonio inmaterial que pertenece a las mujeres que identifican y definen al territorio local, considerando las características ecológicas, paisajísticas, históricas, socioeconómicas y simbólicas propias; y favorecer la participación de la ciudadanía y los colectivos sociales en el proceso de apropiación identitaria de las propias expresiones culturales que nos definen y nos identifican.

La iniciativa, según sus desarrolladores, quiere además crear y fomentar redes de colaboración territorial entre las y los vecinos y los colectivos sociales y culturales de los pueblos de la provincia de Huelva. Y expresar a través de la información proporcionada por las informantes participantes, la  riqueza cultural y patrimonial que viste nuestros pueblos y “que sale de las cocinas para decir bien alto que las mujeres rurales existimos, que creamos, que curramos, que nos inventamos cada día, que somos la voz de las memorias colectivas que nos recuerdan quienes fuimos, quienes somos y quienes queremos ser”.

La Asociación Matilde para la Protección e Interpretación del Patrimonio Glocal de Minas de Riotinto, adjudicataria del proyecto, trabaja tanto en la Cuenca Minera como en los pueblos y comunidades rurales de la provincia de Huelva, desde la antropología y la intervención social comunitaria, “para reconocer y dignificar la memoria colectiva, la etnohistoria y las expresiones de patrimonio inmaterial (oficios, saberes, rituales, gastronomía, cuentos y canciones) que pertenecen a las clases trabajadoras, a las invisibilizadas, a los mineros y mineras, a las mujeres de los pueblos portadoras de una sabiduría ancestral que cuida, que anuda, que teje, que echa jornales, que cuida y que sostiene la vida”.

Comentarios