La Virgen del Carmen recibirá el cariño de los cachoneros
Como en casi todos los pueblos, los habitantes de Galaroza no podrán disfrutar de sus fiestas patronales como tradicionalmente por causa de la pandemia. Ya el año pasado, se tuvieron que suspender actividades ancestrales, como La Bajada de la Virgen del Carmen desde su morada en la Ermita del Carmen hasta la Parroquia de la Inmaculada Concepción, así como La Subida, que la devuelve habitualmente al templo ubicado en la Plaza de Los Álamos.
Tan sólo se organizaron algunos actos entre los que destacó la misa en el centro del pueblo, desarrollada con todas las medidas de seguridad impuestas por la Covid-19, al aire libre y con la talla fuera de su ermita.
Este año, la Hermandad de Nuestra Señora del Carmen ha decidido continuar con las medidas de prevención, manteniendo la suspensión de los traslados y las procesiones de la patrona cachonera. De todas formas, para ofrecer a los fieles la posibilidad de rendir homenaje a la imagen, ha programado una misa el 16 de julio, a las 21.00 horas, así como la tradicional novena.
Aunque la intención inicial era realizar los actos en la explanada de Los Álamos, al pie de la ermita, finalmente se trasladarán a la iglesia parroquial. A tal fin, la original talla de la Virgen del Carmen embarazada se ha trasladado al templo ubicado en el Pueblo Abajo, permaneciendo la ermita cerrada durante estos días.
La novena se desarrollará desde el 17 al 25 de julio, en horario de 21.00 horas, excepto el último día y el domingo 18, que serán a las 12.30 horas. Las habituales predicaciones quedarán a cargo del párroco Juan Alamillos.
Los fieles podrán asistir al templo hasta completar el aforo máximo según las disposiciones legales vigentes. El domingo 25 tendrá lugar una ofrenda floral y un homenaje a las mujeres que se encargan del cuidado de la virgen y de la ermita del Carmen.
La talla no visitaba la parroquia desde el 25 de julio de 2019, día en que, tras realizar la Procesión de Tercia por la mañana alrededor del Pueblo Abajo, regresó a su ermita por la noche en la procesión de La Subida.
Durante esta estancia se podrá contemplar un marco nunca visto hasta la fecha, ya que la imagen quedará expuesta por primera vez al pie del magnífico retablo de la parroquia que fue restaurado por la Comisión Parroquial a finales de 2019. La procedencia de esta pieza barroca se pensaba que estaba en el desaparecido Convento de la Victoria de la localidad sevillana de Estepa, pero recientes estudios del doctor en Historia Jorge Alberto Jordán Fernández, atribuyen su origen a la también estepeña Iglesia de la Concepción.
