Primeras alegaciones contra proyectos de hidrógeno en la ría de Huelva
Ecologistas en Acción de Huelva es crítica con el modelo de producción y comercio de Hidrógeno, patrimonializado por la gran industria ligada a los combustibles fósiles y defiende usos de cercanía y aprovechamientos endógenos y con control social, asegura en su escrito.
A su juicio, "la opción del hidrógeno verde debe plantearse en un escenario de transición hacia un modelo basado en la soberanía energética y la descarbonización y no son las trabas administrativas quienes están impidiendo una correcta gestión de su producción sino por el contrario, la ausencia de planificación, la insuficiente ordenación y la renuncia a priorizar proyectos, lo que aumenta los riesgos de sobredimensionamiento y de generación de una peligrosa burbuja".
Según Ecologistas, "es fundamental la garantía de que la fuente energética sea renovable, para ser considerado un proyecto de Hidrógeno verde como tal, sin que la mera acreditación de energía limpia (tal como se entiende ahora en la UE) baste para asegurar este origen renovables. Dicha garantía no queda justificada en la propuesta de CEPSA, ni se especifica el origen concreto de la misma".
Gran consumo de agua de la planta
Otro de los problemas planteados en las alegaciones ecologistas es "el gran consumo de agua que exige esta nueva tecnología energética. En el proyecto se incluye una demanda de cerca de 900.000 metros cúbicos anuales, a la que habría que ir sumando las solicitudes de concesión de agua de proyectos similares que se publicitan en la misma zona".
La organización Verde asegura que "la Junta de Andalucía debe garantizar el equilibrio de las demandas en la situación actual de sequía y ante las previsiones de menores recursos debidas al cambio climático, y para ello deberá restringir nuevos usos, que puedan acentuar el déficit hidrológico en territorios como el nuestro.
Ecologistas en Acción considera también fundamental el respeto a los espacios protegidos del entorno, y el proyecto de CEPSA se sitúa en la orilla del Paraje Natural Estero Domingo Rubio, que forma de la Red Natura 2000 de la Unión Europea, ya muy acosado por la agricultura intensiva de la zona.
Por ello Ecologistas en Acción propone "la eliminación de herbicidas agroquímicos en el control de la vegetación, sistemas de cerramiento permeable al paso de la fauna autóctona y soterramiento de tendidos eléctricos para evitar colisiones y electrocuciones, dentro y fuera del nuevo recinto, así como el el seguimiento de sus repercusiones sobre la avifauna y los Hábitats de Interés Comunitario".
Para la asociación ecologista onubense hay que tener también en cuenta "la excesiva concentración de nuevos proyectos industriales y energéticos en la ría de Huelva, ya muy castigada por estas instalaciones, que generan una irresponsable acumulación de riesgos de accidentes y contaminación que afectan gravemente a las personas y los ecosistemas del entorno".
Las alegaciones de Ecologistas en Acción destacan también que "resulta contradictorio que proyectos de Hidrógeno verde como el que se presenta, estén llevados a cabo por empresas cuyo objetivo fundamental es el refinado del petróleo y sus industrias auxiliares. En línea con la necesaria descarbonización, no hemos encontrado un compromiso explícito de la empresa de sustituir líneas industriales “fósiles” en su planta de la Rábida, para ser sustituidas por el uso de Hidrógeno verde, por lo que reivindicamos la progresiva sustitución de los combustibles fósiles y no la mera adición con combustibles alternativos como el H2 verde".
