martes. 30.04.2024
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El administrador de la finca ‘Las Madres’, condenado por un delito medioambiental

La sentencia demuestra que el empresario lleva años detrayendo sin autorización aguas públicas de este paraje natural y lo condena a pagar 50.000 euros
El administrador de la finca ‘Las Madres’, condenado por un delito medioambiental

La sentencia demuestra que el empresario lleva años detrayendo sin autorización aguas públicas de este paraje natural y lo condena a pagar 50.000 euros

El Juzgado de Instrucción Número 1 de Moguer ha condenado al administrador único de la finca 'Las Madres', Antonio Medina Muñoz, por usurpar aguas públicas del Paraje Natural de la Laguna de las Madres. Esta finca es explotada por la empresa agrícola Sur Hortícola S.L. La sentencia ha fallado a favor de la Comunidad de Regantes Palos de la Frontera (CR Palos) que lleva más de 7 años denunciando este delito medioambiental, y que se personó como acusación particular junto a la acción pública de la Fiscalía de Medio Ambiente.

De este modo, el empresario agrícola ha sido condenado a pagar más de 50.000 euros y se le ha ordenado el cierre y el sellado definitivo de esa captación ilegal de aguas públicas. Hay que recordar, además, que Medina Muñoz acumula, también, dos expedientes administrativos abiertos por parte de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, por la construcción de una balsa que afecta al dominio público hidráulico y por esa misma captación ilegal, respectivamente.

En la sentencia ha quedado probado que el administrador único de Sur Hortícola S.L. ha usurpado agua de un espacio protegido y paraje natural como es la Laguna de las Madres entre los años 2009 y 2011, sin pagar ningún precio y obteniendo un beneficio económico ilícito. No obstante, y hasta que se produzca el sellado definitivo de esa captación ilegal, a día de hoy se sigue produciendo esta continua extracción de agua sin autorización, por lo que CR Palos va a instar a las administraciones a que garanticen la ejecución de esta sentencia y se impida, de forma definitiva, la usurpación ilícita del dominio público.

Por otra parte, también ha quedado demostrado en la sentencia el ánimo defraudatorio del condenado, poniéndose de manifiesto cuando el denunciado, aún con disponer de todo el  agua superficial necesaria de la CR Palos para el riego de las 200 hectáreas con las que cuenta la finca, se niega a utilizarla porque con ello evita pagar el precio del agua que debería consumir legalmente, ya que como recoge la sentencia: el agua de la laguna “le sale gratis y no está sujeta a ningún tipo de control”. Y es que, tal y como se expresa en la sentencia: “el denunciado, a sabiendas de que el agua debe pagarse cuando se usa para fines privados, se dedicó a extraer todo el agua necesaria para abastecer a su finca. Es más, dejó de instalar un contador volumétrico, con la intención de evitar así, cualquier tipo de control por las autoridades competentes, y multiplicar el gasto descontrolado de agua”.