Luis Chaparro: "Tras mi jubilación he aprendido a coser y a hacer macramé"

A Luis Chaparro Lobo, nuestro invitado de hoy a esta serie de entrevistas, lo conocí hace bastantes años, cuando trabajaba en la tienda El Barato de nuestra capital y siempre hemos mantenido muy buena relación, incluso ahora que ya no vive en esta tierra, pues una vez jubilado ha vuelto a su Sevilla natal, nos vemos de vez en cuando, aparte de estar en contacto en las redes sociales
Luis estudió en la Borbolla y en el Portaceli de la capital hispalense. Con 14 años, cuando salió del colegio, el director del mismo lo colocó como aprendiz en Alsesa, una empresa de tejidos, ámbito en el que desarrolló su carrera profesional. Después pasó a Tejidos Alé y, por último, a Tejidos Andalucía, donde estuvo muchos años, hasta el final de su vida laboral. En esta empresa ocupó el puesto de encargado en sucursales, y además viajaba como comercial por toda Andalucía. Era el responsable de abrir tiendas nuevas también por toda la geografía andaluza, contratando, formando y supervisando a los nuevos trabajadores. Con Tejidos Andalucía pasó los últimos 9 años hasta su jubilación en Huelva, donde se abrió El Barato.
Siempre ha sido Luis una persona cordial, entrañable, sevillista y recreativista, buen profesional, conversador, con alto sentido de la amistad, servicial, cordial.... Buena gente.
Contacto con él para proponerle esta entrevista y como no podía ser de otra manera acepta, y empezamos de esta manera:
P. - ¿Qué opinión tienes de la situación que estamos viviendo?
R - Es un completo desastre: una pandemia, una guerra, los precios de la luz y el gas por las nubes, la corrupción política, que ya nos acompaña desde hace muchos años.... ¿Qué quieres que te diga? Ojalá cambie todo para mejor, pues de verdad que nos lo merecemos.
P. - ¿Cómo crees que cambiará la vida después de la pandemia?
R. - La vida ya nos ha cambiado, aunque entiendo que volveremos a la llamada "nueva normalidad", si bien es cierto que seremos más cautos. No creo que esto nos haga cambiar nuestra idiosincrasia: abrazarnos, besarnos, dar la mano... Eso forma parte de nuestra cultura, ¡afortunadamente!
P. - ¿Te esperabas una guerra en Europa en pleno siglo 21?
R. - ¿Quién se la iba a esperar? Parece una película...
P. - ¿Has pasado miedo en algún momento?
R. - No, durante la pandemia me he cuidado mucho y me sigo cuidando. Quizás sí me preocupa un poco el futuro: las pensiones, el trabajo de la gente más joven.
P. - ¿Qué te parece la labor de los políticos en general ante la pandemia?
R. - Tengo una opinión muy pobre de los políticos: hay demasiada corrupción y no hacen nada para evitar el sufrimiento de la gente.
P. - ¿Qué proyectos tienes para el futuro y qué haces ahora?
R. - Para el futuro mis únicos planes son disfrutar, ¡ya he trabajado mucho! Me gustaría dedicarme a viajar más, ahora que ha pasado un poco el Covid. Soy una persona muy activa, así que siempre estoy ocupado con algo: montar en bicicleta, jugar al pádel, he aprendido a coser, a hacer macramé, sigo haciendo mis trabajitos en casa y en casa de mis amigos cada vez que me lo piden, siempre he sido muy manitas.
P- ¿Qué significa para ti Huelva y tejidos el Barato?
R. - Es difícil explicar todo lo que significa para mi Huelva, es mi segunda ciudad, mis padres y mi familia son de Galaroza. Por su parte, el Barato me dió nueve años de felicidad y la oportunidad de conocer a tanta gente maravillosa.
P. - ¿Te costó adaptarte a esta tierra cuando te viniste a trabajar aquí y qué recuerdos guardas?
R. - ¡No me costó lo más mínimo! Me sentí muy bien acogido e hice buenas amistades rápidamente. Guardo muchos recuerdos: las tertulias del bar Suizo con mis amigos, trabajar en el Barato con el amigo Reina, disfrutar de su buena comida a diario, las tardes de verano que almorzaba en Punta Umbría sardinas asadas...
P. - ¿Por qué recomendarías a alguien que no conozca Huelva que viniera?
R. - Sobre todo, por su buena gente. Además, por su gastronomía que tiene de todo, mar y tierra. Les recomendaría que fueran a tomarse una cerveza al Suizo Chico, si es posible contigo y conmigo, a pasear por el ensanche del puerto o a sentarse un ratito al sol en la Plaza Las Monjas....
P. - Por cierto, ¿te gusta Lopetegui como entrenador del Sevilla?
R. - A pesar de la polémica, tengo que decir que a mí sí me gusta. Estamos en tercer puesto de la Liga y nos va a llevar una vez más a la Champions.
P. - ¿Qué tiene de especial el pádel que te tiene dominado?
R. - Lo que me enganchó en primer lugar es lo divertido que resulta, lo rápido que pasa el tiempo cuando estás en la pista. Además, es una actividad muy social, gracias a la cual he conocido a mucha gente estupenda. Últimamente además le estoy enseñando a jugar a mi hija, y es un momento muy bonito el que pasamos juntos.
P. - ¿Qué recuerdos guardas de tu niñez y qué soñabas ser de mayor?
R. - Recuerdos de mi niñez tengo muchos: jugar al fútbol, montar en las bicicletas de alquiler que usábamos por aquel entonces, la larga caminata para ir al colegio mientras jugábamos y nos peleábamos, montar en el tranvía con mis padres... ¡Ah! Y mi primer oficio: repartir leche en un triciclo por los Remedios. En aquella época vivíamos el día a día, así que no tenía un oficio de preferencia, aunque ahora que lo pienso, me habría gustado ser charolista como mi padre, que trabajaba en los astilleros Elcano.
P. - ¿Quiénes han sido tus referentes en la vida personal y profesionalmente?
R. - Mi tío Rafael, de Galaroza, que me llevaba a cazar y comíamos pajaritos, y mis primos también de Galaroza, que eran pintores de sillas sevillanas. ¡En mi familia hay muchos pintores! Profesionalmente, conté con un buen mentor, que fue mi jefe y me enseñó mucho de lo que sé hoy en día sobre mi oficio.
P. - ¿Con qué personaje te gustaría tomarte un café, por qué y qué le preguntarías?
R. - Con Cristóbal Colón, para preguntarle si llegaron antes ellos o los vikingos.
Luis, no dudes en darme un toque cuando vuelvas por Huelva, nos espera un ratito de tertulia en el Suizo Chico
Un abrazote grande amigo