viernes. 26.04.2024
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Los coquineros onubenses "discriminados" con respecto a los hispalenses

Los coquineros de Punta Umbría, Isla o Ayamonte no pueden faenar en Doñana, mientras que sus compañeros sevillanos pueden recolectar el molusco en toda la costa onubenses.
Los coquineros onubenses "discriminados" con respecto a los hispalenses

Los coquineros onubenses están en pie de guerra.  La renovación de licencias para recolectar el cotizado molusco bivalvo en la costa onubense sigue encallada. Esta parálisis burocrática está generando un gran malestar dentro del sector, principalmente entre los profesionales del área occidental de la costa de Huelva que denuncian sentirse "discriminados" con respecto a quienes pueden faenar en Doñana, gran parte de ellos afincados y oriundos de las localidades sevillanas. 

    Los mariscadores consideran un agravio comparativo que municipios como Villamanrique, Pilas, Carrión de los Céspedes o Sanlúcar de Barrameda puedan faenar en la costa de Huelva únicamente por el hecho de que su término municipal se encuentre enclavado dentro del Espacio Natural y colinde con el Parque. Para más inri, no sólo se les permite faenar en la costa almonteña de Doñana, sino que su licencia les da derecho a peinar todo el litoral onubense en detrimento del resto de coquineros, que nunca pueden acceder al interior de las ‘fronteras’ del Parque, donde se encuentra la mejor zona de cría y engorde de coquinas.   

     Así lo denuncia Emilio Jaldón, presidente de la Sociedad de Mariscadores y Coquineros Nueva Umbría, quien lamenta que “el patrimonio de la costas de Huelva sea explotada por personas que no viven ni residen en la provincia”. Pero más allá de esta circunstancia, ve incongruente que los coquineros del Espacio Natural pueden faenar hasta la misma frontera con Portugal.  No obstante, los profesionales de Punta Umbría, Cartaya, Lepe, Isla Cristina y Ayamonte tienen acotada su faena sólo a este tramo de costa y sin posibilidades de acceder a  Doñana. 

     El delegado de Agricultura, Pesca, Ganadería y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía, Álvaro Burgos, siempre ha manifestado públicamente que era necesario que no se produzcan distinciones entre los mariscadores con licencia para faenar en la costa onubense. Una “demanda histórica” del sector que nunca termina de concretarse en realidad, lamente con pesar Jaldón. 

    En la actualidad, en Huelva hay unas 300 licencias para faenar coquinas, 80 de las cuales corresponden a las que concede el Parque Nacional de Doñana (en su mayoría gente de Sevilla). Jaldón se siente engañado por la administración autonómica que llevan años comprometiéndose a finiquitar este agravio, si bien insiste que, a la hora de la verdad, “las promesas se las lleva el viento".

   Barcos que esquilman los caladeros.

     El sector tiene además que lidiar con otro problema de mayor envergadura: los barcos que se inmiscuyen en la orillan y esquilman los caladeros arrasando con todo lo que encuentran, puesto que los motores hacen un enorme daño a los moluscos. Precisamente para evitar este daño a la fauna marina la normativa indica que esas embarcaciones a motor  sólo pueden trabajar a más de 25 metros de la baja mar. Sin embargo, Emilio Jaldón indica que como acredita la foto que nos facilita, "al final terminan acercándose cuánto quieren para “arrasar con todo lo que encuentra”, envalentonados por el hecho de que "las autoridades políticas hagan caso omiso a las denuncias". 

Por otro lado, añade Jaldón, además de la mala praxis de estos profesionales el sector sufre la competencia desleal de  “personas jubiladas que con sus lanchas de recreo se dedican de manera furtiva a la pesca de la coquina. Sólo entre Isla Cristina y Ayamonte existen más de una treintena”, denuncia.