Grandes masas de eucaliptos alimentan un fuego que lleva ardiendo cinco días

Cuarta noche de incendio. Y hay desazón porque dura ya demasiado tiempo así que los afectados (que se cuentan por miles) comienzan a hacerse preguntas y buscar las razones y el el por qué de tanta devastación.

Lo primero que se ha desvanecido es la primera pista que había sobre el punto de ignición del gran incendio de Olivargas que tiene en jaque a la provincia de Huelva. Sí, aquel 'famoso' coche incendiado que supuestamente pudo originar y desatar este infierno que nos aflige y angustia. La sospecha fue lanzada por las autoridades. Lo deslizó la delegada del Gobierno, Bella Verano.

El coche incendiado en el entorno donde comenzó el fuego 'no consta' ni en los avisos de Emergencias ni en los partes del Consorcio Provincial Contra Incendios de la Diputación. Ni tampoco ha sido confirmado tal anuncio por la Guardia Civil.

Quienes sí han apuntado una explicación al nivel de desastre que ha ido adquiriendo el fuego han sido la consejera de Agricultura de la Junta, Carmen Crespo y el mismísimo presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno. La primera reconoció que la masa forestal existente (eucaliptos y pinos) habría alimentado las llamas aportando el combustible necesario para su rápido, desastroso e irrefrenable avance.

Y el presidente de la Junta en su visita de hoy a la 'zona cero' del gran incendio ha reforzado esa apreciación. Moreno  ha explicado en una rueda de prensa que "los efectivos se están enfrentando a un incendio terriblemente complejo por la difícil orografía del terreno, por la masa forestal, que es eucalipto y prende de forma rápida, y, sobre todo, por las condiciones climatológicas adversas, con rachas de viento de 50 kilómetros por hora que hacían muy complicado el control del incendio".

Sin embargo, remarcó que “la audacia y la experiencia del equipo técnico del Puesto de Mando Avanzado han conseguido, probablemente, evitar más daños materiales y humanos”.

Y es que la zona más afectada por el fuego, que alcanza desde el Paraje de Olivargas y Aguas Teñidas a los Pinos de Valverde y desde Sotiel, Calañas hasta El Campillo, aloja extensas plantaciones de eucaliptos que luego son utilizados por la empresa Celulosa.

En la mayoría de las imágenes que nutren los reportajes gráficos sobre el fuego, incluidas las del Plan Infoca, aparecen las grandes masas de eucaliptos 'ayudando' a engordar un incendio devastador para Huelva y que, cuando se valore, supondrá millones de euros en pérdidas económicas.

Amén de miles de hectáreas (ya van más de 10.000 perimetradas), granjas, naves, casas de apero y labranza y otras edificaciones privadas que aun no se ven en la estadística. Animales muertos, abrasados.

Es un milagro que aun no haya provocado daños en los tendidos eléctricos y de alta tensión que alimentan las plantas de las explotaciones mineras de Aguas, Teñidas, Mina Magdalena, Sotiel y Riotinto. Así lo confirmó ayer tarde Endesa a diariodehuelva.es.

En los trabajos realizados para contener el fuego en Aguas Teñidas y en otros focos se puede ver perfectamente cómo el incendio avanza entre la selva de eucaliptos que corona esta parte del Andévalo y la Cuenca Minera.

Ya pasó en Galicia. Ya lo dijo su presidente, Alberto Núñez Feijoo, que declaró la 'guerra' al eucalipto cuando estos veranos atrás ayudó este árbol importado a arrasar Galicia. Hoy ha sido su colega Juanma Moreno el que ha apuntado al eucalipto como 'ayudante', como 'cooperador' necesario para el avance y el descontrol de las llamas.

Para colmo, las redes se han llenado de comentarios donde se critica que no se haya tenido en cuenta a los trabajadores de Celulosa y a la misma empresa para colaborar en el control de esas áreas que para ellos son tan familiares.

Habrá tiempo de sustanciar las causas y consecuencias de un fuego que, como antes el de Riotinto en 2004, y luego el de Doñana en 2017, pasará a la historia.

Ahora, sigue. Y sigue generando angustia, destrucción y desalojos por doquier.

Ayer tarde mismo daba otra cornada por el frente de El Campillo y hacía saltar las alarmas al prender junto a las balsas de residuos mineros de Riotinto. Otro polvorín de jaras y terreno abandonado a su suerte que puede alimentar más si cabe al monstruo. Y que está repleto de escombros fácilmente inflamables. Ya se verá.

Ni el propio director del Centro Operativo Regional (COR) del Plan Infoca, Juan Sánchez, se atreve a poner fecha de control del fuego. Para el Plan Infoca es muy difícil evaluar cuándo se podrá estabilizar el gran incendio de Olivargas (Almonaster) que ha saltado todas las barreras, afectado a once localidades, obligado a desalojar a 3.000 personas y cortado carreteras en plena Operación de regreso de tráfico de agosto.

El Infoca habla en condicional: "si fueran condiciones óptimas, podríamos hablar de... a lo largo de esta noche (domingo al lunes) o mañana, avanzar en una estabilización, pero si las condiciones siguen como hasta ahora, con vientos con rachas por encima de 50 kilómetros por hora, rolando además en distintas direcciones, pues desde luego esa estabilización durará más".

El científico y catedrático de la Universidad de Huelva Jesús de la Rosa ha mostrado varios mapas con la dirección del viento esperada para las próximas horas.

Y las indicaciones no son muy halagüeñas para esta madrugada. También se puede ver la evolución del incendio desde herramientas de la NASA.

Hace un momento el Plan Infoca lanzaba un nuevo aviso a navegantes: En #IFAlmonasterLaReal, los vientos aún con predominio de componente norte, han vuelto a ganar intensidad y comportamiento errático. La zona más sensible a ésta hora de la tarde, está al sur del incendio y allí concentramos nuestros esfuerzo con el uso de maquinaria y fuego técnico. Ese sur está en el entorno de Valverde y sus urbanizaciones aledañas que han sido ya desalojadas y también en el área de La Zarza y Calañas.

A estas horas se combate intensamente contra unas llamas que no cesan. Y van más de tres días y cuatro noches.